El documento describe diferentes formas en que el chocolate se usa en platillos salados. Menciona que en Japón se ofrecen hamburguesas, papas fritas y risotto con chocolate. También destaca que el mole mexicano, ya sea poblano u oaxaqueño, combina chocolate con una variedad de especias para crear un sabor único. Finalmente, explica que los aztecas, mayas e incas usaban semillas de cacao como moneda de cambio.