Un hombre compró monos de los campesinos a precios cada vez mayores hasta que casi no quedaban monos. Luego su ayudante les vendió a los campesinos miles de monos que supuestamente el hombre había comprado, pero cuando el hombre regresó ni el ayudante ni los monos aparecieron, dejando a los campesinos solo con la jaula vacía. Este cuento ilustra cómo funcionan los mercados financieros mediante la manipulación de la oferta y la demanda.