La metacognición se refiere al conocimiento, concientización y control de los procesos de aprendizaje propios. Incluye cuatro características: establecer objetivos, elegir estrategias para alcanzarlos, observar el proceso de aprendizaje y evaluar los resultados. La metacognición puede desarrollarse a través de experiencias de aprendizaje adecuadas y depende de los métodos de enseñanza utilizados por los profesores.