El cuidado del ternero recién nacido incluye limpiar su nariz y boca, llevarlo a un lugar protegido, cortar y desinfectar su cordón umbilical, inducirlo a mamar calostro en las primeras 6 horas, e identificarlo. La ingesta temprana de al menos 2 litros de calostro en las primeras 2 horas de vida es esencial para que el ternero reciba anticuerpos maternos, ya que nace sin ellos.