La constitución ha tenido diferentes definiciones a lo largo de la historia. Para Aristóteles, la constitución se refería al orden y distribución de los poderes de gobierno de una comunidad política soberana. En la Edad Media, la constitución definía el estado jurídico de una comunidad o territorio. En la Edad Moderna, la constitución se entendía como las leyes importantes dictadas por la voluntad exclusiva del monarca.