La depresión y la ansiedad son problemas de salud en nuestra sociedad actual, por ello es importante conocer sus características y cómo identificarlas.
2. La depresión y la ansiedad según la
OMS.
Se calcula que, en el 2015, el número total de personas con depresión a escala
mundial superaba los 300 millones. Casi el mismo número de personas sufre algún
tipo de trastorno de ansiedad. Dado que muchas personas presentan ambas
condiciones simultáneamente (comorbilidad), sería inapropiado simplemente sumar
estas dos cifras para obtener una cifra total con respecto a los trastornos mentales
comunes. Las consecuencias de estos trastornos en términos de pérdida de salud
son enormes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado la
depresión como el principal factor que contribuye a la discapacidad mundial (más del
7,5% de todos los años vividos con discapacidad en el 2015) y en la sexta posición
se encuentran los trastornos de ansiedad (3,4%). Asimismo, la depresión es el
principal factor que contribuye a las defunciones por suicidio.
3. ¿Qué es la depresión?
La depresión clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los
sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria
durante un período de algunas semanas o más.
La depresión puede llegar a hacerse crónica o recurrente y dificultar
sensiblemente el desempeño en el trabajo o la escuela y la capacidad para
afrontar la vida diaria.
En su forma más grave, puede conducir al suicidio. Si es leve, se puede tratar sin
necesidad de medicamentos, pero cuando tiene carácter moderado o grave se
pueden necesitar medicamentos y psicoterapia profesional.
4. Causas:
La etiología de la depresión puede ser genética, aprendida o desencadenada por algún factor
como:
• Pérdida de un ser querido.
• Problemas graves en el trabajo, escuela, hogar, etc.
• Dolor prolongado o enfermedad.
• Consumo de drogas o alcohol.
• Violencia doméstica.
• Estrés.
• Medicamentos.
• Deficiencias nutricionales.
• Problemas de sueño.
5. Tipos de depresión:
Depresión mayor: Sucede cundo los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o
frustración interfieren con la vida diaria durante al menos dos semanas, aunque
por lo general se prolonga durante meses.
Trastorno depresivo persistente (crónico): Se trata de un estado de ánimo
depresivo que dura al menos 2 años. A lo largo de ese período de tiempo se
puede tener momentos de depresión mayor junto con épocas en las que los
síntomas son menos graves.
6. Otras formas comunes de depresión:
Depresión posparto: Muchas mujeres se sienten algo deprimidas después de tener un
bebé, pero la verdadera depresión posparto es más intensa e incluye los síntomas de
la depresión mayor.
Trastorno disfórico premenstrual (TDP). Síntomas depresivos que ocurren una
semana antes de la menstruación y desaparecen después de menstruar.
Trastorno afectivo estacional (TAE). Ocurre con mayor frecuencia durante las
estaciones de otoño e invierno y desaparece durante la primavera y el verano, muy
probablemente debido a la falta de luz solar.
Depresión mayor con características psicóticas. Sucede cuando una persona padece
de depresión con una falta de contacto con la realidad (psicosis).
Trastorno bipolar: El trastorno bipolar sucede cuando la depresión se alterna con
manía (conocido previamente como enfermedad maniaco-depresiva). La depresión es
uno de los síntomas del trastorno bipolar.
7. Los síntomas de depresión abarcan:
Estado de ánimo irritable o bajo la mayoría de las veces.
Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño.
Cambio grande en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso.
Cansancio y falta de energía.
Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa.
Dificultad para concentrarse.
Movimientos lentos o rápidos.
Inactividad y retraimiento de las actividades usuales.
Sentimientos de desesperanza y abandono.
Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio.
Pérdida de placer en actividades que suelen hacerlo feliz, incluso la actividad sexual.
8. Distimia
Es un trastorno crónico caracterizado por un estado de ánimo deprimido (o
irritable en niños y adolescentes) que se mantiene durante la mayor parte del día
y la mayoría de los días que no es lo suficientemente grave como para cumplir
los criterios de otros episodios depresivos.
Según el DSM-IV las características principales del trastorno son los sentimientos
de inadecuación, culpa, irritabilidad e ira, aislamiento social, pérdida de interés y
descenso de la actividad y productividad.
9. Distimia, el trastorno del estado de ánimo más común.
Estamos ante un tipo de depresión, muy habitual entre la población. Según el DSM-
V (Manual de Diagnóstico de los Trastornos Mentales), se caracteriza por:
Falta de energía.
Sentimientos de negatividad y apatía.
Días de insomnio, y otros de gran somnolencia.
Inapetencia.
Sensación de desesperanza, dejamos de creer en el futuro.
Nos cuesta mucho concentrarnos.
Sensación de que nadie nos entiende.
Una de las características de la distimia es que podemos vivir muchos años con ella sin
que nos la diagnostiquen.
11. ¿Qué es la depresión encubierta?
Las personas que padecen depresión sufren una tristeza patológica, una falta de
motivación e interés, irritabilidad, cansancio extremo, disminución de sus capacidades
cognitivas, etc. Síntomas que afectan a su vida cotidiana en todos los ámbitos.
Aún con todos los síntomas comentados anteriormente, hay personas que son capaces
de esconderlos, dentro de la llamada “depresión encubierta”.
Te puede estar ocurriendo a ti o a alguien de tu entorno y se puede llevar una vida
aparente normal y/o funcional, con trabajo, familia, amistades, pero en la persona existen
una serie de cambios, de indicadores silenciosos y muy sutiles para los que les rodean,
que permiten su invisibilidad.
Lo que la hace aún más peligrosa que cuando es visible, porque puede cronificarse
debido a la ausencia de ayuda y de apoyo.
12. ¿Puede sufrir alguien depresión encubierta y no saberlo?
La respuesta es sí, este tipo de depresión puede permanecer oculta de forma
consciente, para evitar el rechazo social, por creencias adquiridas principalmente en
el ámbito familiar, en que la tristeza es rechazada, se ve a alguien que sufre
depresión, como alguien débil, como una persona que no es capaz, etc.
En los casos en los que se hace de una forma más consciente, la persona tiene
pensamientos relacionados con que es algo pasajero, que es mejor no preocupar a
los demás con sus problemas, que bastante tienen con los suyos, piensan que ellos
solos pueden y no pueden permitirse ver la llamada de atención de que tanto física
como mentalmente necesitan ayudan y que no hay nada malo en ello.
13. Síntomas:
Cambios del estado de animo: (Suelen ser muy volubles).
Cambios en los hábitos de sueño.
Cambios en los hábitos alimenticios.
Disponibilidad y positivismo.
Centrados en la actividad.
Aumento del consumo de alcohol.
Pueden ser extrovertidos.
14. Mal humor y apatía.
El mal humor y apatía crónica encierran muchas veces una enfermedad que
tarda bastante en poderse diagnosticar. Pasamos épocas prolongadas donde
cualquier palabra nos afecta, y empezamos el día con malestar y sin energía. No
tenemos ánimo y perdemos la capacidad de ver el lado positivo de las cosas.
Lo más complejo de estos estados es que, a pesar de todo, seguimos siendo
funcionales. Podemos ir a trabajar, vamos, venimos, hablamos e incluso fingimos
«sonreír». Sin embargo, sabemos que algo ocurre, y hasta que recibimos el
diagnóstico adecuado pasaremos una época muy complicada a nivel personal.
No obstante, lo nuestro recibe un nombre: distimia, un tipo de enfermedad que
debes conocer.
15. Mitos y errores acerca de la depresión:
Los familiares con el afán de “ayudar” al enfermo de depresión ocasionalmente comenten errores por
desconocimiento de lo que es la enfermedad, por lo que con frecuencia se le escucha decir:
“DEBES PONER DE TU PARTE”, en alusión a las quejas y lamentos suscitados por el dolor moral
anímico.
“ERES UN VAGO QUE NO ORDENAS LAS COSAS NI HACES LA CAMA” comentario dedicado a
condenar la inactividad del depresivo.
“ERES TAN DESCONSIDERADO QUE APENAS HABLAS”, con lo que se le propina un ataque
insultante a su aislamiento.
“TE HAS VUELTO UN LUNÁTICO” comentario irritante dedicado a su abandono de los ritmos
habituales.
El enfermo recibe estos comentarios y otros semejantes como muestras de un trato poco cariñoso o de
una actitud de incomprensión hacia su estado y se pregunta:
¿COMO ME RECLAMAN QUE PONGA DE MI PARTE SI PRECISAMENTE LO QUE ME PASA ES QUE
NO PUEDO HACERLO ?
16. Ansiedad
Los trastornos de ansiedad se refieren a un grupo de trastornos mentales
caracterizados por sentimientos de ansiedad y temor, que incluyen los siguientes
trastornos: trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de angustia, trastorno
de ansiedad fóbica, trastorno de ansiedad social, trastorno obsesivo-compulsivo
(TOC) y trastorno de estrés postraumático (TEPT). Al igual que la depresión, los
síntomas pueden ser de leves a severos. La duración de los síntomas que
presentan habitualmente las personas con trastornos de ansiedad los convierte
en trastornos crónicos, más que episódicos.
17. Prevalencia de la enfermedad.
Se calcula que, en el 2015, la proporción de la población mundial con trastornos
de ansiedad fue de 3,6%.
Del mismo modo que en el caso de la depresión, los trastornos de ansiedad son
más comunes en las mujeres que en los hombres (4,6% en contraste con 2,6%, a
nivel mundial). •
En la Región de las Américas, se estima que hasta 7,7% de la población
femenina sufre trastornos de ansiedad (3,6% de los hombres).
Las estimaciones específicas a nivel de país están disponibles en:
http://ghdx.healthdata. org/gbd-results-tool [en inglés].
18. Tipos de tratamiento:
La terapéutica de la depresión se basa en la psicoterapia y el tratamiento
farmacológico. De hecho, algunos estudios demuestran que el tratamiento ideal
es una combinación de ambos. Los fármacos principales utilizados en el
tratamiento de la depresión son los inhibidores de la mono aminooxidasa (MAO),
los antidepresivos tricíclicos y los inhibidores selectivos de la recaptación de la
serotonina (ISRS).
19. ¿Qué puedo hacer?
Acudir con un profesional de la salud.
Aceptar la depresión y / ansiedad como una enfermedad.
Brindarme aceptación incondicional.
Evitar juzgarme.
Informarme.
Ejercitarme.
Llevar dieta saludable.
Manterner contacto social.