c3.hu3.p1.p3.El ser humano como ser histórico.pptx
Guia 1 judaismo y sexualidad
1. 1
EDUCACION RELIGIOSA GRADO NOVENO CUARTO PERIODO
GUIA DE TRABAJO 1: judaísmo y sexualidad
INTRODUCCIÓN
La relación entre religión y sexualidad implica la existencia de una moral sexual, entendida
no tanto como parte de la moral general o común a todos, sino como la parte de la moral
religiosa que implica restricciones u obligaciones al comportamiento sexual
humano. Varía enormemente en el tiempo entre unas y otras épocas, así como entre
distintas civilizaciones o las normas sociales, los estándares de conducta de
las sociedades en cuanto a la sexualidad suelenligarse a creenciasreligiosas de una
u otra religión.
De acuerdo con esto, la mayor parte de las religiones han visto la necesidad de dirigir
la cuestión de un papel "propio" de la sexualidad en las interacciones humanas.
Diferentes religiones tienen diferentes códigos de moral sexual, que regulan la actividad
sexual o asignan valores normativos a ciertas acciones o pensamientos cargados de
contenido sexual.
Los puntos de vista entre religiones y creyentes individuales discrepan ampliamente, incluso
dentro de los que se adhieren a la misma doctrina particular; desde el concepto que
demoniza al sexo y la carne, como uno de los enemigos del alma, a la creencia (propia de
varias religiones orientales y religiones africanas) de que el sexo es la más alta expresión
de lo divino (numinoso en la terminología de Mircea Eliade). Estos conceptos teológicos no
se traducen automáticamente en una mayor o menor relajación de costumbres,que en cada
civilización tienen su expresión en las muy diferentes formas de matrimonio y de
otras relaciones interpersonales institucionalizadas o no, tal como las estudia
la antropología cultural.
Algunas religiones distinguen entre las actividades sexuales que se practican para
la reproducción biológica (algunas veces permitidas tan solo dentro del estatus marital
formal y a cierta edad (edad núbil o de consentimiento)), y otras actividades practicadas
para el placer sexual, que se califican de inmorales; por ejemplo, en el Antiguo
Testamento o Biblia hebrea se prohíbe el adulterio y el contacto sexual durante el periodo
de la menstruación (niddah).
JUDAISMO Y SEXUALIDAD
El punto de vista «religioso» sobre la sexualidad proveniente de una
«tradición judeocristiana» suele tergiversar el punto de vista del judaísmo sobre la
sexualidad. Muchas actitudes del cristianismo con respecto a la sexualidad son
completamente opuestas a las actitudes del judaísmo. Si hay algo que diferencia las
percepciones clásicas del judaísmo y el cristianismo es la actitud hacia la sexualidad y la
categoría del cuerpo. A diferencia del cristianismo, en el judaísmo no existe una vergüenza
por el cuerpo. El judaísmo no es ajeno a la afirmación y celebración del cuerpo y el alma.
En el judaísmo no existe un recinto sagrado, como sucede en la iglesia. En la sinagoga se
puede hablar de cualquier tema.
El Antiguo Testamento a diferencia del Nuevo testamento, no lanza una prohibición general
sobre la sexualidad, sino solamente sobre determinados actos como la homosexualidad
2. 2
masculina, el bestialismo y la sodomía, incluso ensalza el amor conyugal en el Cantar de
los cantares.
El papa Inocencio III, al igual que Pedro Lombardo, sostenían que el Espíritu Santo se
ausenta de una habitación cuando una pareja casadamantiene relaciones sexuales, incluso
si lo hacen con el objetivo de reproducirse, pues el acto sexual avergüenza a Dios. A esa
creencia se debe la tradición de no mantener relaciones sexuales los viernes, en recuerdo
de la muerte de El Salvador, el sábado por la Virgen María y el domingo por
la Resurrección. Sin embargo, ésta última creencia no tienes bases bíblicas. Es por esto
que hay diferentes corrientes cristianas.
El judaísmo afirma que cuando un esposo y su esposa se unen carnalmente en santidad,
allí mora la presencia divina. Por eso el shabat, el sábado, es el mejor día para recordar la
libertad y la creación haciendo el amor. El judaísmo no le otorga valor ni a la virginidad ni a
la castidad de los cónyuges: una mujer es virtuosa para el judaísmo si tiene una familia
numerosa. Los hijos constituyen una bendición.
El pecado original no es el sexo sino el deseo de saber: Eva mordió el fruto del árbol del
conocimiento.
Al judaísmo, la noción de matrimonio por amor platónico, tan cara al cristianismo, le es
completamente extraña. El ideal cristiano del celibato y de la virginidad que aparecen en el
capítulo VI y VII de la Primera epístola a los corintios es totalmente ajeno al judaísmo. La
idea de que es mejor evitar el matrimonio o que los viudos no deben volver a casarse,como
proponía Tertuliano, o que el matrimonio es una medicina para la inmoralidad como
sostenía San Agustín (para quien el acto sexual era un pecado apenas tolerable) son
impensables en el judaísmo.
Mateo el Evangelista declaraba que es mejor hacerse eunuco en consideración al cielo.
Para el ideal cristiano, el celibato consagrado lleva a Dios, sin trabas de
preocupaciones y responsabilidades por la familia humana, esposa o hijos. Solo los
solteros están en condición de servir plenamente a Dios.
El ideal judío es el matrimonio. El matrimonio es mucho más que una preocupación
privada, es una preocupación cósmica por el futuro de la humanidad. El amor consagrado
tiene ese sentido cósmico: perpetuar la especia humana y salvar las chispas de la divinidad
alojadas en el mundo. Sin embargo, la procreación no es el único fin del matrimonio para el
judaísmo. No es bueno que el hombre esté solo. Estar solo es, para el judío, una terrible
maldición. El placer debe ser compartido. En el judaísmo, el amor ideal con una mujer, es
con su cuerpo tanto como con su espíritu.
La libido no es condenada, sin la energía de la libido la civilización estaría agotada. Para el
judaísmo, un varón o una mujer que al casarse, hace votos de abstinencia sexual, viola el
carácter del pacto matrimonial y ocasiona el sufrimiento del cuerpo. La tradición judaica
afirma que, el placer de su mujer es la obligación moral del marido.
En un tratado del siglo XIII Menorat Ha-Maor (atribuido a Najmánides pero escrito por Israel
ibn Nakawa), en el capítulo sobre la santidad de la sexualidad, dice: “Que el hombre no
considere el acto sexual como algo repugnante porque de este modo blasfemamos a Dios”
3. 3
El amor es, entonces, la búsqueda del otro porque sin el otro uno permanece como medio
ser: «Por lo tanto abandonará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer y
serán una sola carne».
La castidad no es un estado deseable para un judío: «Aquel que permanece soltero, se
encuentra sin alegría, sin bendición, sin bondad, sin Torah, sin protección y sin paz»
(Yebamot 62)
No se permiten las relaciones sexuales con personas de otra religión porque para tenerlas
hay que estar casado. Aunque si una mujer judía se casa con un varón gentil (no judío) sus
hijos siguen siendo judíos debido a la ley del vientre. El judaísmo prohíbe las relaciones
sexuales con personas fuera del matrimonio y mantiene la letra de la escritura bíblica en
relación al matrimonio, incluyendo la observancia de la niddah (prohibición de relaciones
sexuales en un periodo que incluye la menstruación). Se debe practicar el tzniut, que
exige modestia en el vestir y en el comportamiento, y además se contempla como graves
pecados el incesto y la homosexualidad masculina, no así la femenina.
El judaísmo permite un divorcio relativamente libre, aunque el judaísmo ortodoxo y
el judaísmo conservador requieren una ceremonia (get o divorcio religioso) para su
reconocimiento a efectos religiosos. Ramas más liberales del judaísmo han adoptado una
perspectiva más acomodada a la cultura secular general contemporánea.
La actividad sexual cuyo propósito no es la procreación está permitida dentro del
matrimonio pero el adulterio es considerado un grave pecado. El aborto está permitido
cuando está en riesgo la vida de la madre. El método anticonceptivo aconsejado por la
mayoría de las autoridades rabínicas es el de la píldora. Las relaciones sexuales están
prohibidas durante el ciclo menstrual de la mujer.
Las mujeres no tienen obligación de mantener relaciones sexuales con el marido, pero él sí
tiene esa obligación si ella se lo exige.
Niveles de modestia requeridos según el judaísmo ortodoxo
Se prohíbe:
Albergar pensamientos inmorales o lascivos.
Mirar imágenes o escenas que despierten la sexualidad.
Tocar personas del sexo opuesto, especialmente de forma persistente (es un punto
de disputa entre rabinos).
Vestir ropa del sexo distinto al propio.
Tener contacto sexual o incluso tocar al cónyuge durante la niddá (‘menstruación’)
o hasta que la mujer no se haya inmerso en un mikvá después de su término.
Estara solas con una persona del sexo opuesto que no sea el cónyuge o un pariente
cercano (yijud).
El hotza’at zera levatala (‘derramar el semen en vano‘). Esta prohibición de
la masturbación está restringida a la eyaculación, y por tanto no prohíbe la
masturbación femenina.
El sexo entre mujeres (lesbianismo), o con cualquier tipo de animal (bestialismo), o
con cadáveres (necrofilia) (también prohíbe las relaciones entre hombres).
4. 4
El uso del preservativo en la relación sexual (no obstante se permite el uso de la
pastilla anticonceptiva en el género femenino).
Se requiere:
Mantener el propio cuerpo vestido con ropa respetable, aun en tu propio hogar. En
el caso de las mujeres, deben usar pollera por debajo de la rodilla, manga tres
cuartos y sin escote.
Evitar la compañía de desconocidos y evitar lugares con ambiente frívolo o
depravado.
Que los hombres y mujeres estén separados durante la oración, la danza y en
ciertas ocasiones (mejitza).
El judaísmo ortodoxo también mantiene una fuerte prohibición del matrimonio
mixto o relaciones sexuales entre judíos y personas de otras religiones, así como
relaciones íntimas fuera del matrimonio.
También se adoptaron dos opiniones tradicionalistas, una que mantenía todas las
prohibiciones tradicionales de actividad homosexual, también adoptada como opinión
mayoritaria, y una opinión minoritaria que urgía a los homosexuales que desearan vivir
como judíos religiosos que buscaran tratamiento médico.[cita requerida] Estas
aproximaciones permiten a cada rabino, congregación y escuela rabínica mantener su
propia política sobre conducta homosexual. Tal cosa refleja un profundo cambio desde la
previa prohibición absoluta de prácticas homosexuales masculinas, y reconoce una amplia
divergencia de puntos de vista sobre materia sexual dentro del judaísmo conservador, hasta
el punto de reconocer que no hay una única aproximación a tal materia desde esta rama
del judaísmo. El judaísmo conservador habitualmente se encuentra en posiciones
intermedias entre las opiniones liberales y las tradicionales dentro de la sociedad
estadounidense contemporánea, permitiendo ambos puntos de vista.
El judaísmo conservador ha mantenido en sus textos una gran variedad de prohibiciones y
requerimientos relativos a la modestia, incluyendo el requerimiento a la mujer casada de
observar las leyes de la Niddah (apartarse del sexo durante la menstruación y los días
siguientes, y realizar una inmersión en un Mikvah antes de reanudar la vida marital) y una
prohibición general de todo conducta heterosexual extraconyugal.
El judaísmo conservador insta a los jóvenes a no ser "promiscuos" y a prepararse a sí
mismos parael "matrimonio tradicional" si era posible, sin levantar ni reforzar explícitamente
las restricciones hacia las conductas heterosexuales no maritales.
El matrimonio mixto está bastante extendido entre el laicado judío conservador, y el
movimiento conservador ha adoptado recientemente una política de mayor acogida a las
parejas mixtas.
Otras ramas del judaísmo como “El judaísmo reformista y el judaísmo
reconstruccionista” no observan ni requieren el cumplimiento de las tradicionales reglas en
materia sexual, y han aceptado las parejas no casadas y las homosexuales, celebrando
ceremonias de compromiso y matrimonios homosexuales. Son más tolerantes con los
matrimonios mixtos, y muchos rabinos de estas comunidades los celebran. Tampoco
requieren una ceremonia religiosa de divorcio distinta del trámite civil de divorcio.
5. 5
Se ha especulado sobre si las actitudes más tolerantes de estas ramas del judaísmo en
estos asuntos han contribuido al aumento de su popularidad desde los años 1990 (pasando
del 33 al 38% de miembros), sobrepasando al judaísmo conservador y convirtiéndose en la
denominación mayoritaria en los Estados Unidos.
ACTIVIDADES PARA DESARROLLAR EN TU CUADERNO con el uso de la
lectura
1. Redacta con tus palabras las diferencias entre las diferentes religiones y
sociedades en la historia con respecto a la sexualidad.
2. Analiza las normas que tiene el judaísmo frente a: la Homosexualidad, El Celibato
y el Matrimonio y el papel de la sexualidad en esta religión. Plantea tu punto de
vista frente a esta normas
3. Compara las normas del cristianismo y las del judaísmo y escribe tu punto de
vista frente a estas normas teniendo en cuenta lo que sabes o crees saber frente
a ellas.
4. Que diferencias encuentras entre los dos tipos de judaísmo, el conservador y el
ortodoxo, Crees que sucede algo similar entre las iglesias cristianas. Argumenta
5. Selecciona 2 prohibiciones del judaísmo ortodoxo y comenta su conveniencia o
no en la actualidad desde tu punto de vista como joven.