1. COACHING: LAS CLAVES PARA OBTENER
MAYORIA SOCIALISTA ABSOLUTA EN EL
AYUNTAMIENTO DE LA CARLOTA.
Estrategia para volver a tener un mínimo de 14 concejales socialistas.
D. Francisco J. Moro Arévalo – Militante del PSOE en La Carlota desde 1.998
(Experto en Coaching)
2. El Coaching (Según ASESCO – Asociación Española de Coaching)
El Coaching profesional es un proceso de entrenamiento personalizado y confidencial
mediante un gran conjunto de herramientas que ayudan a cubrir el vacío existente
entre donde una persona está ahora y donde se desea estar.
En la relación de Coaching el coach ayuda al desarrollo personal elevando la
conciencia, generando responsabilidad y construyendo auto confianza.
El coaching es una técnica relativamente nueva ya que se podrían relacionar
pensamientos de filósofos como Sócrates y Platón. Desde principios de los ochenta se
implantó en EE.UU., paulatinamente se fue implantando en Japón y diversos países
Europeos y en la actualidad se está implantando con gran empuje en toda Hispano
América.
Es el arte para que la personas consigan lo mejor de sí mismas en todo aquello que
deseen, mediante una relación continuada, se requiere un alto nivel de entrega y
energía por ambas partes, pero bien es cierto que el trabajo duro proporciona grandes
satisfacciones.
El coaching no es ninguna terapia ni proceso curativo de nada. No se trata de ningún
asesoramiento psicológico.
El coaching es una disciplina nueva que nos acerca al logro de objetivos
permitiéndonos desarrollarnos personal y profesionalmente. Es una competencia que
te ayuda a pensar diferente, a mejorar las comunicaciones que mantienes y
profundizar en ti mismo.
Se podría decir que el coaching es el arte de trabajar con los demás para que ellos
obtengan resultados fuera de lo común y mejoren su actuación. Es una actividad que
genera nuevas posibilidades para la acción y permite resultados extraordinarios en el
desempeño.
Otra forma de definir al coaching es como de una alianza entre Coach y cliente, es un
acuerdo entre las partes, donde se establecen los objetivos a alcanzar, la forma de
llevar adelante el programa, la agenda de trabajo y la evaluación de los resultados que
el “asistido” va alcanzando.
Y se puede realizar mediante contacto directo, al teléfono y/o por e-mail.
El coaching es mucho más que una herramienta para la gestión, es un modo de ser y
de hacer cotidianamente. Lo que lo convierte en una herramienta genial en la gestión
de empresas y una herramienta de valor incalculable en el desarrollo personal para
obtener metas tanto personales como profesionales.
3. Pregunte a cualquier persona que lo haya experimentado y te dirán cosas como;
“Me ha traído satisfacción personal y éxito. Un gran sentimiento de haber conseguido
cosas que casi no podía imaginarme sin el apoyo de un Coach. Mas energía en mi vida
y con ganas de moverme hacia adelante de forma positiva y con un propósito en mi
camino.”
Los beneficios se hacen visibles y tangibles cuando el cliente profundiza en sus
situaciones personales, mejora sus relaciones, descubre talentos que tenía escondidos,
arranca con nuevas carreras apasionantes, se libran de cosas y lazos que les atan y les
impiden progresar tanto en sus vidas personales como profesionales.
También podemos definirlo como una profesión que consiste en acompañar a
personas o grupos en la misión de alcanzar sus objetivos, y más a largo plazo, al éxito
en su evolución personal, profesional y corporatívo.
Hoy en día, su práctica es accesible y aconsejable a todas las personas que deseen
obtener mejores rendimientos en aspectos tanto personales como profesionales.
El coaching no atiende patologías ni enfermedades.
En el coaching tenemos clientes, en terapia pacientes.
Tienen objetivos diferentes y se emplean técnicas y recursos diferentes.
Por lo general las personas acuden a la terapia para profundizar en algunos temas y al
Coach para moverse hacia sus objetivos y metas.
Un Coach acompaña a su cliente en el diseño de futuro sin que el pasado limite al
desarrollo.
El Coach trabaja pasando temas rápidamente, avanzando, no profundiza en ellos.
En terapia de analiza el ¿por qué? de las cosas, en el Coaching se trabaja en el ¿Por qué
no?. Incluso en el ¿Para qué? de lo que quiere el cliente.
En el Coaching generalmente trabajamos hacia el futuro que quiere ser diseñado por el
cliente modificando el presente, la terapia suele comenzar por el pasado.
La terapia se enfoca en lo que está mal mientras el Coach se enfoca en lo que se puede
mejorar y desarrollar.
El Coaching se centra en lo que deseas y es posible para tí, no se centra en lo que te
pasó.
Un Coach trabaja exclusivamente en objetivos y metas donde el cliente está
comprometido.
4. Para solucionar un problema, lo primero
es reconocer que tenemos un problema.
¿Qué es C.R.A.S.?
C.R.A.S. es el sonido que se produce al partir una rama seca.
El socialismo Carloteño se está convirtiendo en esa rama seca ante la falta de
ideas, de programa solido enraizado en las bases militantes socialistas en particular y
en nuestra ciudadanía en general. Que está llevando a consigo la desilusión y una
constante y continua pérdida de votos, (véase la perdida de cerca de 500 votos en las
últimas elecciones), que se manifiesta como el desapego de la sociedad Carloteña
hacia sus dirigentes políticos. (Véase la bajada de participación de las últimas
elecciones).
Pasamos de 14 concejales a 10 y el decimo entro por los pelos, la realidad
estamos al borde de perder la mayoría, y quedar el socialismo Carloteño en las garras
de una enfervorecida Izquierda Unida ante su continuo avance. (Corremos el peligro
de que nos adelanten por la Izquierda).
Pero ojo no perdamos de vista a PODEMOS, (cerca de 200 votos en las últimas
elecciones) que se está convirtiendo en un fenómeno cada vez más consolidado. O a
UPYD, con sus cerca de 250 votos.
Pero cometeríamos un enorme error si intentáramos cerrar nuestro flanco
izquierdo ese ya lo dominan ellos, nosotros debemos volver a retomar lo que nos hizo
llegar al poder una y otra vez, el Centro Izquierda.
Sin olvidar que España es un país de profundas raíces cristianas (Véase la
Semana Santa, la romería, etc…, como ejemplo), aunque pensemos como socialistas
que el laicismo es el camino correcto respetemos como siempre las particularidades e
idiosincrasia andaluza y española.
C.R.A.S. es un movimiento ciudadano, socialista, que intenta recoger las
opiniones de todos aquellos militantes y votantes que piensan que la situación puede
mejorar si todos aportamos y apostamos creyendo que las cosas se pueden hacer
mejor.
“La felicidad no es un destino, sino un camino, una forma de viajar al ponernos
en camino hacia nuestro propósito; lo que no quiere decir que nuestra vida no está
exenta de lucha de problemas, sinsabores y frustraciones. Nuestro primer objetivo y
obligación en la vida es encontrar nuestro propósito vital, nuestra razón para vivir y,
una vez descubierta, entonces ponernos en ese camino”
5. CONCIENCIA-RESPONSABILIDAD-ACCION-SOCIAL
MOTIVACIÓN
MOTIVACION. (Moverse hacia la acción) El término motivación, puesto que en la
mayoría de acepciones encontradas se define como “ el motor de nuestra forma de
actuar, al comportarse como una fuerza capar de impulsar, dirigir y mantener nuestra
conducta en el tiempo”.
De ese modo, se podría atribuir una relación prácticamente casual entre la felicidad y
la motivación, de manera que para que exista la primera habría de darse la segunda
variable. Dicho de otro modo, la existencia de motivaciones llevaría a las personas a
vivir en un estado más o menos permanente de felicidad.
Trasladado al ámbito político, esto significa que para que reine un espíritu positivo,
optimista y vital ha de existir un conjunto de motivaciones que muevan a los militantes
a actuar en busca de la mejor realización posible del trabajo político, viendo realizadas
de esa manera unas necesidades propias y conjuntas con las del partido en el que
milita.
Por ello, se instaura la necesidad de definir cuáles son esos estímulos que ayudan a los
militantes a trabajar al máximo rendimiento, logrando con ello la máxima consecución
de objetivos. En este sentido, dos son las categorías principales en las que se dividen
los estímulos:
• Particulares: la situación personal del secretario general o alcalde y de los
militantes o concejales, es básica para lograr obtener los índices de motivación
más elevados. Gozar de un buen clima afectivo, tanto a nivel familiar como
sentimental, es solo una de estas circunstancias deseadas por todos.
• Políticas: en este apartado se encuentran todos aquellos factores relacionados
con el entorno del partido. Las características del puesto desempeñado, las
condiciones del militante, el reconocimiento por parte de los dirigentes, el
ambiente político y, en especial, el trato con el secretario general y alcalde son
algunos de estos condicionantes.
Estímulos todos ellos que toman un carácter imprescindible para evitar la aparición del
que es el mayor enemigo de la motivación: la frustración. El desánimo y la apatía son
dos de los signos más clarividentes de esta situación que, en el peor de los casos,
puede acabar hundiendo definitivamente el desarrollo de un buen trabajo de
militancia.
6. ESTRATEGIAS DE MOTIVACIÓN POLÍTICA DE BASE
Para lograr la máxima eficacia y motivación de los militantes, los partidos deben ser
conscientes de que los viejos métodos consistentes en el “ordeno y mando” han
perdido la efectividad de antaño. Hoy en día, liderar un partido político ya no es solo
una labor unidireccional de los dirigentes, puesto que todo el equipo debe estar
implicado para hacer más efectiva dicha tarea. Por eso, entre las técnicas adecuadas
de motivación política, destacan las siguientes:
• Hablar y escuchar a los militantes: algo tan sencillo como dedicar unos minutos
a hablar con los militantes pasa desapercibido para la mayoría de los partidos.
Escuchar la opinión, las propuestas y las necesidades de los militantes acerca
de su situación política y la del partido resulta fundamental para aumentar la
motivación o, en su defecto, para mejorar el ánimo de aquellas personas más
desanimadas. Un intercambio de información que siempre deberá realizarse en
ambos sentidos, para que tanto dirigentes como militantes sean conscientes
del camino que debe tomar el partido.
• Ofrecer información de la labor y retos futuros del partido: la comunicación
vuelve a ser la base de la segunda regla, en donde la palabra la tienen los
dirigentes, quienes deben dar a conocer los progresos, las actividades en
marcha y las metas a corto y largo plazo del Partido. Esta comunicación
corporativa es un pilar básico de la cultura organizacional, para que todos los
miembros del partido posean información suficiente del partido donde militan.
Ello aumentará la confianza y evitará la aparición de los indeseados rumores
que pueden provocar inestabilidad política.
• Reconocimiento: alabar el trabajo bien hecho y los méritos es una de las
mejores recompensas que pueden obtener los militantes. El reconocimiento
verbal de aquellas actitudes o resultado admirables permitirá a los militantes
identificar cuál es el camino a seguir, les hará sentirse valorados y les ayudará a
continuar predicando con el ejemplo en el futuro. Felicitar por hacer las cosas
bien no supone coste alguno y su efecto motivador es fundamental para la
eficiencia en el trabajo. La única advertencia en este sentido es que los
dirigentes deben ser justos, reconociendo de forma equitativa, y sin
preferencias, los aciertos de cada uno de los militantes.
7. QUERER ES PODER
Ninguna de estas estrategias garantes de la motivación política pueden ser llevadas a
la práctica si no existe la decisión voluntaria del individuo de luchar por la consecución
de una felicidad que no ha de ser un objetivo final, sino que ha de presentarse como
una condición del mundo político.
“para ponernos en acción hay un motor fundamental: nosotros mismos. Nadie lidera
nada si no quiere; es decir, el inicio está en la elección consciente y voluntaria de quiere
liderar algo”.
Por ello, cultivar esta fuerza de voluntad es la primera piedra de un camino en el que
se requiere de esa energía inicial que ha de saber transmitirse al resto de los
militantes, puesto que únicamente con el compromiso de todos se podrán dejar atrás
las dificultades, e incluso salir reforzados de estos reveses inesperados.
“ los objetivos políticos solo se consiguen si todo el equipo rema en la misma
dirección, si cada miembro del mismo tiene claro que mientras mejor haga su trabajo
cada integrante, mejor será el resultado conjunto. En este contexto el compañerismo
los comportamientos éticos y la lealtad con el resto de los miembros del partido y con
el partido son esenciales”
En este sentido, motivar a la militancia socialista es tan sencillo como dedicar un
tiempo mensual a poner en práctica algunas de las medidas anteriormente
enunciadas. No supone desembolso económico y la felicidad conseguida en el equipo
bien merece un esfuerzo por parte de los dirigentes, que verá recompensada su
entrega con una mejora notable en los resultados del partido.
Junto a esa voluntad, las cualidades más deseadas del líder político son las siguientes:
• Empatía: saber ponerse en el lugar de los militantes, evitando realizar acciones
como reproches en público, objetivos que se saben inalcanzables, y una larga
lista de tareas que no se terminan y acaban frustrando a los militantes.
• Humildad: saber enseñar las cualidades de uno mismo, sin que la muestra
termine por convertirse en arrogancia. Para ello es importante cuidar el tono
en la comunicación. Junto a ello, se debe tener disponibilidad para aprender de
los militantes y trabajar de esta manera en un entorno colaborativo.
• Respeto: es fundamental en el trato dirigente-militante. Se pueden decir las
cosas que se hacen mal, reprender una actitud, pero siempre han de cuidarse
las formas para no incurrir en ofensas gratuitas. Es decir, que las críticas sean
constructivas en lugar de destructivas.
8. • Dar ejemplo: nunca se puede pedir algo a un militante si no se predica con un
ejemplo, en caso como no llegar tarde al trabajo, ni a las reuniones….
• Disfrutar: el entusiasmo por el trabajo político siempre ha de empezar por el
escalón más alto en el organigrama del partido. Esa vitalidad es fácil de
contagiar y ayudará a generar un positivismo general en el día a día del partido
socialista.
Esto significa que conseguir un clima político positivo y motivador es una fórmula
sencilla, que permite extraer y asegurar el talento en los militantes, aumenta el ánimo
de los mismos, incrementar su sentido de compromiso con el partido y, en definitiva,
ayudar a que todo el equipo, sin excepción, contribuya a lograr los mejores resultados.
Disfrutar, esa es la palabra mágica que debe hacerse presente en el trabajo político, y,
para lograrlo, los incentivos inmateriales son tanto o más importantes que los
materiales. Descuidar estos intangibles supone desatender la posibilidad del partido de
adquirir una ventaja política sobre el resto de partidos.