Las causas comunes de la sequedad ocular incluyen una mala alimentación, pasar mucho tiempo frente a pantallas, cambios hormonales y la calefacción o contaminación. Algunos remedios caseros efectivos son usar un vaporizador para humedecer el ambiente, aplicar paños húmedos, rodajas de pepino o saquitos de té negro fríos sobre los ojos, y usar compresas de papa rallada.