Una mirada sobre África. Historia de África. Robertcm4
Historia de África.
El reino de Ghana, Mali y Songhai
El reino de Monomotapa
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Robert Cuenca i Montagut
Juan II de Castilla, el de Antequera, (1405-1454) nació un seis de marzo en Toro (Zamora) y falleció en el Palacio de Luis García de Morales, de Valladolid. Está enterrado en la Cartuja de Miraflores, Burgos. Juan II, que comenzó a reinar – en la mera apariencia – por sí mismo a los 14 años, en 1419, estaba dotado de excelentes cualidades como hombre, pero carecía de todas las que son de un rey. Él mismo, cuando la proximidad de la muerte proyectaba sobre las cosas una nueva claridad, se quejaba de la fortuna que le había situado en un trono.
Bloque 2: La Edad Media: tres culturas y un mapa político en constante cambio...Florencio Ortiz Alejos
Bloque 2 de Historia de España de Segundo de Bachillerato en el que se explica la evolución política y características de Al-Ándalus y los reinos cristianos.
Una mirada sobre África. Historia de África. Robertcm4
Historia de África.
El reino de Ghana, Mali y Songhai
El reino de Monomotapa
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Robert Cuenca i Montagut
Juan II de Castilla, el de Antequera, (1405-1454) nació un seis de marzo en Toro (Zamora) y falleció en el Palacio de Luis García de Morales, de Valladolid. Está enterrado en la Cartuja de Miraflores, Burgos. Juan II, que comenzó a reinar – en la mera apariencia – por sí mismo a los 14 años, en 1419, estaba dotado de excelentes cualidades como hombre, pero carecía de todas las que son de un rey. Él mismo, cuando la proximidad de la muerte proyectaba sobre las cosas una nueva claridad, se quejaba de la fortuna que le había situado en un trono.
Bloque 2: La Edad Media: tres culturas y un mapa político en constante cambio...Florencio Ortiz Alejos
Bloque 2 de Historia de España de Segundo de Bachillerato en el que se explica la evolución política y características de Al-Ándalus y los reinos cristianos.
Ignore LTC Planning at the Risk of Your Own Financial Peril.Dolf Dunn
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Tema 2 parte 1 la Edad Media: tres culturas y un mapa político en constante c...Ricardo Chao Prieto
Primera parte del Bloque 2: La Edad Media, tres culturas y un mapa político en constante cambio (711-1474). Incluye al-Ándalus, la historia política de los reinos cristianos hasta el siglo XIII, y la Reconquista y la repoblación.
Tema 2. La Península Ibérica en la Edad Media: al-ÁndalusRicardo Chao Prieto
La Península Ibérica en la Edad Media: al-Ándalus
1.-Evolución política: la conquista, los emiratos y el Califato de Córdoba.
2.--La crisis del siglo XI: reinos de taifas e imperios africanos.
3.-Organización política y social. El legado cultural.
Tema 3 LA PENÍNSULA IBÉRICA EN LA EDAD MEDIA: LOS REINOS CRISTIANOS (SS. VIII...Ricardo Chao Prieto
Tema 3 LA PENÍNSULA IBÉRICA EN LA EDAD MEDIA: LOS REINOS CRISTIANOS (SS. VIII - XIII). Reinos de Asturias, León, Castilla, Pamplona, Aragón, condados catalanes.
This part of the History of Spain is less studied. It is interesting to know what influences we got since the time of Conquest by the Spaniards, which they had already received by others.
Conceptos desarrollados de Historia de España de 2º de Bachillerato para la EBAU 2019 de C. y León.
NOTA: Buscad la versión actualizada para 2020 (mucho mejor que esta versión)
1. La conquista árabe de la Península Ibérica
1-El problema de las fuentes:
Sigue apasionando a los investigadores por los múltiples problemas que plantea el análisis de las fuentes árabes y
cristianas de la Edad Media. Esos problemas son de índole cronológica, topográfica y onomástica y el primero de ellos
es averiguar por qué los árabes dieron el nombre de al-Andalus a la España musulmana, nombre que se perpetuó en el
actual de Andalucía tras la prolongada resistencia de los reyes musulmanes de Granada.
El nombre de al-Andalus
Aparece ya en tradiciones atribuidas a Mahoma, en poesía árabe preislámica o de la primera época del Islam o en
relación con los primeros califas que sucedieron al Profeta. Todas estas fuentes son anteriores al año 711 y, por tanto,
apuntan a un origen oriental que no tiene nada que ver con la teoría que sostiene que el nombre de al-Andalus derivaría de
los vándalos, porque estos bárbaros atravesaron las tierras del sur de la Península camino de Africa hacia el año 429.
Hay quien apunta que el nombre estaría relacionado con el mito de la Atlántida, resultado de una transmisión
literaria del mito de Platón que se puede rastrear ininterrumpidamente en
Muchos autores clásicos, tanto griegos como latinos. Junto a esta transmisión del mito de la Atlántida debió existir en los
pueblos marineros del Mediterráneo oriental la creencia muy extendida de una isla o restos de ella más allá de las
Columnas de Hércules o del estrecho de Gibraltar. Las fuentes árabes del norte de Africa y muchas hispanoárabes
identifican claramente el Bahr al-Andalus o Mar de al-Andalus con el océano Atlántico.
2-Las causas de la conquista
El hecho histórico indiscutible es la conquista definitiva de Cartago por Musa ben Nusayr hacia el año 698.
Desde Cartago la flota musulmana recorre el Mediterráneo occidental, pues las fuentes árabes citan incursiones marítimas
a Sicilia, Cerdeña, Baleares y, por supuesto, al-Andalus.
Mientras tanto la decadente monarquía visigoda de Toledo se debate en la anarquía
tras la muerte de Witiza (710) y la usurpación de la corona por el rey Rodrigo.
La cronología de la conquista árabe de Hispania es muy contradictoria y confusa.
Por el lado musulmán hay tres protagonistas según relatos de discutible autenticidad: Musa ben Nusayr, emir de Africa
del Norte nombrado por el califa de Damasco; Tarif; y Táriq, gobernador de Mauritania.
Por el lado cristiano hay otros cuatro protagonistas: Rodrigo, el rey; el conde don Julián, gobernador de la zona del
Estrecho; Teodomiro---REINO DE TUDMIR, gobernador de la Cartaginense y los hijos de Witiza
GUERRA CIVIL ENTRE DON RODRIGO Y LOS HIJOS DE WITIZA
Según las fuentes árabes, el conde don Julián entabló negociaciones con Musa para demostrar la debilidad de la
monarquía visigoda e invitarle a desembarcar en la Península. De paso vengaría su honor manchado por la violación de su
hija por el rey. Entonces Musa envió a un beréber llamado Tarif, que desembarcó en una isla con cuatro barcos, 400
hombres y 100 caballos. A partir de entonces recibió su nombre y se llamó Tarifa. Sin embargo el resto de las fuentes no
lo mencionan.
Después de ese supuesto desembarco de Tarif, Musa ben Nusayr envió a su lugarteniente Táriq, quien desembarcó con
1.700 hombres, 7.000 ó 12.000, según las fuentes árabes, beréberes en su mayor parte, en Gibraltar, en la primavera del
año 711. Las fuentes árabes no están de acuerdo ni en el número de combatientes que participaron en el desembarco, ni en
la cronología, ni en el lugar exacto del desembarco ni en el itinerario seguido. La mayoría de ellas afirma que los
musulmanes arribaron a tierra en varias oleadas con tiempo suficiente para que el último rey de los visigodos acudiera con
sus tropas desde el norte de la Península, donde combatía a los vascos Los combates duraron varios días del mes de
julio del 711 y terminaron con la derrota y muerte de Rodrigo. El lugar del encuentro aparece en las fuentes árabes con
varias denominaciones: Wadi Lakk o Río del Lago, identificado tradicionalmente con el Guadalete; Wadi-l-Buhayra o
Río de La Albufera, que puede corresponder al río Barbate o a la laguna de LA JANDA .
3-La ocupación de la Península Ibérica (711-712-716-719).
A partir de ahí las fuentes tampoco se ponen de acuerdo. Unas señalan que Táriq invadió las coras de Málaga,
Granada y Tudmir, región del sudeste gobernada por el conde Teodomiro. Pero otras versiones señalan un itinerario
inverso, es decir, las tropas árabes conquistaron primero Tudmir. Esta noticia contradictoria es de capital importancia y
replantea el problema de la invasión. Determinados nombres de lugares citados en las fuentes árabes pueden
corresponder a topónimos murcianos. La al-Buhayra o al-Lakk podría identificarse con La Albufera o Mar Menor o
mejor aún, con la laguna o albufera que rodeaba la misma ciudad de Cartagena por el noroeste, origen del Almarjal
medieval y moderno. El Wadi-l-Tin puede ser el río Guadalentín o Sangonera. Resulta curioso constatar en la Primera
Crónica General de España que mandó componer Alfonso X el Sabio, basándose en la Crónica del Moro Rasís, geógrafo
e historiador hispanoárabe del siglo X, la siguiente noticia sobre la derrota de Don Rodrigo: pero algunos dicen que fue
esta batalla en el campo de Sangonera, que es entre Murcia y Lorca.
Simultáneamente a estos hechos interviene el emir del Norte de Africa, Musa ben Nusayr. Según unos, fue avisado
desde el primer momento por el propio Táriq para que le enviara tropas de refuerzo para consolidar la cabeza de puente
establecida en la península. Según otros, Musa manifestó una gran irritación cuando se enteró del desembarco y ordenó a
su subalterno que no se adentrara en el interior del país hasta su llegada. Musa y sus tropas arribaron Cádiz en junio del
2. 712 y quiso seguir un itinerario distinto del de Táriq contando con el asesoramiento del conde don Julián. Después de
ocupar las plazas fuertes de Medina-Sidonia y Carmona, Musa ben Nusayr sitió Sevilla, que se rindió tras débil
resistencia..Después prosiguió hacia el norte y sitió la ciudad de Mérida, que resistió varios meses hasta que capituló el 30
de junio del 713.
Aunque la mayoría de las fuentes árabes dice que Musa ben Nusayr envió a su hijo Abd al-Aziz a Sevilla para sofocar
una rebelión, sin embargo, otros textos árabes sitúan al hijo del emir firmando con el conde Teodomiro las capitulaciones
de la antigua Cartaginense y que en árabe recibió el nombre de Tudmir. Este tratado permitía a los cristianos conservar
cierta autonomía en siete ciudades a cambio del pago de ciertos tributos a favor de los combatientes árabes, tanto hombres
libres como esclavos. Se conservan cuatro versiones de este interesantísimo documento, fechado en abril del año 713. En
las versiones citadas coinciden los hombres de seis ciudades: Orihuela, Mula, Lorca, Alicante, Hellín y Valencia. La
séptima varía; para unos transmisores se trata de Elche y para otros de Villena o Bigastro. El pacto de Teodomiro, de
indiscutible autenticidad, es el primer documento hispanoárabe del que se tiene noticia y su análisis y estudio son
esenciales para tener una idea clara del régimen civil y militar en la Península Ibérica durante el siglo VIII. Teodomiro
casó una hija suya con un noble sirio y sus descendientes de la más rancia y rica nobleza hispanoárabe se perpetuaron en
el reino de Murcia hasta el siglo XIII cuando fue ocupado por Alfonso X y Jaime El Conquistador.
Una vez asegurada la capitulación de Mérida, Musa se encontró con Tariq en Talavera, junto al cual seguiría
avanzando hacia el norte. En la primavera del 714 Musa y Tariq avanzaron hacia Zaragoza, desde donde Tariq se dirigió
a Soria y Palencia, para penetrar en Asturias, desde donde alcanzó el mar Cantábrico en Gijón (Asturias). Por su parte,
Tariq ocupaba Logroño, León y Astorga, fijando los límites de la conquista en el valle del Ebro. En verano de 714, Tariq
y Musa fueron llamados por el califa de Damasco, mientras que el hijo de Musa, Abd-al-Aziz permaneció en Sevilla,
primera capital de al-Andalus, como walí. Bajo su mandato se completó la conquista de la zona oriental y se consolidaron
las posesiones de Évora, Santarem y Coimbra.
La conclusión de la ocupación musulmana
En 716, Abd-al-Aziz era asesinado violentamente, abriéndose así un periodo de turbulencias en al-Andalus que se
extendería durante cuarenta años. Ese mismo año la capital se instaló en Córdoba y entre ese año y el 719 capitularon
Pamplona, Huesca y Barcelona, lo que obligó a los hispanogodos resistentes a refugiarse en las montañas del Cantábrico o
el Pirineo o emigrar a la zona de Narbona. Aunque Narbona cayo en el año 720, los musulmanes no lograron penetrar en
el reino franco merovingio y a pesar de que prosiguieron las expediciones musulmanas, estas fueron definitivamente
paralizadas en el 732 en la Batalla de Poitiers.
La conflictividad interna de al-Andalus propició asimismo la consolidación de un movimiento insurreccional en la costa
del Cantábrico, surgido de la victoria en la batalla de Covadonga el 718, por parte de Don Pelayo, sobre el cual se
edificaría paulatinamente durante la primera mitad del siglo el reino de Asturias, al que seguirían más tarde la formación
de otros núcleos en la zona oriental.
LA RAPIDEZ EN LA CONQUISTA
La rápida y segura implantación del Islam en las tierras conquistadas se debió, en el primer siglo de su existencia,
en gran parte a la flexibilidad de su ley religiosa, que, expuesta en El Corán, aún no había sido encorsetada por las
interpretaciones de los juristas, que a partir del siglo IX cerraron, en gran parte, las posibilidades de incluir en su seno la
mayoría de los usos y costumbres de los pueblos conquistados. Ello supuso que gran parte del territorio hispanorromano
no fue conquistado por la fuerza militar sino a través de capitulaciones( arriba hemos comentado el pacto de Teodomiro
con Abd-al-aziz)
Además el éxito del Islam se explica porque la situación de la sociedad visigótica era sumamente desagradable: el
peso de los impuestos, la existencia humillante de los siervos, la discriminación de los judíos, las continuas sublevaciones
de los vascones y la existencia de islotes paganos, sobre todo en las zonas montañosas del Norte, hacían que gran parte de
la población no se sintiera representada en el gran proyecto de unidad peninsular que bien o mal habían llevado a cabo
godos e hispanorromanos.
Ignacio Olagüe en su célebre y polémica «La Revolución islámica en Occidente» (1974) basada en su libro
editado en 1968 en Francia con el relevante título “Les arabes n’ont jamais envahí l’Espagne” llega mucho más allá y
sostiene que la invasión del siglo VIII fue un mito, una tesis revisionista que no se encuentra respaldada por la comunidad
académica. (http://www.webislam.com/?idt=5476)
Las conclusiones principales de su tesis es que:
- Que la historia de la Península Ibérica en el siglo VIII es oscura y confusa, con testimonios poco fiables
-Que los eventos militares de casi un siglo y medio tras la pérdida de la hegemonía visigótica, no es sino una sucesión de
guerras civiles entre los fragmentos de aquel reino medieval, los de la Tarraconense apoyados en sus huestes centro y
norte peninsulares, los de la Bética apoyados en sus huestes del sur y de la Tingitana, al otro lado del estrecho de Gibratar.
- Que la arabización de la Península se produce principalmente a partir de la primera mitad del siglo IX y que dicha
arabización y consecuente islamización es debida ante todo a las estrechas relaciones humanas existentes entre el sur
peninsular y la costa norte africana. Es lo que viene a llamar la transmisión de una idea-fuerza, frente a la idea de la
conquista por un contingente militar procedente de Arabia o cuando menos del norte africano