La primera vuelta electoral en la región del ariar1
El agua , la descentralización y otras hierbas
1. El agua, la descentralización
y otras hierbas
Página 1 de 4
El agua, la descentralización
y otras hierbas
Emilio Garcia Gutiérrez Villavicencio, abril de 2014
Lectura complementaria, Especialización Gerencia social, ESAP
2. El agua, la descentralización
y otras hierbas
Página 2 de 4
1. El agua y la tercera guerra mundial
El agua constituye un recurso vital para la continuidad de la vida de todos los
seres existentes. No obstante, en los últimos años se ha hecho evidente una lucha
constante de las élites mayoritarias en poder por controlar y apoderarse de los
recursos naturales. De continuar con ese desmedido abuso es necesario
emprender esfuerzos por lograr su conservación. Es de destacar la posición del
Banco Mundial quien plantea que se debe regionalizar la política que regula el
uso del agua y la energía para lograr mayor eficiencia y, por lo tanto, un menor
consumo en las zonas donde hay escasez de recursos hídricos.
En el campo de la política económica, en Colombia existen notables incoherencias
entre las políticas sectoriales y las demandas de proteger el patrimonio natural
de la Nación. Los departamentos y municipios quedan aislados de políticas
directas para corregir tales incongruencias (Mantilla Celi, Javier, febrero 13 de
2014). Esto evidencia la ineficiencia de estas políticas y más aún la falta de
compromiso de los gobernantes por la administración eficaz de los recursos que a
su poder están.
Es desastroso el caso del Casanare y del Valle del Cauca en donde, la ganadería
en manos de los latifundistas, la siembra y otras labores en la palma aceitera y la
quema de la caña han sido determinantes de la muerte de especies anfibias,
fauna y flora tropical, más aún resulta más deplorable que los organismos
encargados de planificar y llevar control de estos recursos no emprendan
esfuerzos por generar estrategias en pro de la recuperación de especies que se
encuentran en peligro de extinción a causa del detrimento y la voracidad del
hombre.
En este sentido; mientras se mantenga la política pública en manos de gobiernos
subordinados al imperio, los recursos naturales seguirán haciendo parte de
activos electorales. La guerra por el agua no es una guerra de pobres
contra pobres, sino la guerra de empresas con capitales contra la misma
naturaleza.
Es desoladora la situación que enfrenta la biodiversidad en el mundo; el
capitalismo es en parte uno de los principales actores dañinos en este proceso
puesto que, el ansia desmedida por la acumulación de capital es la que ha llevado
a que los intereses privados subyacen por encima de los públicos y da lugar a la
corrupción.
3. El agua, la descentralización
y otras hierbas
Página 3 de 4
Como es conocido, el agua potable es un bien escaso, no solo en Colombia sino en
el mundo, y hay quienes aseguran que la tercera guerra mundial será por el
preciado líquido (Eugenio Vera, 2009). Resulta inquietante que mientras se
desperdician miles de litros en los cultivos de plantación en el departamento del
Meta (palma aceitera y caña para etanol), la mayoría de municipios del
departamento no cuenten con el servicio de agua potable (que además es un
derecho).
Según el Censo de Población realizado por el DANE durante el 2005, la tasa de
cobertura de acueducto en Colombia es 83.2%, lo cual refleja un avance con
respecto a años anteriores (Garcia, P. Laura, 2014). No obstante, prevalece un
contraste significativo entre las áreas urbanas y rurales, para la cuales la
cobertura de acueducto es de 94.3% y de 47.1% respectivamente. (UNICEF,
Colombia).
Se observa como está rezagado el sector rural respecto al urbano y la labor
urgente que deben realizar los mandatarios de estas poblaciones, pues la falta de
agua potable trae consigo problemas de salubridad y en un panorama no muy
lejano no se observa una mejoría en la calidad de vida de sus habitantes.
2. La descentralización y el agua
En todo el país, con la ola invernal del año 2010 se hizo patente la incapacidad de
las corporaciones regionales autónomas para realizar la tarea de cuidar el medio
ambiente y mantener su equilibrio. Tal y como se menciona, Raúl Gómez en
febrero de este año, las corporaciones regionales se han convertido en el botín
desde donde los gamonales políticos manejan sus finanzas. No es solo la CVC;
sino también CDMB en Santander, y muchas más corporaciones ambientales,
cuya incapacidad para el manejo ambiental tiene al borde de la muerte a los ríos
del país. Estas corporaciones se convirtieron en parte del patrimonio de familias y
partidos políticos, y lo peor del caso es que en Bogotá se sabe eso y se utiliza a las
mismas para transar favores políticos.
Ahora, el aspecto relevante es si se continúa con la descentralización de esas
actividades de regulación y control del medio ambiente. En sus primeros años la
experiencia mostró un buen manejo de estas organizaciones autónomas, sin
embargo, en los últimos años estas se han desviado de su objetivo principal; la
descentralización, que otrora fue positiva, hoy las convierte en presa más fácil
4. El agua, la descentralización
y otras hierbas
Página 4 de 4
para los poderes locales, mafias políticas. Esa es una cuestión importante de
indagar: ¿hasta dónde es positiva ese tipo de descentralización?
A partir de esa toma del poder local, difícilmente un alcalde o un concejal de una
ciudad podrá regular a empresarios (ya sean honestos o mafiosos) . Sin duda la
descentralización es un tema de debate central en la organización política del
país, resulta difícil negar que modificaciones de un articulito como el que permite
la reelección presidencial tiene allí un papel importante, pues ello cambió la
forma en que se relacionan Bogotá y las regiones, cuestión que hasta ahora el
país no parece haber percibido y que constituyen un desafío adicional.
En este contexto de los recursos naturales y de la conservación del medio
ambiente debe estar presente dentro de las políticas de gobierno de cada región
del país, y más que estar presente darse a cabo las gestiones para cumplir con
estas y brindar mejores resultados, evitando la desviación de los recursos
destinados para estas. Destacando en primera medida que los recursos naturales
son lo esencial para la integridad y el bienestar de la comunidad (Tarazona,
Juliana. 2014).
Por ultimo llego a la conclusión que debemos tomar una decisión entre la
producción sin control de cultivos agroindustriales y de ganadería extensiva o
protección de las fuentes hídricas.