1. ESQUEMA ACTANCIAL
LOS PERSONAJES Y LOS ACTANTES
Los distintos personajes de una narración ejecutan acciones que los
relacionan entre sí. Por ejemplo, el accionar del detective para esclarecer un
crimen se enfrenta con el objetivo del criminal de no ser descubierto, por lo
que entre el detective y el criminal se establece una relación de oposición.
Según las acciones que realicen los personajes, su rol se corresponderá con
una función básica: desear algo; transferir (un mensaje, un secreto, un
objeto valioso); recibir (esos elementos); ayudar a alguien a conseguir
algo; oponerse a que lo consiga.
Sin embargo, además de los personajes, intervienen otros elementos
que también pueden cumplir algunas de las funciones anteriores.
Por ejemplo
Si un detective emplea una lupa para descubrir una huella digital a fin de
resolver el caso, estos elementos desempeñan las funciones de ayudar a ese
sujeto.
En ese sentido, se denomina actante a cualquier componente (ser o cosa)
que participa en su desarrollo y desempeña alguna de las anteriores
funciones. De esta manera, la categoría de actante supera a la de personaje,
por lo que en un relato pueden existir muchos personajes.
Un esquema actancial consta de seis elementos:
Sujeto: Es el personaje que tomaré como centro del esquema, aquél que
realiza una acción, que busca cumplir con algún objetivo, que se mueve con
algún objeto. (Cualquier personaje, principal o secundario, puede ser tomado
como sujeto para realizar un análisis diferente o profundizar en las relaciones
de los personajes entre sí.)
Objeto u objetivo: Es lo que el sujeto quiere conseguir, lo que lo mueve a
actuar.
Destinador: Es el personaje o la fuerza externa o interna que mueve al sujeto
a querer conseguir el objeto u objetivo.
Destinatario: Es quien se beneficia si el sujeto consigue el objeto u objetivo
(puede ser el mismo sujeto u otro personaje o ambos).
Ayudantes: Son los que ayudan, precisamente, al sujeto a conseguir el
objeto.
Oponentes: son los que se oponen a que el sujeto consiga el objeto.