1. ¿Se está hablando de
Política en Córdoba?
POR: HUGO BUELVAS POSADA- Director-Milenio
Dejar morir pacientes graves en las puertas de hospitales, abandonar la cultura, pisotear y
desconocer las etnias y los valores; privatizar la educación y los servicios públicos; desdibujar
nuestra identidad, devorarse en un dos por tres los presupuestos oficiales; adormitar las artes,
cosificar las ideas y pensamientos de la gran mayoría de la sociedad humana; ¿serán elementos
factibles, para hablar de POLÍTICA en el Departamento de Córdoba? Pues no. Porque, “la
política puede ser una gran fuerza transformadora de la sociedad. Para ello, debe reflejar
acertadamente las necesidades del desarrollo social, particularmente, del desarrollo o
progreso económico”.1
A manera de ilustración, conviene precisar aquí, algunos elementos que inciden
considerablemente en el vaivén del debate proselitista de cara a las elecciones del 30 de octubre
próximo. Cuando, en esencia, a excepción de unos cuantos, no hay argumentos sólidos
programáticos en los distintos candidatos a Gobernación, Asamblea, Alcaldías, Concejos y Jal
En diversos sectores urbanos de Montería y sitios rurales del municipio, pululan
multitudinariamente los “eslogan” publicitarios, impregnados en afiches de aspirantes al
Concejo Municipal, predominando la “casta joven” sobre los “vejestorios”, en donde tan solo,
se enfatiza un “maquillaje” de rostros femeninos y masculinos, como si se estuviese en un
castin, para protagonizar cualquier papel actoral; quedando atrás la realidad de los hechos
sociales, sin saberse a ciencia cierta, ¿por qué y para qué? salen a flote tales candidaturas. Estos
acontecimientos, pueden entenderse de dos formas: “popularizar o promiscuir la democracia”.
Resultando entonces, una “desestabilización” en la misma democracia.
Está bien que la juventud participe de la justa electoral, para enrumbarse en el ámbito
políticopartidista, del municipio de Montería, inclusive del Departamento de Córdoba. Pero,
sabiendo primeramente, interpretar la idiosincrasia de los ciudadanos votantes y, por sobre todo,
tener al menos, un grado de conocimiento en “Gestión Pública”. Porque, es peligroso, tratar de
jugar con la democracia. Aun más, cuando en los escenarios públicos, no se está hablando de
Política. Mucho menos, debatiéndose públicamente las sentidas necesidades sociales de la
gente más necesitada.
Es necesario hablar de Política, sobre todo en estos tiempos, en que, está en juego el tema de la
Geopolítica en el marco de la mundialización. La Geopolítica desde las perspectivas de un
mundo globalizado. Por cuanto la Geopolítica se fundamenta desde el conocimiento y
comprensión de los fenómenos políticos ubicados en un territorio. La Geopolítica es el estudio
de la influencia que ejerce el medio ambiente (asumido en sus dimensiones natural y social)
sobre la política de un Estado.
Por consiguiente, la Política ejerce su acción sobre todo, el desarrollo de la cultura y de todas
las ramas de la ideología (la ciencia, el arte y la moral, entre otras), así como sobre cualquier
2. actividad humana: la economía, el comercio o las finanzas, la industria o la agricultura, la
educación, la escuela, la universidad, el deporte. De ahí que es muy frecuente oír .hablar de la
Política de la ciencia (diferente de la Ciencia Política), de la política del arte( diferente del arte
de la política), de la política económica, de la política comercial ( diferente del comercio de la
política), de la política financiera, de la política industrial o agrícola, de la política educativa, de
la política escolar y universitaria, de la política del deporte ( diferente del deporte de la
política…).
Entonces, hay alta necesidad de que, quienes hoy por alguna circunstancia, aspiran a la
gobernación del Departamento de Córdoba, a la alcaldía de Montería, en especial, deben
manejar al menos, un lenguaje acorde con la Política, la que, entendemos como una Dialéctica
esa, que a través del voto programático ejercemos en forma democrática, para que más tarde, la
sociedad se vea retribuida en progreso y desarrollo.
Resulta interesante e importante, hablar de política desde la básica primaria, en la calle, en las
aulas de bachillerato, por ende en la universidad, a través de coloquios, foros, seminarios y
tertulias. El nuevo hombre, ese que apenas está comenzando a caminar, orientarlo hacia la
política, prepararlo y sobrellevarlo para que, mañana, no sea un ser alienado y un „convidado‟
de piedra o un mediocre. Si no, un verdadero y auténtico líder que mueva las masas, pero con
moral y ética.
1: Sepúlveda, Hernán: pág10. Ciencia Política y Teoría del Estado.