La distribución aumenta la utilidad de los bienes al proporcionarles utilidad de lugar, tiempo y posesión para los consumidores. Existen diferentes canales de distribución según el número y propiedad de los intermediarios, como canales largos con mayoristas y minoristas independientes, canales cortos con solo minoristas, o canales directos desde el fabricante al consumidor. Las estrategias de distribución incluyen distribución exclusiva, intensiva o selectiva dependiendo del tipo de producto.