1. COMENTARIO: EL EXTRANJERO
PROFESOR: RODRIGO ARRIAGADA ZUBIETA
ESTUDIANTE: PAOLA DÍAZ ESCOBAR
CARRERA: EDUCACIÓN BÁSICA, PRIMER AÑO
FECHA: 06/ABR/2011
1. Localización del Texto
Obra: El Extranjero
Autor: Albert Camus
Año de publicación: 1942, durante la segunda guerra mundial
Género literario: Novela existencialista, perteneciente a la narrativa francesa
contemporánea. Escrito en prosa.
Sobre el autor: Albert Camus nació en Argelia en 1913. En 1940 se trasladó a
Francia donde vivió la segunda guerra mundial. Es un autor perteneciente al
movimiento existencialista. En 1957 obtuvo el premio Nobel de Literatura. Murió
en Francia producto de un accidente en 1960.
2. Análisis
El protagonista, Meursault, describe lo que ocurre en un período de su
vida que abarca desde que muere su madre hasta que es condenado a muerte
por asesinar a un árabe.
El autor, a juicio personal, trató de transmitir la idea de “humanidad”, lo
raro que puede parecer que un hombre no manifieste apego alguno, tanto para
con los demás, como para consigo mismo, que todo para él sean simples
acontecimientos. Tampoco manifiesta sentimientos hacia la muerte, piensa que
es algo que a todos les sucede tarde o temprano y morir por causas naturales,
a causa de un asesinato o por estar condenado a muerte para él no tiene
2. relevancia, lo único tangible y que tiene validez es el hecho. .El sentimiento es
algo ajeno al personaje, sólo le importa aquello que es tangible o visible, los
hechos.
El texto se estructura en tres temas principales: la muerte de la madre, la
creación de lazos personales y asesinato, y la condena a muerte con todo lo
que ello implica.
El autor utiliza al narrador para contar la historia como primera persona
central. Protagonista de la historia, es un narrador objetivo, se refiere a su vida
y pensamientos como algo ajeno, sin tomar parte, ni enjuiciar lo que pasa a su
alrededor ni en su mente.
Desde el comienzo hasta el clímax de la historia, el protagonista es un
mero observador de su propia existencia, se refiere a las cosas que hacía,
como ir al funeral de su madre, compartir con Raimundo, con María o con
Salamano. Posteriormente, luego de asesinar al árabe, escribe también sus
pensamientos, sin defenderlos ni criticarlos, simplemente, es lo que piensa.
3. El texto como comunicación
El protagonista expresa indiferencia por la vida propia y la de los demás,
asume la individualidad del ser humano y la intrascendencia de la mayoría de
quienes habitan en el planeta. Esto lo hace sin expresarlo, directamente, al
lector, está impregnado en una especie de diario en el cual, el narrador le
escribe a la nada, provocando en el lector diversas reacciones como pueden
ser la indiferencia, impotencia o rechazo.
La historia podría ser indiferente para quien lo lee como una descripción
de hechos coherentes sin darle una interpretación, para quien lo lee desde una
perspectiva humana o religiosa puede causar impotencia el hecho de que el
protagonista no manifieste sentimientos frente a hechos como la muerte, el
cariño o la fe, mientras que, para quien lo lee desde una perspectiva de
“jurado” el personaje puede provocar rechazo al no expresar dolor,
arrepentimiento o amor para con nadie, ni siquiera por sí mismo.
Sin embargo, el texto en sí no pretende persuadir al lector, sólo informa
la existencia del personaje y las circunstancias que lo rodean, pero para quien
3. lo lee desde un punto de vista crítico, la novela pone de manifiesto lo
controvertida y enjuiciadora que puede ser la sociedad frente a lo que no les
parece “normal”.
Posiblemente, el autor haya escrito esta novela como acto de rebeldía
frente a la sociedad del momento, que tendía a condenar a los hombres más
bien por lo que eran, que por los actos cometidos. Es decir, condenaban a la
persona, no al acto penado por la ley, ley establecida por la misma sociedad.
4. Juicio Crítico
Personalmente, el texto me pareció una crítica a la sociedad, quien elige
un parlamento, el cual propone y aprueba leyes que condenan ciertas
conductas humanas, sin embargo en ocasiones, termina por condenar al ser
humano por lo que es y no por sus actos, me recordó el caso de María del Pilar
Pérez, a quien se le condena, más bien por ser “mala”, que por haber
contratado un sicario para matar a alguien. En el caso de Meursault, él cometió
un crimen, supuestamente, premeditado, pero quién podía comprobar la
intencionalidad de sus actos, cuando él en sí no actuaba con “intención” de
nada en los aspectos más cotidianos de su vida, todo lo hacía, por decirlo de
alguna manera, por inercia, porque “no tenía nada de malo” ir a beber con
alguien de quien se decía que era proxeneta o fumar un cigarrillo en el velatorio
de su madre o “tumbar” o no a alguien. Esa misma insensibilidad provocó
rechazo hacia Meursault, la sociedad esperaba que él se arrepintiera y como él
no lo hiciera, lo condenó a muerte, sin embargo en términos judiciales, se
argumentó que había asesinado con premeditación al árabe. La sociedad no
reconoció que lo mataba por ser insensible. En la práctica me deja la pregunta
¿Qué es peor, ser insensible o ser mentiroso? Al fin y al cabo la ley condena la
mentira, no la insensibilidad.