2. Durante el período comprendido entre 1922 y 1945, en los países
bajo regímenes totalitarios, la arquitectura y las otras artes
visuales se convirtieron en expresión de las ideologías de aquellos
regímenes, en aparatos al servicio del Estado.
El arte se ponía a disposición de objetivos propagandísticos: el arte
podía -y debía- enseñar, informar y inculcar el sistema de valores
del Estado.
3. En Europa, el periodo de prosperidad conocido
en los años 20 se transformó, tras la crisis de
1930, en huelgas obreras y protestas contra el
liberalismo y el parlamentarismo, por eso
desde 1920 triunfaron los regímenes
autoritarios en muchos países europeos. Los
totalitarismos surgieron al terminar la Primera
Guerra Mundial como movimientos de masa,
de los que obtienen su legitimidad. Pero no
son espontáneos, sino que están dirigidos por
un grupo totalmente fiel al Jefe. Todos ellos se
presentan como revolucionarios, lo que les
diferencia de los movimientos autoritarios de
derechas. En ellos el Estado o el Partido se
esfuerzan para controlar la sociedad mediante
organizaciones encargadas de vigilar y dirigir.
Una característica común a todos ellos es que
se le concede gran importancia a la
propaganda y al culto a la personalidad de
los dictadores, pero sin embargo existen
muchas diferencias entre unos y otros.
5. Los regímenes estimulaban a
hacer obras de estilo
académico antiguo o realistas,
preferentemente de grandes
dimensiones y llenas de
clichés heróicos y
sentimentales. El arte oficial
incluía imágenes donde el
heroismo y la muerte eran
protagonistas principales,
donde se mostraba la
supeditación y el sacrificio del
individuo por la victoria del
partido y la nación.
6. El nazismo y el fascismo coinciden en tanto que elevan al arte y la
estética al más sublime de todos los estadios, tanto como en que
fundan el régimen político en el arte, siendo mucho más evidente el
caso en Alemania que en Italia. El arte cumple un papel político,
mientras que la política queda subsidiaria del arte mismo.
ARNO
BREKER
RENATO
BERTELLI
7. Las artes visuales -incluyendo los carteles de propaganda- se
complementaban con los desfiles diseñados, los rituales y las
ceremonias. Símbolos de todo tipo, desde banderas hasta eslógans.
En general, se trataba de un realismo totalitario basado en una
arquitectura monumental y neoclásica, y una pintura y escultura
realistas.
1936
8. LA ITALIA
FASCISTA
(1922 – 1945)
El fascismo fue un movimiento
político y social que nació
en Italia de la mano de Benito
Mussolini tras la finalización de
la Primera Guerra Mundial.
Se trata de un
movimiento totalitario y
nacionalista, cuya doctrina (y las
similares que se desarrollaron en
otros países) recibe el nombre
de fascista.
9. A pesar de que a lo largo del régimen fascista de Mussolini las tendencias
pictóricas no siempre fueron iguales, se puede hablar de una inclinación global
hacia el futurismo: se trata de un estilo heróico, belicista, obsesionado por las
máquinas. Sus autores trabajaron sus temas de la velocidad y del vuelo
representados de dos maneras: como analogías cósmicas, o como vistas aéreas
vertiginosas de aviones bajando en picado sobre el paisaje.
Inmersión sobre la ciudad
Tulio Crali, 1939
10. ACROBACIA EN EL CIELO
1932
BOMBARDEO NOCTURNO
1930
TULLIO CRALI
1910 - 2000
11. El Futurismo, movimiento vanguardista por excelencia de los años 20 y 30 del siglo XX,
fue la punta de espada para la fascistización de la cultura italiana.
El futurismo manifestaba la admiración por las máquinas modernas y futurísticas, así
como la exaltación de la juventud, el militarismo, la velocidad, la guerra y el patriotismo.
Estas características lo hacían idóneo para la moda fascista de entreguerras en países
como Italia.
Sobretodo en la Italia Fascista, el futurismo alcanzó su máximo esplendor. Su fundador,
Filippo Tommaso Marinetti, después de instaurar el movimiento en Milán, no dudó en
afiliarse al Partido Nacional Fascista y fusionar de ese modo su creación artística a la
nueva cultura romana que imperó en Italia hasta 1945.
16. La arquitectura fascista
pretende recordar la
grandeza de las
construcciones del
Imperio Romano. Los
edificios, que combinan
la monumentalidad con
el recuerdo clasicista,
quieren comunicar la
grandeza y persistencia
del régimen.
ARQUITECTURA FASCISTA
Pallazo della Civilittá
Recuerda
claramente al
Coliseo
17. La arquitectura fascista-racionalista
es el estilo arquitectónico
desarrollado en la Italia fascista
desde finales de los años veinte;
promovido y practicado
inicialmente por el Gruppo 7, que
incluía a arquitectos como Luigi
Figini, Gino Pollini, Guido Frette,
Sebastiano Larco, Carlo Enrico
Rava, Giuseppe Terragni, Ubaldo
Castagnola y Adalberto Libera. En
él se distinguían dos ramas, una
partidaria de las innovaciones de la
arquitectura moderna (Giuseppe
Terragni) y otra más conservadora
(Marcello Piacentini y el grupo La
Burbera).
18. Esa doble naturaleza de la arquitectura fascista permitió que por un lado
desarrollara una estrecha relación con el racionalismo arquitectónico propio de
la denominada arquitectura moderna (movimiento moderno o estilo
internacional), como el de la Escuela de la Bauhaus alemana y el taller de Le
Corbusier en Francia
Sala de la Exposición de la Revolución Fascista – 1932 - Roma
19. CASA DEL FASCIO (1932 – 1936) en Como - Grupo 7 - Arq. Giuseppe Terragni
20. PALACIO DE CORREOS – 1933/1935 - ROMA
Arq. Adalberto Libera y Arq. Mario De Renzi
24. LA
ALEMANIA
NAZI
Fue el periodo de la historia
de Alemania comprendido entre 1933,
año de la llegada al poder del Partido
Nacional Socialista Obrero Alemán
de Adolfo Hitler y 1945, año de la
derrota del país en la Segunda Guerra
Mundial que tuvo como consecuencia el
final de la dirección nazi del mismo.
Utilizando la propia terminología
nacionalsocialista, se emplean también
los nombres Tercer Reich, Gran Reich
Alemán, Imperio nazi o III Imperio
Alemán para aludir a dicha etapa.
25. El nazismo y el fascismo coinciden en tanto que elevan al arte y la
estética al más sublime de todos los estadios, tanto como en que fundan
el régimen político en el arte, siendo mucho más evidente el caso en
Alemania que en Italia. El arte cumple un papel político, mientras que la
política queda subsidiaria del arte mismo.
El tema grueso es el de la función de la estética, un tema particularmente
debatido en la estética de todo el siglo XX, hasta cuando se resuelve a
finales del siglo. Eso es, la función de la estética, uso político de la misma,
y con ella, del arte.
26. El arte producido de manera oficial
durante la Alemania nazi entre 1933 y
1945, es generado a partir de los
requerimientos socio-político de los
gobernantes de la época. Se genera una
producción de elementos plásticos que
apuntan básicamente a la transferencia de
un mensaje, es un arte esencialmente
propagandístico, lo que se condice con el
carácter monumental de muchas de sus
obras. El rol del artista pasa a ser el de un
ejecutor de la conceptualización, en
términos artísticos, de una ideología que
está dirigida a las masas. Algunas de las
principales características del arte en este
periodo es la búsqueda de un realismo
que permita transmitir heroísmo,
representar al ideal del pueblo alemán y
los modelos del arte clásico
principalmente en la arquitectura en la
escultura.
27. Hasta la ascensión al poder del nacional-
socialismo estaban presentes en Alemania y
en Europa las denominadas “vanguardias”.
Cronológicamente las vanguardias artísticas
se sitúan en un contexto marcado por dos
grandes conflictos que acompañan y
delimitan dos etapas de su desarrollo.
1ª. Etapa: 1905 – 1914
2ª. Etapa: 1919 - 1939
Debido a las características de las
vanguardias estas serán considera, por los
nazis, como un arte degenerado, en
contraposición al arte alemán enfocado en
el valor del pueblo, con un estilo clásico que
apela a la tradición y temas que apuntan a
representar tipos populares como por
ejemplo, el trabajo en el campo, las virtudes
que posee la patria, o actividades
consideradas propias de la mujer.
28. En la Alemania nazi, un papel importante de la cultura era la difusión de la
cosmovisión nazi. Una de las primeras tareas que realizaron sus líderes cuando
llegaron al poder a principios de 1933 fue una sincronización de todas las
organizaciones profesionales y sociales con la ideología y la política nazis. Ello
también incluía a las organizaciones culturales y artísticas. Joseph Goebbels, el
ministro de Propaganda e Información, se esforzó de inmediato por que las
comunidades artística y cultural estuvieran alineadas con los objetivos nazis.
QUEMA DE LIBROS
ALEMANIA 1933 CHILE 1973
29. Los esfuerzos de las autoridades
nazis para regular, dirigir y
censurar el arte y la literatura
alemana correspondieron a lo que
el historiador alemán George
Mosse llamó un esfuerzo “hacia
una cultura total”. Este esfuerzo
también alcanzó los niveles
inferiores de cultura que
salpicaban la vida cotidiana de los
alemanes comunes. El liderazgo
nazi, que esperaba dominar
Alemania a través de poder
político y terror, pero también
ganándose “el corazón y la
mente” del pueblo, utilizó esta
coordinación de la cultura alta y
baja para influir en el nivel más
básico en las vidas y los actos de
sus ciudadanos.
30. "La propaganda intenta forzar una
doctrina sobre la gente… La propaganda
opera sobre el público general desde el
punto de vista de una idea y los prepara
para la victoria de esta idea." Adolf Hitler
escribió estas palabras en su libro Mein
Kampf (1926), en el cual por primera vez
aboga por el uso de la propaganda para
difundir los ideales del nacional-
socialismo -- entre ellos racismo,
antisemitismo, y anti-bolchevismo.
31. “El judío: el
incitador de
la guerra. El
prolongador
de la
guerra."
1943
Había varios públicos para
la propaganda nazi. A los
alemanes se les recordaba
la lucha contra los
enemigos extranjeros y la
subversión judía.
34. Este cartel viene de
mediados de la década de
1930. El pie de foto: "Hitler
está construyendo. Ayúdelo.
Compre productos
alemanes. "
Este cartel es de la década de 1930, y alienta a
los alemanes a comprar doméstica en lugar de
bienes importados. se traduce como "alemanes
compran productos alemanes."
"Semana alemán / alemán Productos / Trabajo
Alemán".
35. “Hasta la ascensión al poder del
nacionalsocialismo existía en
Alemania un arte considerado
«moderno» o, más bien, como
propiamente revela la esencia de
este término, un arte diferente
cada año. Pero la Alemania
nacionalsocialista exige un arte
nuevamente «alemán», y ese
debe ser y será, como todos los
valores creativos de un pueblo,
un arte eterno.
Si en vez de eso se revelase falto
de tal valor eterno para nuestro
pueblo, ya hoy mismo resultaría
carente de un valor superior.”
Discurso de Adolf Hitler en la
inauguración de la Gran
Exhibición de Arte Alemán,
Múnich, 1937
37. ARQUITECTURA NAZI
El 30 de enero de 1937, Hitler nombró al Arq. Albert Speer inspector general de
construcción con el rango de Secretario de Estado, y se le encargó que hiciera
planes para la reconstrucción de Berlín, futura capital de un Estado supra-
germano. El primer paso de estos planes fue la reforma del Estadio Olímpico de
Berlín, escenario de los Juegos Olímpicos en 1936.
38. El modelo de expresión estético-política del Nazismo se basa en la creencia que
la arquitectura constituía el medio más adecuado para la propagación de una
ideología que debía subsistir incluso tras el derrumbamiento del partido y el
consiguiente término de la preponderancia de Alemania en el sistema político
mundial. Para llevar a cabo esta tarea, se optó por edificar mediante el sistema
de "Ley de ruinas", consistente en el empleo exclusivo de materiales no proclives
al desgaste así como el desarrollo de estructuras especiales que fuesen capaces
de resistir el paso del tiempo.
39. La creciente asimilación del
espacio urbano al poder político
había tomado como modelo de
referencia ciertos principios
propios de las tres grandes
civilizaciones de la Antigüedad,
Egipto, Grecia y Roma. Del
mismo modo, una gran parte de
la simbología y propaganda del
régimen nazi se nutrió de ideas
procedentes de estas mismas
sociedades con el propósito de
descubrir ciertos rasgos que
vinculasen el esplendor de
aquellos tiempos con el que se
pretendía revivir en los
presentes. Proyecto: GERMANIA, la nueva Berlín de
casi 2.000 kilómetros cuadrados
40. La arquitectura que se llevó acabo durante la dictadura nazi es el resultado de
varias circunstancias, una de ellas es la ''responsabilidad cívica e histórica'' de su
propulsor, Hitler. El führer llegó a afirmar en su libro, Mein Kampf: “Si Berlín
sufriera el mismo destino que Roma, las generaciones futuras no verían más que
los grandes almacenes judíos y cadenas hoteleras como monumentos
característicos de nuestra civilización actual.” Tal y como recoge en sus palabras,
Hitler y el nazismo tendrán como referente Roma, cogerán de ella la estética y la
parafernalia del Imperio, y la adaptarán a Berlín.
Proyecto: Sala del
pueblo que tendría
una gigantesca
cúpula de acero de
más de 200 metros
de alto y 280
metros de diámetro
con capacidad para
180,000 personas
41. Proyecto: Arco del Triunfo alzado como recuerdo a los caídos
durante la I Guerra Mundial. Fue pensado con medidas colosales,
para que por ejemplo, cupiera en su abertura el Arco del Triunfo
de Paris.
42. La Nueva Cancillería de
Berlín, construida
rápidamente por Albert
Speer en 1938, fue una
especie de síntesis
palaciega: las piezas
importantes del palacio
se elevan a una
potencia desconocida.
El edificio contenía
principalmente una
prolongada secuencia
de ámbitos
impresionantes: que
unía el Patio de Honor,
Vestíbulo, Sala de los
Mosaicos, Rotonda,
Galería de los
Mármoles hasta llegar
al Gran Salón de
Recepciones.
43. A Speer le dijeron que no se preocupara por el presupuesto y 4000 hombres
trabajaron por turnos de 24 horas, con el coste final del edificio estimado en
noventa millones de reichsmarks, el equivalente a un mil millones de dólares en
moneda moderna.
48. Edificio de la Cancillería tras la toma de Berlín en
1945
49. EL ARTE EN LA
U.R.S.S. (Unión
de Repúblicas
Socialistas
Soviéticas)
50. La esencia del Realismo Socialista reside en las premisas de los escritos de
Marx, Engels y Lenin. El arte debía ser accesible a las masas y tener un
propósito social desde una óptica optimista e idealizada que proporcionara
la imagen de un futuro glorioso de la URSS bajo la era comunista. Todo arte
formalista y progresista fue censurado como capitalista y burgués,
desprovisto de importancia para el proletariado. Su propósito era elevar al
trabajador común presentando su vida y trabajo como admirable. Es decir,
su objetivo era educar a la gente en las metas y el significado del
comunismo.
51. El Realismo Socialista no se creó
para los museos, galerías,
coleccionistas particulares, ni
especialistas. La introducción de
este arte coincidió con la
abolición del mercado y el único
consumidor existente fue el
Estado Socialista. Éste quería
que el arte fuera socialmente
útil, atrayendo a las masas con
función de educarlas y
sobretodo dirigirlas. Por tanto
se puede designar a la cultura
estalinista de anticomercial.
Lenin, Isaak Brodski - 1930
52. El catálogo artístico impuesto por el Estado abarcaba una serie de temas:
la lucha contra el capitalismo y el fascismo, la glorificación del héroe de la clase
trabajadora y el campesinado, la representación del crecimiento de la industria
pesada, la agricultura colectiva, los triunfos deportivos, etc.
TRIUNFO
Isaak Brodski
1930
57. Escultura de tumbas de los soldados
soviéticos caídos durante la liberación de
Varsovia – 1950
Jerzy Jarnuszkiewicz y Stanisław Lisowski.
58. CARTELERÍA
SOVIÉTICA
El cartel político soviético enseña al
universo los principios
fundamentales del nuevo
realismo: De todos los causales
preciosos que existen en el mundo, el
más precioso y decisivo es el
hombre (Stalin).