1. Tema 1. La lucha canaria como deporte.
Orígenes y evolución.
Tema 1. La lucha canaria como deporte.
Orígenes y evolución.
Profesores:
Dr. Ulises S. Castro Núñez
Dr. José Hernández Moreno
Dr. Antonio S. Ramos Gordillo
2. El juego tradicional es una actividad lúdica, generalmente
de carácter motor, que se ha transmitido de generación en generación
dentro del grupo en el que se manifiesta y que está íntimamente ligada
al contexto socio-cultural en el que se desarrolla, al tiempo que se
adapta a las necesidades y posibilidades de cada momento.
4. “(…) que eran cristianos. Y el uno gran luchador: maguer que era de cuarenta años no había
en la corte quien luchara con él” (Crónica de Alvar García de Santa María, 1420)
“… y aquí mostraba cada cual su valor, (…) con mucha ligereza y mudanzas, luchar (…)”
(Fray Alonso de Espinosa, 1594)
“Tenían ciertas justas, tales como son en Inglaterra las fiestas de las ciudades, en cuyo tiempo
el rey en persona daba por sus propias manos, a cada grupo de veinte, tres cabras y gofio
suficiente, y después de esta fiesta esos grupos venían delante del rey mostrando su habilidad
saltar, correr, luchar, tirar la barra, danzar y otros pasatiempos.” (Sir Edmon Scory, 1590)
“Éste (Adargoma), por fortalexer los miembros y nervios, se abrazaba con un tronco de árbol, y
se estaba luchando una hora y dos, cada día; y así no había quién con él se atreviese a luchar.”
“Un canario famoso del pueblo de Trinte, término de Gáldar también noble, valiente, esforzado,
que se decía Guanhaben, gran luchador; éste tuvo también ciertas diferencias con otro valiente
canario, llamado Cataifa, también gran luchador. Los cuales, en unas fiestas y regocijos,
públicamente se desafiaron a la lucha (…)” (Fray Juan de Abreu Galindo, 1602)
CITAS
5. “Salen luego a la lucha dos mancebos / briosos, bien dispuestos y valientes
desnudos, mal revueltos los tamarcos / por bien de honestidad a la cintura.
Demuestran lucios los nervosos brazos / derechos muslos y vellosas pierna
untados con manteca, porque siendo / aislados y apretados con las manos
resbalasen, mostrando más sus fuerzas.
Eran los dos gallardos luchadores, / el uno Rucadén, otro Caluca.
Mídense a brazos, hacen firmes presas, / garran las uñas en la untada carne
y exprimen con los dedos la manteca; / los nervios hinchan de los fuertes miembros;
ármanse el uno al otro zancadillas; / danse enviones, vueltas y revuelas;
soplan casi gimiendo los anhélitos / o, por mejor decir, medio bramando.
Vierten los secos labios de sus bocas / amarga espuma de encendida cólera.
Afirma Rucadén el pie siniestro; / carga sobre el cuerpo de Caluca,
tuérsele un poco; y con el diestro brazo / le arroja en tierra de una gran caída;
admira a los presentes su braveza, / queda mantenedor en el terrero.
Deja Caluca al vencedor ufano, / sálese de la cueva de corrido.
Loan a Rucadén, y antes de un punto / tome resuello el angustiado aliento,
se opone a la venganza del vencido / Arico, amigo suyo y su pariente.
(…/…)
Poema de Viana (1604)
6. Rucadén le recibe entre los brazos / y con facilidad de maña y fuerzas
del primer envión lo arroja al suelo.
Llega Godeto a la venganza, altivo, / de Arico hermano, de pequeño cuerpo,
pero de gran valor, fuerzas y brío, / diestro en la lucha, señalado en todo;
cierra con Rucadén, pártense abrazos, / muestran sus fuerzas, que cualquier que venza
gana debido lauro y premio justo.
Andan furiosos y los pies afirman / arraigando las plantas en el suelo.
Hacen temblar la tierra si se mueven; / las carnes garran con las fuertes manos;
cubren el sudor de los abiertos poros / los mantecosos miembros, y la untura,
mezclada con él, con el calor desecha, / corre bañando a gotas todo el sitio.
Andan a vueltas, danse recios golpes / en los tobillos con los pies ligeros,
haciendo mil corcovos con las zancas, / abárcanse los cuerpos con los brazos;
crujen los huesos, y de un golpe juntos / miden la tierra con tan gran caída
que pareció hundirse en el profundo.
Llegó primero Rucadén al suelo, / aunque cayeron ambos sin ventaja.
Dice Godeto a voces que ha vencido; / alega Rucadén a favor suyo
y, estando en esta duda los jueces, / ya que piden licencia deseosos
para zapatear los bailadores (…)”
Poema de Viana (1604)
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9. “Habrá luchas, y el luchador que venciere a tres, dando a cada uno dos idas sin recibir ninguna,
ganará dos varas de la misma seda. El día del Corpus se duplicarán los festejos (…)”
(1527; Viera y Clavijo, 1776)
“Las diversiones entre las gente del pueblo, además de cantar, tocar la guitarra y bailar;
consisten en luchar, (…)” (George Glas, 1764)
“La clase obrera de la población goza de muchas diversiones. En cuanto a las actividades
deportivas los hombres sólo practican el levantamiento de palanca y la lucha, por lo que son muy
famosos; su forma de realizar estos deportes podrá confundir y sorprender a uno de Cornualles,
ya que con toda probabilidad encontraría en ellos a unos serios contendientes.
Existe una gran rivalidad en estas pruebas de fuerza y habilidad entre algunas islas, así como
entre algunos pueblos y es rara la fiesta donde no tenga cabida un buen torneo entre los
diferentes grupos.” (E. Murray, 1859)
CITAS
“(…) Mientras los hombres luchaban en corro, las mujeres, a una gran distancia, separadas de
aquéllos sin permitirles acercarse, habían formado círculo, luchando también y prorrumpiendo
en gritos y alaridos cada vez que una de ellas caía” (Finales s. XIX; Sánchez García, 1989)
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11. Etapa Histórica: desde la Conquista hasta principios del siglo XIX.
Etapa Folclórica: desde la primera mitad del siglo XIX hasta la década de 1940.
Etapa Institucional: desde finales de la década de 1940 hasta la actualidad.
(Padilla, 1990)
Etapas en la evolución de la lucha canaria
Fuentes etnohistóricas
12. Etapa Histórica: desde la Conquista hasta principios del siglo XIX.
ETAPA FOLCLÓRICA: desde la primera mitad del siglo XIX hasta la década de 1940.
Etapa Institucional: desde finales de la década de 1940 hasta la actualidad.
(Padilla, 1990)
Etapas en la evolución de la lucha canaria
1. Practicada por las clases sociales más bajas y recluida principalmente en las zonas rurales.
2. Ausencia de Reglamento. De común acuerdo al inicio de la luchada. Fiestas de la Candelaria en Matanzas (1872).
3. No existían competiciones regulares, celebrándose normalmente con motivo de las fiestas.
4. Los luchadores se agrupaban por bandos y no por equipos, atendiendo a distintos criterios como los geográficos. Bandos
norte y sur en Tenerife y Gran Canaria; la Villa y el Campo, en El Hierro; las bandas del Este y del Oeste, en La Palma o
Volcán arriba y Volcán Abajo, en Lanzarote.
5. No existía un número determinado de luchadores por cada bando, ni tampoco una duración límite. Se continuaba luchando
mientras existieran luchadores en situación de poder salir al corro.
6. La ropa de brega era la ropa de trabajo.
7. El sistema de lucha era el de “lucha corrida”, el luchador que caía una vez, era eliminado.
8. La forma de agarrar podía variar entre las islas e incluso entre distintos lugares dentro de la misma isla. Lanzarote,
“a la retorcida”; El Hierro, “a el moño”; Gran Canaria, “mano metida” o “mano arriba” y en Tenerife “mano abajo”.
“Agarre usted como quiera”.