El documento discute cómo la literatura infantil puede usarse para enseñar conceptos matemáticos a los niños. Explica que las ideas matemáticas se pueden expresar a través de representaciones como símbolos, dibujos u objetos. También señala que los cuentos permiten a los estudiantes explorar conceptos matemáticos de formas familiares y nuevas, y pueden relacionarlos con la vida de los personajes. El documento concluye invitando a los maestros a planear estrategias pedagógicas basadas

1. LUZ RIVERA
Desde la literatura, Rivera (2013) aporta que “las ideas matemáticas se vuelven tangibles
cuando pueden ser expresadas o comunicadas mediante representaciones externas que pueden
ser, en forma hablada, mediante símbolos escritos, mediante dibujos o con objetos concretos”.
(pág. 1)
Por esta razón se debe tener en cuenta que todas las representaciones que hagan los niños
por medio del lenguaje, tanto oral como escrito, dibujos u objetos concretos sirve para que ellos
expresen ideas matemáticas evidenciando los diferentes conceptos que tienen interiorizados
desde su pensamiento lógico matemático.
Según Golden (2012) citado por Rivera (2013),
La literatura infantil puede proveer a los niños contextos de la vida real para comprender conceptos
matemáticos. Aunque el trabajo literario no se relacione directamente con sus vidas, los estudiantes
lo pueden relacionar a la vida de un personaje de algún cuento lo que permite que establezcan
conexiones con el concepto y la narrativa. (pág. 2). Los cuentos, además, proveen a los estudiantes
formas familiares y nuevas para explorar conceptos matemáticos. (Jenner, 2002) citado por Rivera
(2013). (pág. 2).
Por consiguiente se considera importante la literatura infantil, ya que las matemáticas no
son sólo números o cantidades que deben ser contables, sino que también se puede aprender
mediante el diario vivir relacionándolas con los diferentes cuentos y así ofrezcan al niño
experiencias que lo enriquezcan y que de ellas surjan conocimientos que sirvan de base
fundamental para los aprendizajes más complejos que conllevan en un futuro.

2. En conclusión, el aporte de los autores anteriormente mencionados nos invitan a planear y
desarrollar estrategias pedagógicas basadas en el arte y la literatura para desarrollar en los niños
el pensamiento lógico matemático teniendo una metodología de enseñanza más significativa
partiendo desde la experiencia y tomando muestras artísticas y literarias que sirven para
potenciar estos procesos y así sean complementarios haciendo que el niño disfrute y no tenga
dificultades en procesos más complejos, sino que se haga de manera natural y divertida.

3. REFERENCIAS
Rivera Vega, L. (2013). Contando cuentos – La literatura en la clase de matemática en escuela elemental.
Revista 360°(8), 7.