1. Estudiante: Donald Massiah
C.I: 19.590.093
Materia: Gestión Ambiental
Tutora: Yamilet Araujo
Universidad “Fermín Toro”
Facultad de Ingeniería
Cabudare – Venezuela
Análisis Interpretativo:
Tratados de los Cambios Climáticos
2. Es un acuerdo internacional que limita, controla y regula la
producción, el consumo y el comercio de sustancias depredadoras de la capa de ozono. El
número total de países partes del Protocolo, comprometidos formalmente a cumplir con
sus disposiciones, es de 155.
Según los Estados firmantes del acuerdo, el objetivo del tratado es:
"Reconociendo que la emisión en todo el mundo de ciertas sustancias puede agotar
considerablemente y modificar la capa de ozono en una forma que podría tener
repercusiones nocivas sobre la salud y el medio ambiente,... Decididas a proteger la capa
de ozono adoptando medidas preventivas para controlar equitativamente el total de
emisiones mundiales de las sustancias que la agotan, con el objetivo final de eliminarlas,
sobre la base de los adelantos en los conocimientos científicos, teniendo en cuenta
aspectos técnicos y económicos y teniendo presentes las necesidades que en materia de
desarrollo tienen los países en desarrollo"
3. El protocolo ha evolucionado a través de sus treinta años de historia y ha logrado
eliminar la producción y el consumo de mas del 95% de los productos que en un principio
se propuso controlar, lo que ha llevado a una recuperación de la capa de ozono que varias
observaciones a nivel mundial han verificado. Entre los muchos beneficios a la salud que
esto trae a nivel mundial, lo que ha posibilitado evitar millones de casos de cáncer de piel y
cataratas oculares.
Esto también ha sido beneficioso para el cambio climático, ya que estos mismos productos
que dañan la capa de ozono son responsables de crear gases que aumentan el
calentamiento global.
Un “Agujero en la capa de ozono” antes y
después del protocolo.
4. Es un tratado mundial para proteger la salud humana y el medio ambiente de los
contaminantes orgánicos persistentes (COP). Los COP son productos químicos que
permanecen intactos en el medio ambiente por largos períodos de tiempo, son
ampliamente distribuidos geográficamente, se acumulan en los tejidos grasos de los
organismos vivos y son tóxicos para los seres humanos y la vida silvestre. Los COP circulan
a nivel mundial y pueden causar daños dondequiera que viajen. En la aplicación del
Convenio, los gobiernos deben adoptar medidas para eliminar o reducir la liberación de
estos contaminantes en el medio ambiente. Los contaminantes provienen mayoritariamente
de doce plaguicidas considerados sumamente dañinos.
Los contaminantes están ligados a una serie de efectos nocivos a la salud, como trastornos
congénitos, daño al sistema inmunológico y respiratorio, problemas reproductivos,
desórdenes de índole sexual, periodos de lactación humana más cortos y mal
funcionamiento endocrino, alergias, hipersensibilidad, daño al sistema nervioso,
desórdenes neurológicos de comportamiento y desarrollo, pérdida de memoria, cáncer,
entre otros. Razón por la cual La Organización Mundial de la Salud ha sido una de las
organizaciones que más apoyado esta lucha que, junto a muchas ONG han desarrollado
acciones internacionales de apoyo a esta campaña, por la cantidad de muertes que estos
plaguicidas han provocado.
5. Inicialmente adoptado el 11 de diciembre de 1997 en Kioto, Japón, pero no entró
en vigor hasta el 16 de febrero de 2005. En noviembre de 2009, ya eran 187 estados los
que ratificaron el protocolo. Estados Unidos, el mayor emisor de gases de invernadero a
nivel mundial, no ha ratificado el protocolo. Los gobiernos signatarios de dichos países
pactaron reducir en al menos un 5 % en promedio las emisiones contaminantes entre 2008
y 2012, tomando como referencia los niveles de 1990.
Aunque tal vez 5% no suene como mucho, hay que considerar que es el primer tratado
internacional de reducción de gases de efecto invernadero, además de ser un paso
importante en buscar reducir los efectos que aceleran el cambio climático. Para 2015, a
diez años desde su entrada en vigor, había logrado una reducción del 22,6% en las
emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a los niveles de 1990 en casi
cuarenta países industrializados y la Unión Europea.
6. Fue adoptada en New York el 9 de mayo de 1992 y entró en vigor el 21 de marzo
de 1994. Permite, entre otras cosas, reforzar la conciencia pública, a escala mundial, de los
problemas relacionados con el cambio climático. El Protocolo de Kioto es una adición a este
tratado. Su principal objetivo es Lograr la estabilización de las concentraciones de gases de
efecto invernadero en la atmósfera a un nivel que impida interferencias peligrosas en el
sistema climático y en un plazo suficiente para permitir que los ecosistemas se adapten
naturalmente al cambio climático, asegurando que la producción de alimentos no se vea
amenazada y permitiendo que el desarrollo económico prosiga de manera sostenible.
Ha sido sumamente importante para la concientización del cambio climático en el planeta
además de ser un tratado importante para lograr cambios tangibles como han sido los
logros del protocolo de Kioto. Los próximos años serán cruciales. Una parte importante de
esa carrera contra el tiempo es este acuerdo y los demás que puedan llegar a acordar los
países desarrollados y en vías de desarrollo. También es muy importante comprender que
con sólo eso no alcanzará, que mucho más es necesario. Los especialistas coinciden en que
se debería cambiar hacia fuentes de energía renovable y reducir el consumo de los
hidrocarburos. De esta forma se solucionaría o mitigarían también problemas energéticos y
se atacaría al mismo tiempo su contribución a la emisión de gases de efecto invernadero.
7. Las reuniones se desarrollaron en Río de Janeiro, del 3 de junio al 14 de junio de
1992. Participaron 172 gobiernos, incluyendo 108 presidentes o jefes de estado. Además,
más de 2.400 integrantes de organizaciones no gubernamentales formaron parte, junto a
17.000 personas del foro de ONG complementario al que se le otorgó estatus consultivo,
siendo el antecedente primario del papel vital que hoy en día tienen las ONG. La Cumbre de
Río quedó especialmente grabada en la historia por concretarse en un momento en el cual
la temática ambiental aún no estaba instalada en la opinión pública como en la actualidad.
Algunos de los temas tratados, que posteriormente fueron profundizándose y tomando una
entidad mayor tanto en el área de las organizaciones no gubernamentales como en el
sector gubernamental, fueron los residuos contaminantes en las energías convencionales y
el desarrollo de fuentes alternativas de energía, entre otras.
Se relacionaron de esta manera, por primera vez en un evento de trascendencia mediática
internacional, los efectos negativos del uso de combustibles fósiles con el cambio climático
global. También se indicó que el transporte público podría ser importante en la
disminución de las emisiones contaminantes de los vehículos, además de atacar
directamente las problemáticas urbanas relacionadas con el tránsito y los inconvenientes
de salud provocados por la polución ambiental.