La autoestima y las infecciones de transmisión sexual están relacionadas. Las personas con baja autoestima tienen más probabilidades de contraer una ITS debido a que tienden a tomar más riesgos en las relaciones sexuales y son menos propensas a practicar el sexo seguro. Sin embargo, tener una ITS no define el valor de una persona, y la salud y la felicidad dependen de cultivar una imagen positiva y compasiva de uno mismo.