El documento habla sobre una nueva tasa de basura impuesta por el Ayuntamiento de Madrid en 2009. Se critica que la tasa se cobra según el valor catastral de las viviendas en lugar de la cantidad de desechos, y que se ha eliminado la tasa para grandes empresas generadoras de basura. Además, se argumenta que la tasa es innecesaria dado que el presupuesto y la cantidad de basura no han aumentado, y que su único objetivo es recaudar más fondos para el despilfarro del gobierno municipal. Se anima a la gente a