2. ADORACIÓN
Relacionarse con Dios. Postrarse, Inclinarse.
Forma básica de ofrecerle a Dios nuestras
vidas y de honrarlo como Dios.
a) Espíritu: amamos a Dios; nuestros actos
no son rituales vacios, si no que son frutos
del amor que le tenemos.
b) Verdad: somos obedientes a la palabra de
verdad y que buscamos la relación con el
Padre atraves de Jesucristo que es la
verdad.
3. DIFERENTE IDIOMA
Hebreo: Shajah (bajarse, inclinarse,
postrarse) [AT]
Arameo: Segad (postrarse en
homenaje) [AT]
Griega: Proskuneo (Agacharse o
postrarse en homenaje) [NT]
Homenaje- sometimiento.
AT: Antiguo Testamento
NT: Nuevo Testamento
4. ALABANZA
Expresión o conjunto de expresiones de
alabar.
Hebreo: Halal (hacer brillar, presumir,
celebrar, hacer mucho ruido, ser
jubiloso)
Alabar: elogiar (celebrar con palabras).
6. ACLARACIONES
Alabar NO es cantar, pero si se puede
usar la música para alabar.
La alabanza se expresa con palabras.
Mientras que la adoración lo
expresamos postrados, humillados.
7. ¿PORQUE ADORAMOS?
Ordenanza: Efesios 5: 18, 20
Porque El es Dios: 1ra Crónicas 29: 10-11
Por las bendiciones: Salmo 103
Porque El es bueno y para siempre es su
misericordia: Salmo 106
Guerra contra el enemigo:
Isaías 30: 32
2da Crónicas 20: 20-24
8. La alabanza debe de ser constante en
nuestras vidas.
Hebreos 13:15
Salmos 34: 1
La alabanza no depende de nuestro
ánimo.
Salmo 42: 5-6
La alabanza debe de ir acompañada de la
adoración, si no es solo palabrería.
1ra Corintios 13: 1
9. COMO DEBE DE SER LA
ALABANZA
CONGREGACIONAL
• La alabanza debe de ser el primer
elemento de nuestro culto.
Salmo 100: 4
• Propósito de la alabanza: Exaltar a
Dios.
• No es un escape a la tristeza de nuestra
vida. Tenemos que entregarle nuestras
cargas a los pies de Dios (Mateo 11:28)
y luego alabar confiados en su fidelidad.
10. La música nos ayuda alabar a Dios
(Salmo 150), pero la música no es
necesariamente la alabanza.
11. MANERAS DE ALABAR
o Alzando las manos- Salmo 134: 2
o Aplaudiendo- Salmo 47: 1
o Dando voces- Salmo 5: 11
o Danzando- Salmo 149: 3
12. IMPORTANCIA DE LA
ALABANZA
CONGREGACIONAL
Facilita la acción del Espíritu Santo
Mateo 18:20
Dios se mueve en medio de la
alabanza. Cuando su pueblo le alaba de
corazón están dando a demostrar que
Dios es la persona más importante del
lugar.
Salmos 22:3
13. ADORACION
CONGREGACIONAL
• Expresa el amor que sentimos hacia
Dios. Este amor viene de la adoración
personal.
• No existe una ordenanza que diga que
la alabanza debe de ir antes de la
adoración pero en el Salmo 95, el
salmista recomienda llegar reunidos en
alabanza u posteriormente invita a la
congregación a postrarse en adoración.
14. • Es difícil, adorar a Dios
congregacionalmente, sin saber haber
establecido anteriormente que El es el
merecedor de esas palabras de amor,
que es lo que hacemos al alabar a Dios.
Le alabamos por lo que El hace.
Le adoramos por lo que es.
18. ¿QUE LE DECIMOS A DIOS
AL POSTRARNOS?
Reconozco tu grandeza.
Reconozco mi bajeza.
Me rindo a ti.
En la alabanza admiramos a Dios por lo que hace y
por quien es.
19. TIPOS DE ADORADORES
• Adoradores mecánicos: Honran y Adoran
a Dios, pero lo hacen sin sentimiento.
Adoran mecánicamente cuando cantan y
oran por costumbre. Algunos cristianos
dicen “Gloria a Dios” porque quieren decir
algo y no hayan otra cosa que decir.
Movimientos mecánicos:
Labios (Mateo 15:8-9)
Manos (Hechos 17:24-25)
20. • Adoradores sensuales: Nace de los
sentidos y de las emociones. Dependen
de su estado de ánimo las personas
deciden adorar o no. Se dejan llevar del
himno que toca su sentido para adorar,
si el himno no toca su sentir, deciden
cambiar la música, o el músico. Si es en
el mensaje, deciden cambiar el
predicador o le dicen a Dios “lo siento,
no me nace adorarte hoy, tal vez pueda
adorarte luego”.
21. • Adoradores espirituales: Para adorar
a Dios en espíritu hay que apartar la
decisión de Adán. Dejo de creer en Dios
y creyó en sí mismo, nosotros debemos
de dejar de creer en nosotros y creer en
Dios.
Salmo 51:17
• Dios busca adoradores en espíritu y en
verdad.
Juan 4:24
22. ADORAR EN ESPIRITU
¿Como postrar nuestro espíritu?
Cuando nos postramos y nuestro
espíritu dice: “reconozco tu grandeza,
reconozco mi bajeza, me rindo a ti”.
23. CUANDO NOS POSTRAMOS
EN ESPIRITU POSTRAMOS
VOLUNTAD, ACTITUD Y
ANELO.
• Voluntad postrada: rendida y
quebrantada.
• Actitud postrada: reconocemos que
somos indignos. Reconocemos que
todo el bien en nosotros viene de Dios.
• Anhelo postrada: espíritu postrado
anhelo ver y conocer a Dios, su
grandeza, su majestad y sus obras.
24. ADORAR EN VERDAD
• Para adorar a Dios hay que conocer la
verdad de quien es él y quienes
nosotros somos. Cuando conocemos
esa verdad y la creemos y lo amamos,
entonces estamos listos.
25. ADORAR EN PRIVADO
Es difícil ya que el diablo se opone a
nuestra adoración. Cuando adoramos
en privado no está el hermano para
ayudarnos cuando el enemigo nos
distrae, pero si esta Dios, el es fiel.
26. SATANAS TRARA DE
IMPEDIR NUESTRA
ADORACION
• Estar demasiado ocupado: Ponernos
más ocupado de la cuenta, aunque sea
hacer cosas de Dios, pero ocupado al
extremo que no lo adoremos.
• Desanimado: Ponernos en un estado de
ánimo deprimente y sin ganas de hacer
nada.
• Descuido: Dejar de adorar a Dios, dejar
de orar y escudriñar su palabra.
• Nuestra carne: Aunque nuestro espíritu
está dispuesto, el diablo usa nuestra carne
para ahogar nuestra adoración.
27. ADORAR EN PUBLICO
A los adoradores les encanta adorar cuando tienen la
oportunidad de adorar juntos. La adoración pública une
a los adoradores, pero esa unión se logra cuando nos
inclinamos juntos ante el Omnipotente. Todos sabemos
que el pastor se prepara para el mensaje, el líder por
igual.
Pero ¿y los demás miembros de la congregación?
Claro que todos nos preparamos, nos duchamos, nos
vestidos y cargamos la biblia; pero eso es para ser
visto por el hombre; dejamos en alto los preparativos
del corazón y del espíritu. Preparemos nuestro
corazón en oración y pedirle a Dios que tome bajo
control el espíritu y mente del Espíritu Santo.
28. La adoración privada nos prepara para
la adoración pública que es donde los
adoradores se reúnen. El adorar no
espera por la oración de comienzo para
comenzar a prepararse para la
adoración, si no que llega preparado
para la adoración.
29. ADORACIÓN AL CANTAR
Cantar es un don extraordinario de Dios, pues comunica en
otras maneras lo que no se puede comunicar con palabras
[Efe. 5:19].
Dios desea que usemos el cantico para adorarle. Estamos
ofrendando, no entreteniendo. Si una persona canturrea de
corazón, mientras juzgamos en nuestro corazón, su canturreo
monótono le suena más bello a Dios; porque Dios no busca el
más lindo que cante, si no que cante de corazón para adorarle
a Él.
Cuando se cante, hay que cantar lo más humilde y humillado
del espíritu, no créerse el mejor que canta o cantar por encima
de todos. Muchos tienden a inclinarse aquellos que cantan
lindo y se olvidan inclinarse al que dio su vida por nosotros. La
adoración es algo que hacemos, no observamos.
30. ADORACIÓN AL
ESCUCHAR
Escuchar tales mensajes llega a ser
adoración, cuando el oyente
voluntariamente inclina su espíritu a la
verdad que oyen. [1ra Corintios 14: 24-25].
Para que el oír sea adoración, la
congregación tiene que comprender la
verdad enseñada; cuando la congregación
no entiende lo que predican, entonces lo
que oyen no los ayuda adorar (1ra Corintios
14:19). El que habla (pastor, evangelista,
líder) quiere que la congregación adora, el
tiene que adorar primero
31. ADORAR AL ORAR
Cuando oramos nos acercamos al trono de
Dios en una manera muy directa. No nos
acercamos a su trono para demandar, sino
para pedirle y adorarle. Cuando oramos
juntos colocamos juntos debajo de la carga
del hermano para ayudarlo a presentar
dicha carga a Dios. Para hallar su
dirección tenemos que doblegar más que
las rodillas; tenemos que doblegar nuestra
voluntad y postrar nuestro espíritu. La
oración de la congregación debe de ser de
agradecimiento y alabanza. [Fil. 4:6].
32. ADORAR AL OFRENDAR
[1ra Cro. 16:26]
¿Adoración es una ofrenda? La
adoración es darle el trono de nuestro
corazón a Dios. Cuando Dios nos da
más de lo que necesitamos debemos
rendirle a El el sobrante y no
malgastarlo a nosotros mismos.
Primeramente nosotros nos ofrecemos
como ofrenda, luego ofrecemos lo que
le tenemos para ofrendarle.