Después de décadas de lucha contra la contaminación y extracción petrolera en el Yasuní, y de un año desde su formación, Yasunidos se declara como un colectivo ecologista, anticapitalista y antiextractivista comprometido con la defensa de los derechos humanos y la naturaleza. Critican el modelo de democracia delegativa y piden reinventar la democracia para que sea más diversa e incluya a todos los grupos de la sociedad ecuatoriana. Finalmente, invitan a la población a participar activamente en