Chucho cuenta la historia de cómo su vida cambió con la llegada de Claudia, la novia de su dueño, y luego del bebé. Al principio, sintió celos de que Claudia le quitara tiempo y atención de su dueño, pero luego se acostumbró a ella. Cuando nació el bebé, tuvo miedo de que ya no lo quisieran, pero finalmente pudo acercarse al bebé y protegerlo, convirtiéndose en parte importante de la nueva familia.