Que importante es conocer a la luz de la Palabra que somos capaces de abrir el cielo o las puertas del infierno, cuando usamos bien o mal nuestra lengua, que es un órgano pequeño pero que tiene poder sobre el rumbo de nuestros destinos.
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
EL PODER DE LA LENGUA
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7. Entre las cosas que aborrece el Señor y que hace partícipe a la lengua,
están: La lengua mentirosa, un testigo falso que dice mentiras, y el que
siembra discordia entre hermanos.
La lengua es un sentido que se mantendrá activa aún después de
muerto.
La lengua necesita ser frenada como la boca de los caballos así como
el timón de una nave.
La lengua siendo un miembro pequeño se jacta de grandes cosas.
La lengua no puede ser domada por el hombre.
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11. La lengua es un fuego,
La lengua desata un mundo de iniquidad o maldad.
La lengua contamina todo el cuerpo,
La lengua es encendida por el infierno
La lengua inflama el curso de nuestra vida.
Muerte y vida están en poder de la lengua, y los que
la aman comerán su fruto.
17. REFLEXIONANDO
De la misma boca procede la bendición y maldición,
esto no debe ser así.
Desechemos todo lenguaje soez.
En la misma boca donde se aloja la lengua es
considerada como fuente de agua.
¿Qué tipo de agua brota de su boca?
¿Qué está hablando su lengua?
¿Mi lengua estará hablando de la justicia de Dios y de
su alabanza todo el día?
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23. Guardaré mis caminos, para no pecar con mi lengua;
Guardaré mi boca como con mordaza, mientras el impío
esté en mi presencia.
Dice el Señor que ante Él se doblará toda rodilla, y toda
lengua alabara a Dios.
No usarás tu boca para jurar falsamente, ni por el cielo, ni
por la tierra, ni por Jerusalén, ni por tu cabeza porque esto
hace caer en juicio.
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27. Trate de no tropezar en lo que dice o habla, esto
hará de usted un hombre (varón o mujer) perfecto
(a).
28. Debemos tener cuidado que la muerte y la vida están en poder de la lengua, y los
que la aman comerán su fruto.
El Señor aborrece la lengua mentirosa, a un testigo falso que dice mentiras, y al
que siembra discordia entre hermanos.
Debemos tener cuidado de tener control de nuestra lengua ya que por ella se
abren puertas del infierno.
No tropiece en lo que dice o habla, eso hará de usted un hombre (varón o mujer)
perfecto (a), capaz de refrenar todo su cuerpo.
Que vuestro hablar sea: “Sí, sí” o “No, no”.
“Evite las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”.
Recuerde sea Nuestro Señor Jesucristo el Rey de su vida y sea el Espíritu Santo
teniendo el control de todo su ser, no sólo de su lengua, esto puede pedirlo al
Padre.