Cuando era presidente García Moreno en Ecuador, llego al colmo la indignación de los pueblos indígenas por el abuso que llegaron los opresores gracias al cobro de diezmos.
Daquilema y la conciencia histórica del Pueblo Quichua
1. DAQUILEMA Y LA CONCIENCIA HISTÓRICA DEL PUEBLO
QUICHUA
En 1871 es fusilado Fernando Daquilema
Cuando era presidente García Moreno en Ecuador, llego al colmo
la indignación de los pueblos indígenas por el abuso que llegaron
los opresores gracias al cobro de diezmos.
Fernando Daquilema descendiente de los Duchicelas, encabeza y
es escogido como su jefe del levantamiento en Cacha
desconociendo el gobierno de blancos y aspirando formar un nuevo
gobierno.
Luego de varios enfrentamientos, el Gobernador envió más de 150
soldados armados para perseguir a los cabecillas. Algunos
solicitaron indulto y les fue concedido por el gobernador.
El Consejo de Guerra asesino en la plaza, sin ningún juicio a
Manuela León y Julián Manzano e impuso la pena de muerte para
Daquilema el 6 de Abril y el 8 de Abril fue trasladado a la plaza de
Yaruquies donde es fusilado a las 11.00am.
2. En nuestro país, el estado colonial, primero, y luego el estado
nacional se han empeñado, de manera implícita o explícita, en negar
las características heredadas del pasado incásico, imprescindibles
para la supervivencia de la identidad quichua. Sin embargo, la
incipiente nación ecuatoriana, surgida de la jurisdicción colonial a
raíz de la Independencia, no ha tenido el tiempo histórico
suficiente para borrarlas del todo.
Desde luego, el pueblo quichua de acuerdo a las circunstancias
históricas ha ido cambiando. Las comunidades, que se cuentan por
miles, existen con su propia organización en pequeños territorios.
Los comuneros, a pesar de haber entrado en el proceso capitalista,
conocen el valor ético que tienen sus prácticas comunitarias. La
lengua, instrumento oficial de la expansión incásica e
intermediaria entre las otras lenguas indígenas, irónicamente
sirvió para el adoctrinamiento católico. En la actualidad, el quichua
es una lengua viva capaz de cumplir todas las funciones
comunicativas y culturales, a pesar de los desplazamientos y
préstamos que ha recibido. La cultura simbólica de los quichuas es
de gran valor estético y se expresa en fiestas, rituales, personajes
míticos, imágenes de los astros y en la relación de la gente con la
naturaleza, lo que permite afirmar que se trata de una ecología
popular que responde a los requerimientos globales propios del
mundo moderno.
Más allá de la pertenencia a una organización determinada y de las
creencias religiosas, va tomando cuerpo entre los quichuas una
conciencia histórica bastante clara y que se va generando una real
capacidad para el análisis crítico del presente.
El Estado ecuatoriano no es un Estado plurinacional. Lo que ocurre
es que, interesadamente, se utilizan ciertos rasgos nacionales
quichuas para salvar determinadas coyunturas políticas. Por
ejemplo, al declarar en la Constitución que hay que vivir como lo
manda la Pacha Mama y el Sumak Kausay, aunque se postergue la
3. expedición de los fundamentos jurídicos que harían posible la
vigencia de estos principios. Para no insistir en que se confunde
ciudadanía con nacionalidad.