Colombia es un Estado social de derecho con soberanía sobre su territorio y autoridad para administrar las instituciones dentro de él. Como Estado, Colombia tiene prioridades como garantizar las libertades de sus habitantes, ser reconocido internacionalmente, y mantener el orden interno para garantizar su legitimidad. La Constitución colombiana establece a Colombia como un Estado unitario, descentralizado, democrático, participativo y pluralista basado en el respeto a la dignidad humana.