El Alzheimer es la demencia más común en ancianos, afectando la memoria, pensamiento y lenguaje. Sus síntomas incluyen problemas de aprendizaje, recuerdo y expresión, así como cambios de humor. Debido a la degradación de los ancianos, sus cuidadores necesitan estrategias para evitar el estrés como reconocer pensamientos negativos y enfocarse en lo positivo.