El documento habla sobre la brecha digital, los desechos tecnológicos y la obsolescencia programada. Explica que la brecha digital se refiere a la diferencia entre quienes pueden y no pueden acceder a Internet, y cómo esto ha afectado el acceso a la educación y el trabajo durante la pandemia. También describe los grandes volúmenes de desechos electrónicos que se generan cada año y los daños que causan al medio ambiente. Por último, explica cómo la obsolescencia programada lleva a que los productos duren
Brecha Digital, Desechos Tecnológicos y Obsolescencia Programada
1. Colegio Monte
Carmelo
“Brecha Digital, Desechos
Tecnológicos y Obsolescencia
Programada”
Nataly Sofia Trejo Ramirez.
Primer año de bachillerato “b”.
Informática.
2. BRECHA DIGITAL
Se conoce como brecha digital a la diferencia entre quienes pueden y no pueden
acceder al uso del internet.
El término brecha digital describe una brecha en términos de acceso y uso de la
tecnología de la información y la comunicación. Tradicionalmente se consideraba una
cuestión principalmente de acceso. En la actualidad, con una penetración global de
teléfonos móviles de más del 95%, la desigualdad relativa se plantea entre aquellos que
tienen más y menos ancho de banda y más o menos habilidades asociadas.
Se dice que la brecha digital es para las TIC como una enfermedad que va eliminando
poco a poco los países pobres de los beneficios de las tecnologías y del progreso
económico.
La brecha digital, en términos muy simples, tiene tres aspectos fundamentales, explica
el experto UDP, acceso a TIC (Tecnologías de la Información y Comunicaciones), uso de
estas TIC y el impacto que ellas generan sobre las comunidades. “Existe una real
necesidad de mejorar el uso y el impacto, sobre una base de acceso mínima ya
establecida, de forma que la tecnología agregue valor y no genere problemas aún
mayores, como aislar a grupos de la sociedad por no saber emplear la tecnología”,
advierte.
3. El desarrollo de las nuevas tecnologías también ha hecho que surjan dos polos que tienen una
clara incidencia en el mercado laboral: por un lado aquellas personas con fácil acceso a estas
tecnologías, y por otro, los que tienen un acceso difícil, costoso y a veces imposible. Esta
fractura se puede dar en una doble vertiente: entre países, y entre personas en un mismo país
o ciudad. Los países que no sean capaces de alcanzar un buen nivel de aprovechamiento de
las TIC perderán competitividad. Puede haber situaciones en que la población tenga acceso
pero no sepa cómo utilizarla o por desconocimiento de las ventajas no las aplique.
Ahora vamos a hablar un poco de este tema relacionándolo con la crisis que esta pasando en
la actualidad.
En el actual periodo de cuarentena, poder realizar teletrabajo y estudiar en línea, establecen
condiciones que van más allá del acceso a datos. Debe existir un entorno apropiado y
habilitado para que esto pueda desarrollarse correctamente por largos períodos de tiempo.
Existen casos, especialmente en zonas rurales, aisladas o rezagadas en términos de inversión
TIC, donde la calidad de servicio o incluso disponibilidad, no habilita el trabajo o estudio a
distancia”. Y es en estos casos donde se puede ver notablemente la desigualdad que hay
entre las personas que tienen y no tienen acceso a internet (brecha digital).
4. En algunos países se llego a crear un informe el cual estaba basado en la disminución de la
brecha digital en el área de salud pero que definitivamente se puede retomar en todas las
áreas y no necesariamente solo en la de salud, este informe se titulaba: -Juntos contra el
aislamiento digital.
Uno de los países que participo en este informe fue España, fue liderado por Menarini y la
archiconocida activista de la eSalud en España, Monica Moro.
Y en este nos presentan algunos recursos con los que se puede disminuir la brecha digital,
los cuales son:
-Formación presencial adaptada
-Web sociales fiables
-Recursos multimedia
-Aplicaciones móviles (Apps)
-Mensajería instantánea.
Mi opinión debido a esto es que estos recursos perfectamente pueden ser retomados en las
demás áreas y que también hay que tomar en cuenta que haciendo un poco más accesible el
5. DESECHOS TECNOLÓGICOS.
Querer tener el último gadget del momento, comprar una nueva computadora, adquirir un dispositivo
que sea por necesidad o gusto son acciones típicas y comunes en nuestro día a día actual. Pero, ¿Qué
sucede con “lo viejo”? ¿Dónde para lo que desechamos? ¿Cuáles son sus posibles consecuencias? ¿Qué
tan culpables somos de la acumulación de chatarra electrónica?
La proliferación de dispositivos digitales se está convirtiendo en un problema para el planeta porque,
cuando su vida útil finaliza —al año se generan casi 50 millones de toneladas de chatarra tecnológica—
, su tasa de reciclaje es insuficiente. Aumentarla es clave para frenar el cambio climático y evitar el
deterioro del medio ambiente.
Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el mundo generó 48,5 millones de
toneladas de basura electrónica en 2018. Este dato pone de manifiesto la creciente importancia del
reciclaje, que también arroja cifras preocupantes: solo el 20% de estos residuos se recicla. De
mantenerse estas tendencias, la ONU estima que podríamos alcanzar los 120 millones de toneladas de
chatarra electrónica en 2050.
El volumen de residuos electrónicos que se producen a nivel mundial y la mala gestión de su reciclado
ponen en peligro el medio ambiente. Entre las sustancias más habituales que contienen estos desechos
se encuentran elementos como el cadmio, el plomo, el óxido de plomo, el antimonio, el níquel o el
mercurio. Estos elementos tóxicos contaminan ríos, lagos y mares, y emiten gases a la atmosfera que
provocan desequilibrios en los ecosistemas. Revertir el modelo de producción y consumo para reducir
6. ¿Los desechos tecnológicos afectan al medio
ambiente?
• Existen diversos daños para la salud y el medio ambiente generado por varios de los
elementos contaminantes presentes en los desechos electrónicos, en especial el mercurio,
el plomo y el cadmio. En el medio ambiente estas sustancias también producen estragos,
las plantas absorben con mucha facilidad el arsénico, lo cual estando cerca de cultivos
provoca contaminación de los alimentos. El plomo es un elemento químico particularmente
peligroso, y se puede acumular en organismos individuales, pero también entra en las
cadenas alimenticias cuando es absorbido por el suelo.
• También debido a la gran cantidad de desechos Tecnológicos que se acumulan cada año
esto afecta gravemente a la contaminación y eso contribuye al calentamiento global.
7. Ahora hablemos un poco de los vertederos tecnológicos, ya que es el lugar en donde estos
desechos se almacenan.
Un vertedero tecnológico es un lugar donde se almacena una cantidad impresionante de material
electrónico usado que ya es inservible.
Al día de hoy se sabe de la existencia de grandes vertederos donde los países occidentales vierten
su basura electrónica. El mayor vertedero del mundo de ese tipo se encuentra en China,
concretamente en la ciudad de Guiyu, información que el propio gobierno chino ha confirmado. Se
calcula que en esa ciudad trabajan 150.000 personas para tratar la basura que llega,
principalmente, de EE.UU., Canada, Japon y Corea del Sur.
En 2009, de las cerca de 215.000 toneladas de productos electrónicos que fueron exportados a
Ghana por parte de la Unión Europea -desde lavadoras a ordenadores-, el 70% eran de
segunda mano. Y de todos ellos, el 15% eran totalmente inservibles (Naciones Unidas asegura
que tan solo 50 toneladas de basura electrónica son vertidas cada año en el mundo).
Ante el alto coste de su reciclaje, la mayor parte de productores de bienes electrónicos
prefiere que éstos sean enviados a los vertederos de Ghana, Kenia, Nigeria, China o India. A fin
de cuentas, la infamia queda lejos y el ausente reciclaje obliga a los consumidores a demandar
nuevos bienes. Y en este círculo vicioso -como destaca Robin Ingenthron, de la organización
Retroworks- son las compañías tecnológicas las principales beneficiadas al ahorrarse los costos
8. •Obsolescencia programada.
• La obsolescencia programada es la programación de la vida útil de un producto, para que el
producto se vuelva inútil en un periodo de tiempo determinado previamente. También se
pueden limitar por número de usos, por ejemplo, una impresora que después de imprimir
diez mil copias deje de funcionar.
• El objetivo principal de la obsolescencia programada es garantizar que los consumidores
compran los productos en múltiples ocasiones, en lugar de una sola vez. Esto incrementa
naturalmente la demanda de productos porque los consumidores tienen que seguir viniendo
una y otra vez. Un usuario debe comprar más veces el mismo producto que si ese producto
fuera resistente y le durara toda la vida.
• Esto afecta bastante en la cantidad de desechos tecnológicos que se producen ya que como
cada producto tiene un tiempo de utilidad y cuando el lapso de este tiempo pasa y el
producto ya no es útil es ahí cuando es desechado y ya se convierte en un desecho
tecnológico más.
9. • En el último siglo las empresas han investigado cómo diseñar productos que duren menos,
para que así volvamos a comprar sus productos. ¿Tiene sentido gastar dinero investigando
cómo fabricar productos menos duraderos? A simple vista la respuesta es clara, pero si no
se fundieran las bombillas, las empresas dedicadas a su fabricación quebrarían y no
fabricarían más. En este caso los empresarios buscan su único y propio bien y es aquí
cuando nos llegamos a hacer preguntas tales como: ¿tiene sentido fabricar productos
infinitos en un planeta con recursos limitados? ¿no hay ninguna forma de que las empresas
puedan buscar mejorar la eficiencia y a la vez pudieran sobrevivir?
• Es aquí donde nos damos cuenta que los seres humanos nos hacemos daño a nosotros
mismos con cada acción que hacemos y con los años el daño se hace mas notorio. Solo
velamos por el bien económico y dejamos de lado lo más importante tal y como es cuidar el
medio ambiente para el bien de los demás y el de nosotros mismos.
10. • Algunas medidas propuestas para asegurar la reutilización de los aparatos
eléctricos y electrónicos y disminuir la obsolescencia programada son: el
alargamiento de las garantías; el porcentaje mínimo del 5% de preparación
para la reutilización, asegurando la disponibilidad de residuos con las
condiciones adecuadas para la reparación y reutilización en los centros
especializados.
• Además de éstas existe una financiación garantizada de la preparación para
la reutilización en coherencia con la responsabilidad ampliada del
productor; un control férreo y un impulso a las empresas sociales para la
reparación, reutilización y reciclaje de residuos.