Cuento maravilloso

1. BRUJAS BUENAS. BRUJAS
MALAS.
Quizás solo cuidan nuestro
bosque

2. EErase un en un bosque de Tierra del Fuego, donde vivía una
familia muy pobre, que no tenían para comer. Una noche los
niños escucharon el llanto de la mamá y el papá por no poder
les dar de comer el día siguiente.
Muy tristes los niños decidieron internarse en el bosque bien
temprano, sin que sepan sus papás para buscar comida.
A pesar que allí vivía Archibalda, la bruja come personas.

3. Los niños, Kimey y Yamana , antes del amanecer, salieron de
su casa sin ser vistos e ingresaron al bosque. Al rato de
caminar y caminar, no encontraban nada, ningún fruto, ningún
pájaro, y ya sentían hambre, frío y cansancio. En un lugar
reparado del viento, se sentaron a descansar, muy
desanimados porque se dieron cuenta de que no sabían
volver a casa. Al anochecer, comenzaron a tener miedo.
Pensando que sus papás estarían preocupados.

4. En ese momento fue que de la lenga más alta, bajó
Archibalda, conmovida por la trizteza de Niños. Se presentó
en sus sueños y les dijo que ella sólo quería proteger al
bosque, porque algunos hombres los desvastaban y dejaban
sin casa a animales y plantas y secaban los ríos. Pero que
ellos si podían sacar los frutos y peces que necesitaban para
comer y la leña para calefaccionarse. Que los zorros nunca
lo atacarían. Y podrían cazar castores. El bosque les daría
lo que necesitaran para vivir.

5. Y que ella tenía un horrible aspecto para asustar y que no dañaran
el bosque. Dicho esto ella volvió al árbol. Los niños se fueron
despertando y vieron dos tinajas llenas de frutos, peces y leña y
una bandada de cauquenes les indicaron el camino a su casa.
donde fueron recibidos por sus padres muy felices de verlos
nuevamente. Los niños guardaron por siempre el secreto. Y desde
ese día iban al bosque a buscar sus alimentos y siempre
aparecía en sus descansos Archibalda.

6. Y que ella tenía un horrible aspecto para asustar y que no dañaran
el bosque. Dicho esto ella volvió al árbol. Los niños se fueron
despertando y vieron dos tinajas llenas de frutos, peces y leña y
una bandada de cauquenes les indicaron el camino a su casa.
donde fueron recibidos por sus padres muy felices de verlos
nuevamente. Los niños guardaron por siempre el secreto. Y desde
ese día iban al bosque a buscar sus alimentos y siempre
aparecía en sus descansos Archibalda.