El documento describe los graves problemas de contaminación en el estado de Nueva Esparta, Venezuela, debido a la descarga de aguas residuales sin tratar y basura en sus lagunas y playas, lo que pone en riesgo la biodiversidad local y causa problemas de salud. Las plantas de tratamiento de aguas residuales no funcionan correctamente y las autoridades reconocen que varias lagunas, como Los Mártires, Zaragoza y Blanca, están contaminadas. Se requieren inversiones y planes de saneamiento urgentes para resolver la situación.
2. Venezuela ocupa el sexto lugar en biodiversidad a nivel continental. Sin embargo,
esta condición luce vulnerable por el deterioro ambiental agravado por la
contaminación, deforestación y carencia de agua y otros servicios públicos como la
electricidad estos, en Nueva Esparta, presentan un pico de compleja situación
suficientemente conocido junto a la falta de un vertedero, para poner término a la
saturación del botadero del Piache, cuya situación conlleva además, problemas de
salud en zonas aledañas. El deterioro ambiental es tal, que ha logrado poner de
acuerdo a las fuerzas motrices del estado, y en tal sentido, un grupo de
técnicos afectos al gobierno en un documento publicado a través de la UB pide se
resuelva el problema que ha incidido en los riesgos de extinción de fauna y flora
insular.
Los municipios con excepción de Mariño, carecen de legislación para atender
la situación. Playa El Agua, una de las más emblemáticas, ha sufrido los embates de la
erosión de sus costas de manera feroz, igual ha ocurrido en El Yaque y El Tirano para
mencionar algunas. La presencia de turistas, no ha bastado para dar respuesta al
problema que se centran más en políticas coyunturales, cuando se dan que
soluciones, causando así, serios daños a usuarios y comunidad que deriva sus
ingresos de la actividad turística.
3. La falta de legislación municipal, con excepción de Mariño, para abordar el
tema en esas jurisdicciones donde el problema de las canteras y
excavaciones, agrava la situación como es el caso del municipio Gómez,
suma preocupación. El municipio Mariño, ha sancionado tres ordenanzas.
Una, se refiere al Aseo Urbano Domiciliario y Saneamiento Ambiental y otra a
los Servicios de Agua Potable y Saneamiento del Municipio y la tercera, a
Ruidos molestos, tomando en cuenta la contaminación sónica, un problema
en crecimiento. En la primera, se incluye hasta los desechos provenientes del
derecho a la salud y la necesidad preventiva del caso.
La producción de desechos sólidos que cada día superan 280 toneladas, ha
constituido para este municipio, el de mayor importancia poblacional y
económico, una permanente preocupación, donde son necesarias respuestas
ciudadanas que contribuyan a minimizar el problema tomando en cuenta
que especies endémicas anidan en el entorno y que la flora propia de suelo
y clima también presenta daños en crecimiento.
4. El principal problema ambiental de este estado es la contaminación de sus
cuerpos de aguas (lagunas y playas) por la distribución de las aguas negras
sin su adecuado tratamiento, debido a una falta de mantenimiento de las
plantas de tratamiento de aguas residuales. Además muchas de sus playas
se encuentran contaminadas por el descarte de basura y escombros sin los
debidos planes de limpieza y mantenimiento necesarios para preservar los
ecosistemas.
Se ha observado también un incremento en los procesos de erosión en
muchas de las playas como El Tirano, Parguito, El Cardón y Puerto Abajo lo
cual podría perjudicar a los pobladores y trabajadores de la zona si el agua
alcanzara las propiedades y negocios ubicados a sus orillas.
5. La disposición final de la mayoría de plantas de tratamiento de la región insular,
se dirige a lagunas emblemáticas de la región, que han sido calificadas como
zonas protectoras o monumentos naturales. Aunque el agua que cae a estos
ecosistemas se supone es “tratada”, el colapso de las plantas limita el proceso. Se
calcula que -por lo menos- mil litros por segundo de aguas servidas “crudas”, se
descargan al mar en Nueva Esparta.
Además de las fallas en el tratamiento del agua, se conoce de fugas y tuberías de
aguas servidas que caen directo a las lagunas, con aguas servidas “crudas”.
La falta de mantenimiento para las plantas de tratamiento y planificación de las
zonas residenciales, son razones fundamentales para que se produzca esta
situación que, además de dañina para el ambiente, causa diversos problemas a la
comunidad la cual tiene que soportar la intensidad de los olores putrefactos y las
consecuencias sanitarias.
El Ministerio del Poder Popular para el Ambiente está consciente de esta
situación, y reconoce que lagunas como Los Mártires en Juan Griego, Laguna de
Zaragoza en Pedro González y Laguna Blanca en Porlamar, están contaminadas,
según dijo José Luis Díaz, director regional del gabinete.
6. Laguna de Los Mártires:
Con respecto a la zona protectora Laguna de Los Mártires, el Diagnóstico Ambiental de Nueva Esparta
destaca que, aunque se ha colocado cloacas a la mayoría de las comunidades y está trabajando la planta de
tratamiento, hay muchas poblaciones con pozos sépticos que en época de lluvia colapsan y descargan hacia
cuerpos naturales.
Otro problema, es que existe gran cantidad de viviendas de la población de Altagracia, que descargan sus
aguas servidas hacia el río El Toro y esta agua contaminada posteriormente cae a la laguna.
Las investigaciones han sido extensas, pero las soluciones necesitan gran inversión. Julio César Rodríguez,
director del Centro Regional de Investigaciones Ambientales (CRIA) de la Universidad de Oriente Núcleo
Nueva Esparta (Udone), refirió que este grupo presentó el Plan de Ordenamiento y Reglamento de Uso de la
Zona Protectora de la Laguna de los Mártires, luego de una investigación científica que arrojó diversos
hallazgos.
Luego de una evaluación físico-química del agua de la laguna, el CRIA pudo determinar que los componentes
más elevados son los que causan la eutrofización del agua, con la posterior contaminación de las mismas.
“Tienen alto contenido de nitrato y fosfato, índice de bacterias y principalmente en la parte donde llegan las
aguas de plantas de tratamiento” indicó Rodríguez.
Según el investigador del CRIA, las plantas de tratamiento de la isla de Margarita no están funcionando a
cabalidad y esto causa problemas. “La laguna presenta contaminación meso trófica o (algo contaminada),
pero aún no es eutrófica. Se encuentran algunas especies de peces, pero no con la variedad de otras lagunas
no contaminadas” mencionó.
A pesar de esto, la situación tiene remedio con la aplicación de un plan de saneamiento adecuado y para esto,
el CRIA planteó una alternativa con la que se pudiera corregir el problema.
7. Caos en Laguna Blanca:
Las denuncias son continuas por el vertido de aguas servidas “crudas” a Laguna
Blanca en Porlamar y actualmente la situación es “crítica”. En pleno centro de la
ciudad, se esparcen putrefactos olores que vienen de la laguna y no son más
que aguas negras.
El colapso en temporada alta de la Estación de Bombeo “La Auyama”, es lo que
ocasionó este problema que tiene varios meses afectando a la comunidad. En
las adyacencias del cuerpo lagunar, se puede ver el vertido de aguas negras que
cae directo.
Beatriz Ávila, gerente regional de Hidrocaribe, manifestó que la situación se
produjo en la temporada de diciembre, cuando por una contingencia en la
Estación de Bombeo, colapsó una tubería. “En esa fecha los distribuidores están
cerrados y fue imposible conseguir los equipos necesarios para reparar la falla”
dijo.
En los próximos días, Hidrocaribe iniciará los trabajos para remediar el bote de
aguas servidas hacia Laguna Blanca, pero nada asegura que esto no volverá a
suceder en una temporada alta, por la sobrecarga de la Planta de Tratamiento
Dos Cerritos. Tampoco hay plan de saneamiento inmediato para este
ecosistema.
8. Laguna de las Marites:
Los problemas de efluentes de aguas negras también afectan a la Laguna de Las Marites,
pues según los estudios del Ministerio del Ambiente, aunque se han colocado cloacas a
muchas poblaciones de los municipios García y Mariño, hay poblaciones aledañas a la
laguna que aún descargan aguas servidas en esa zona.
Igualmente, se presentan descargas de aguas grises de viviendas aledañas al monumento
natural y en algunos casos las aguas de lluvia han sido conectadas al sistema de cloacas,
por lo que durante las temporadas de invierno, el sistema de cloacas colapsa y se
produce la descarga hacia el cuerpo lagunar.
Edgar Villarroel, director regional del Instituto Nacional de Parques (Inparques), refirió
que hay un constante monitoreo de la situación, para evitar la descarga de aguas
servidas. “Había vertidos de aguas negras, pero se han controlado, incluso con
procedimientos judiciales en Fiscalía. Actualmente se ha recuperado casi toda la laguna y
está apta para uso recreativo” aseguró.
Según las autoridades de Inparques, los problemas de esta laguna se han solucionado,
no obstante, hay un informe vigente que es el Diagnóstico Ambiental del estado Nueva
Esparta elaborado por el Ministerio del Ambiente, que describe graves problemas de
contaminación en la mayoría de las lagunas y la necesidad urgente de aplicar planes de
saneamiento y organización.