Este ensayo trata sobre la supervisión escolar y su importancia para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje mediante el seguimiento y orientación del trabajo de los maestros. A veces la supervisión se percibe como una fiscalización hacia los maestros, pero debería ser un proceso democrático y flexible que respete a todos los participantes. Los supervisores y las escuelas deben desarrollar las capacidades necesarias para adaptarse a los cambios y enseñar las competencias requeridas por los estudiantes y la sociedad.