El poema describe el profundo amor de Santa Teresa de Ávila por Dios. Vive en un estado constante de unión con Dios y desea abandonar esta vida mortal para estar completamente unida a Él después de la muerte. Repite la frase "que muero porque no muero" para expresar el dolor de la espera y el anhelo de dejar esta vida y alcanzar la vida eterna en la presencia de Dios.