Este documento describe el rol del profesional de la información en la sociedad del conocimiento. Explica que con el desarrollo de las tecnologías y las redes sociales, la información ya no está controlada por fuentes oficiales, sino que los usuarios ahora generan y comparten conocimiento. El profesional de la información debe interactuar con estos nuevos creadores de conocimiento y considerar sus aportes como fuentes válidas. También debe diseñar estrategias para administrar e incluir esta información generada por los usuarios.
Posibilitar una mirada reflexiva en relación al papel preponderante de las nuevas interacciones sociales y su vinculación con los procesos de gestión del conocimiento.
Innovación abierta en la Sociedad del Conocimiento. Redes Transnacionales y c...Graciela Mariani
El concepto de “innovación abierta”, expresión acuñada por el Profesor Henry Chesbrough, se originó en el sector empresario. Consiste en una nueva estrategia de innovación por medio de la cual las empresas se aventuran van más allá de los límites internos de su organización; la cooperación con profesionales externos pasa a tener un papel fundamental. Mientras que tradicionalmente las compañías han gestionado la innovación de forma cerrada, con el modelo Open Innovation o Innovación Abierta, los proyectos pueden generarse tanto dentro como fuera de la empresa, pueden incorporarse tanto al inicio del proceso de innovación como en fases intermedias, y pueden alcanzar el mercado a través de la misma compañía o a través de otras empresas. El empresario aplica diferentes estrategias de colaboración con los agentes, tanto internos (empleados, directivos, socios) como externos (clientes, proveedores, stakeholders) con el fin de incrementar la innovación.
Este tipo de innovación responde a la posibilidad de ocurrencia de lo que se conoce como inteligencia colectiva. En este contexto, universidades y centros de investigación ofrecen nuevas perspectivas y soluciones a las compañías que utilizan este modelo.
En este libro, el concepto de innovación abierta desborda las fronteras empresarias y se amplía al ámbito de las universidades, las organizaciones no gubernamentales, los gobiernos a nivel nacional, regional y local. Los diversos capítulos tratan de la innovación en tanto que práctica social en los entornos urbanos.
El propósito de este libro es el de examinar, usando una variedad de enfoques multidisciplinarios, la interacción mutua entre las tecnologías de información y comunicación, TIC y los usuarios. Los autores han
reflexionado sobre la hipótesis de que cualquier intento de comprensión de las motivaciones y prácticas de los usuarios / ciudadanos debe considerar la multiplicidad de roles que juegan, y que la división convencional entre usuarios y productores es en gran medida formal y artificial. Los capítulos publicados en el libro consideran las maneras en que los usuarios consumen, modifican, domestican, diseñan, reconfiguran y con frecuencia presentan resistencias al desarrollo tecnológico, al igual en que los modos en que los mismos usuarios y sus prácticas son transformados por el uso de las TIC.
El libro puede descargarse también gratuitamente de: https://www.researchgate.net/publication/266210259_INNOVACIN_ABIERTA_EN_LA_SOCIEDAD_DEL_CONOCIMIENTO._REDES_TRANSNACIONALES_Y_COMUNIDADES_LOCALES
Posibilitar una mirada reflexiva en relación al papel preponderante de las nuevas interacciones sociales y su vinculación con los procesos de gestión del conocimiento.
Innovación abierta en la Sociedad del Conocimiento. Redes Transnacionales y c...Graciela Mariani
El concepto de “innovación abierta”, expresión acuñada por el Profesor Henry Chesbrough, se originó en el sector empresario. Consiste en una nueva estrategia de innovación por medio de la cual las empresas se aventuran van más allá de los límites internos de su organización; la cooperación con profesionales externos pasa a tener un papel fundamental. Mientras que tradicionalmente las compañías han gestionado la innovación de forma cerrada, con el modelo Open Innovation o Innovación Abierta, los proyectos pueden generarse tanto dentro como fuera de la empresa, pueden incorporarse tanto al inicio del proceso de innovación como en fases intermedias, y pueden alcanzar el mercado a través de la misma compañía o a través de otras empresas. El empresario aplica diferentes estrategias de colaboración con los agentes, tanto internos (empleados, directivos, socios) como externos (clientes, proveedores, stakeholders) con el fin de incrementar la innovación.
Este tipo de innovación responde a la posibilidad de ocurrencia de lo que se conoce como inteligencia colectiva. En este contexto, universidades y centros de investigación ofrecen nuevas perspectivas y soluciones a las compañías que utilizan este modelo.
En este libro, el concepto de innovación abierta desborda las fronteras empresarias y se amplía al ámbito de las universidades, las organizaciones no gubernamentales, los gobiernos a nivel nacional, regional y local. Los diversos capítulos tratan de la innovación en tanto que práctica social en los entornos urbanos.
El propósito de este libro es el de examinar, usando una variedad de enfoques multidisciplinarios, la interacción mutua entre las tecnologías de información y comunicación, TIC y los usuarios. Los autores han
reflexionado sobre la hipótesis de que cualquier intento de comprensión de las motivaciones y prácticas de los usuarios / ciudadanos debe considerar la multiplicidad de roles que juegan, y que la división convencional entre usuarios y productores es en gran medida formal y artificial. Los capítulos publicados en el libro consideran las maneras en que los usuarios consumen, modifican, domestican, diseñan, reconfiguran y con frecuencia presentan resistencias al desarrollo tecnológico, al igual en que los modos en que los mismos usuarios y sus prácticas son transformados por el uso de las TIC.
El libro puede descargarse también gratuitamente de: https://www.researchgate.net/publication/266210259_INNOVACIN_ABIERTA_EN_LA_SOCIEDAD_DEL_CONOCIMIENTO._REDES_TRANSNACIONALES_Y_COMUNIDADES_LOCALES
Para hacer estrategias de PR no basta con utilizar las redes sociales, sino es necesario comprender los nuevos procesos que nos brinda la sociedad en red de la comunicación.
Para hacer estrategias de PR no basta con utilizar las redes sociales, sino es necesario comprender los nuevos procesos que nos brinda la sociedad en red de la comunicación.
Protocolos criptográficos para uso futuro (y actual) [GuadalajaraCON 2013]Websec México, S.C.
http://www.guadalajaracon.org/conferencias/protocolos-criptograficos-para-uso-futuro-y-actual/
Esta charla está orientada a programadores que busquen confidencialidad pero no sólo cifrando datos, hay veces que se requieren protocolos más complejos como en bancos u otras entidades que manejen información para grandes cantidades de personas, se pretende motivar al uso de la criptografía para CUALQUIER problema que requiera confidencialidad y no sólo el cifrado de datos.
Generalmente la criptografía se usa para cifrar información o firmarla, pero existen más aplicaciones que podrían ser útiles, por ejemplo ¿cómo compartir secretos entre N personas y que sólo si se juntan M
¿cómo comunico un password a mi compañero si hay N cantidad de espías, computadoras, etcétera analizando mi transmisión plana? y un vistazo al futuro de la criptografía en caso de que en este siglo nos toque la primera computadora cuántica (Algoritmos que rompen la criptografía actual, y ¿cuáles algoritmos de HOY serán seguros usando hardware con mecánica cuántica?)
Abordaremos los conceptos y problemas matemáticos (muy autocontenido) con demostraciones; que se usan para poder construir este tipo de protocolos como son el cálculo de raíces, logaritmos, factorización permutaciones, transformada de Fourier, teoría de grupos et cétera, esta charla está motivada en mi proyecto para poder estudiar los conceptos usuales de logaritmos y factorización pero no sólo con números reales o complejos, sino bajo otras plataformas algebraicas donde computacionalmente podrían ser más eficientes y más difíciles de poder descifrar.
Sociedad de la informacion y el conocimiento ¿Viable en el contexto mexicano?FIMA97
El presente trabajo es un ensayo colaborativo, en el se habla acerca de si México podría llegar a ser una Sociedad de la información y el conocimiento. De igual forma se ven algunos conceptos para después contextualizarlos.
Sociedad de la información y el conocimiento ¿Viables en el contexto mexicano?MGF11
En el presente ensayo se aborda el tema de la sociedad de la información y del conocimiento, así como algunos de los temas que lo rodean, como cibercultura, inteligencia colectiva, brecha digital, con el fin de explicar si la sociedad mexicana puede llegar a ser una SIC.
sociedad del conocimiento e información.FerRojasHe
Un ensayo colaborativo realizado por estudiantes de la carrera en Pedagogía de la UNAM FES Acatlán que habla acerca de la importancia y diferencias entre la sociedad del conocimiento y la información.
Sociedad del conocimiento e información.FerRojasHe
Se trata de un pequeño ensayo colaborativo entre compañeros de la carrera en pedagogía de la UNAM FES Acatlán de quinto semestre donde abordamos la sociedad del conocimiento y la información.
SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO PERSPECTIVA PEDAGÓGICAOscarFernndez55
El conocimiento ha ocupado siempre un lugar central en el desarrollo económico y en el bienestar social. Los orígenes de esta noción hay que buscarlos en los análisis de las transformaciones que estaban sufriendo las sociedades industriales a principios de los años 60. En este contexto, el sociólogo Peter F. Drucker (1959) pronosticó la emergencia de una nueva capa social de trabajadores y trabajadoras del conocimiento y la tendencia hacia una sociedad centrada en la producción y gestión del saber.
1. Universidad Alberto Hurtado
Carrera: Gestión de información en bibliotecología y archivística
Asignatura: Comunicación interactiva
El rol profesional de la información en la sociedad
del Conocimiento
Alejandro Castro González
2. El rol profesional de la información en la sociedad
del Conocimiento
La información es producto de un proceso social generada por la comunicación
entre los seres humanos, los procesos de comunicación se han ido complejizando y
sofisticando con la irrupción de un feroz desarrollo tecnológico que ha experimentado
nuestra sociedad. Por lo tanto, el profesional de la información al trabajar con un
producto social está determinado por este contexto, lo que lo convierte en un
profesional del área social y su contribución se debe reflejar directamente en el
desarrollo de la comunidad.
El proceso de la información se da hoy en un contexto de desarrollo tecnológico
sin precedentes en donde pasamos de la era de la información a la era del conocimiento,
es decir, del acceso a mayor cantidad de información, más directa, más libre y más
diversa, características que dependen del grado de acceso a la educación de las distintas
sociedades. Posteriormente, surge la sociedad del conocimiento, donde el saber es un
producto, un agente comercial, un bien productivo, se genera conocimiento por parte de
las personas, sean estos como usuarios o como personas ligadas a un tema o institución
determinada, que producen conocimiento como parte de su labor.
Con esto se amplían los canales desde donde se genera conocimiento, desde esta
perspectiva, emerge un nuevo profesional de la información con nuevas y mayores
responsabilidades, “los canales de comunicación e información, se establecen sobre
plataformas renovadas que intentan eliminar distancias y espacios entre el hombre y los
recursos de información” (González Pérez …[et.al], 2006) y con un perfil profesional
que también se proyecta en un campo ocupacional más vasto, “más allá de los servicios
y productos tradicionales generados por los centros de información, se busca satisfacer
cualquier necesidad de los usuarios de la información, se rompe los límites, se objetiva
la necesidad de información” (González Pérez …[et.al], 2006). Este fenómeno se
comprende a partir del surgimiento de las nuevas tecnologías, como la web como
plataforma, por ejemplo.
El modelo globalizado en red, en el que se desarrolla y transforma nuestra
sociedad, cuya virtud aparente es el funcionamiento a partir de la diversidad, corre el
peligro de transformarse en un espacio homogeneizado por los grandes grupos de poder,
que efectivamente siguen controlando la economía internacional y los grandes
consorcios que manejan la información. El profesional de la información debe
inclinarse por una verdadera diversidad ideológica y de información, abriéndose al
nuevo entorno de cooperación y variedad de fuentes de información, más allá de velar
por el cumplimiento de normas, que en ocasiones, restringen el conocimiento. “El
profesional de la información debe construir espacios de intercambio y debate de
información en las organizaciones y comunidades, ser facilitador del cambio, formador
de opinión, promotor de la información y del conocimiento, gestor educativo” (Núñez-
Paulal, 2007).
El desarrollo del debate, educación y formación de comunidad, son los
elementos fundamentales para el actuar del profesional de la información, en su
búsqueda por contrarrestar los impulsos uniformadores del discurso y las ideas del
modelo globalizante, surgen así nuevas definiciones para la democracia, la participación
y la divergencia, debate en el cual dicho profesional debe formar parte activa,
respondiendo a la vocación que le impone el ejercicio de su profesión. Su rol está
3. determinado por “por las necesidades que se generan en la dinámica social; por ello, su
ejercicio debe fomentar la opinión pública y el juicio crítico” (Núñez-Paulal, 2007).
El intercambio y cooperativismo, que parecen ser los pilares esenciales del
discurso de la producción de conocimiento en red, deben ser propendidas por este
profesional, no basta su actualización constante en términos tecnológicos, sino más bien
en la ideología de un uso o estrategia para diseñar herramientas tecnológicas que
produzcan cambios y estén a favor de la consolidación de la participación y la crítica.
En este sentido la propuesta tecnológica debe ser coherente con discurso o postura
democratizante, por ejemplo, la elección entre un software libre o uno comercial para
gestionar la información, no solo debe verse según conveniencias económicas, sino
también al significado ideológico de esta elección, la posibilidad de usar un código
abierto, es una postura frente al uso de un código hermético y que apunte hacia la
dependencia de proveedores comerciales. Las nuevas tecnologías pueden ser usadas con
el fin de estandariza el pensamiento y los procedimientos para acceder al conocimiento,
como también para crear propuestas y contenidos divergentes que sigan un camino de
contribución a la transformación constante que beneficie a las personas.
Como primer aspecto acerca del rol de la información y como marco o escenario
en el que el profesional de la información debe moverse, daremos un vistazo al papel
que le corresponde para construir una cultura diversidad en la red global.
A la par de una propaganda y un discurso que tiende a mostrar una globalización
que reúne formas diversas, enlazadas en red, se puede notar una tendencia subrepticia
hacia la hegemonía de las técnicas, a la penetración masiva de comunidades y al
pensamiento que se podría generar en ellas. Tenemos en la red claros indicios sobre este
supuesto, sin temor a caer, en lo que sería para el juicio de lúcidos optimistas, un juego
paranoico peligroso.
Las redes sociales no solo son medios de expansión de conocimiento libre, sino
que también podrían transformarse en un instrumento de homogenización ideológica.
Tenemos a grandes grupos de personas con intereses comunes, que pueden unirse en
proyectos de movilización social, de expresiones contestatarias y comercio alternativo y
ecológico, por ejemplo, sin embargo, también existe una penetración comercial fuerte,
con bombardeo productos y diversas marcas, además de medios de comunicación que
son los mismos que controlan el mercado informativo general, juegos digitales, un
incentivo de consumo de panoramas de entretención liviana. Facebook, por ejemplo, en
sí mismo, es un instrumento de entretención, en el cual se pueden hacer campañas anti
sistema, por ejemplo, no obstante, sus propiedades adictivas se mantienen intactas,
cualquiera sean los contenidos que allí logren plasmarse.
Por otra parte, grandes empresas han diseñado estrategias diversas para extraer
información a través de la minería de datos hurgando en las conversaciones de los
diversos socios, facebook contiene un sin fin de datos privados de millones de
personas, que pueden ser analizadas por servicios de análisis de información privados y
quien dice que no, de servicios de seguridad nacionales.
Otro factor que podría promover cierta uniformidad, es el lenguaje, punto sobre
el que nos extenderemos en los próximos argumentos. Acerca de twitter, por ejemplo,
se impone el uso telegráfico del lenguaje por lo tanto, “El hecho de registrarse los
mensajes o Tweets, a 140 caracteres es parte del éxito, deformando textos, remitiendo
las ideas en resúmenes, que en un mundo que circula cada día más rápido, donde la
industria del entretenimiento socava el placer de una lectura integral (…)” (Perdomo
Aguilera, 2012), se sabe que este medio ha servido de forma importante a la
notificación de sucesos mediante el uso de pocas palabras y que han servido para
informar a la población y a los mismos medios, como una especie de reporteo
4. ciudadano, además de escapadas extravagantes de diversos personeros políticos que
levantan polvo en la opinión pública. Sin embargo, sus contenidos sintéticos, “abrevia
los cuestionamientos y dirige la intencionalidad de los mensajes con efusividad,
efectividad y ligereza, puesto que no hay tiempo para un debate minucioso” (Perdomo
Aguilera, 2012). Las redes sociales son un espacio de debate, eso es una premisa que
todos parecen estar de acuerdo, sin embargo, debe apreciarse con más mesura este
entusiasmo por exaltar la cualidades de tribuna que parecieran tener estas redes, en
especial, las más populares y observar con mirada más pausada la calidad de los
mensaje o comentarios que se añaden a alguna publicación por parte de distintos
usuarios.
Cómo segundo tema nos introduciremos en el rol propiamente tal que ostentaría
el profesional de la información en la sociedad del conocimiento y su relación con las
redes sociales.
El rol del profesional de la información es intrínsecamente social, por lo tanto, la
aparición de las redes sociales expande sus funciones y lo obliga a tomar posturas tal
vez más radicales y a abandonar posiciones más conservadoras que lo caracterizaban
hasta ahora. En la sociedad de la información uno de sus papeles principales era el
acceso a la información y sigue siéndolo en la medida en que no todos los sectores
sociales han llegado a este objetivo, ahora aparece frente a si un nuevo desafío, incluir a
una amplia gama de usuarios que tienen más participación e intervención directa en los
contenidos de la web, a través de las redes sociales, con ello se produce un fenómeno
antes nunca visto, como es el que el profesional de la información ya no controla de
manera privilegiada los contenidos de la red, es decir, ya que el conocimiento ya no está
en manos de las fuentes oficiales exclusivamente, por medio de las cuales la
información estaba acostumbrada a circular, sino que debe contemplarse el saber
generado por usuarios que en su mayoría no necesariamente poseen un conocimiento
especializado, pero cuya dinámica ha posibilitado la creación de entornos cooperativos
que generan de igual manera, un saber usado por muchas personas y que debe ser visto
como fuente válida y analizada debidamente, pues muchas de ellas corresponden a una
retroalimentación con instituciones como las bibliotecas y otros centro de información,
que entran en contacto con los usuarios de las mismas, “el diseño de estrategias de
gestión y comunicación, así como de servicios grupales (...) donde las personas actúan
como fuentes de información no documentales directas (…) donde cada cual se nutre de
la información que han consultado los demás, interactivamente” (Núñez-Paula, 2007).
La generación, por decirlo de algún modo, espontánea de conocimiento
facilitada por el desarrollo de herramientas web 2.0, significan para el profesional de la
información, no solo interactuar con los potenciales creadores de conocimiento para
diversificar los servicios de centros de documentación y bibliotecas, sino que también,
influyen en el análisis de la información, en la catalogación y clasificación de estos
nuevos contenidos. Uno de los principales factores a tener en cuenta, es que los
procedimientos bibliotecológicos se rigen por normas de descripción de la información,
con el fin de que la búsqueda de la misma, sea lo más efectiva posible para sus usuarios,
pero la irrupción de nuevas herramientas de intervención hacen cada día más
independientes a los usuarios, no solo en la búsqueda de información, sino también en
su descripción, por ejemplo, el etiquetado de contenidos. Los usuarios tienen hoy la
posibilidad de crear colecciones digitales propias, a partir de la creación de contenidos
confeccionados por ellos mismos, lo que significa que pueden intercambiar, clasificar y
difundir de manera autónoma la información sin intermediario, rol que le cabía en
forma preponderante y casi exclusiva al profesional de la información.
5. Este fenómeno podría significar un quiebre en el discurso oficial del saber
académico y la hegemonía de las fuentes de este, demás de la premisa, de que el
profesional de la información debe seguir fielmente las llamadas fuentes de mayor
confiabilidad, ya que si un grupo comienza a generar contenidos validados por aquella
misma comunidad, debieran esos contenidos transformarse también en fuentes válidas
de consulta de intercambio, por lo que debieran ser incorporadas en el futuro, al menos
como un acervo de lo que es la sociedad del conocimiento, como parte de un órgano
sustancial del saber humano.
El denominado comportamiento en red, que es la creación social y colectiva de
conocimiento, posee dos aspectos que actúan simultáneamente, uno es la disolución de
lo social por medio de una aparente desarrollo de habilidades sociales, se podría decir,
que las redes sociales son usadas como parte del espíritu hegemónico que hay detrás de
la idea del saber global y el otro aspecto es la ruptura de la uniformidad del espacio por
medio de la participación, derribando estándares rígidos para compartir información.
El análisis del lenguaje a nivel bibliotecológico como herramienta de búsqueda
de contenidos, es sometido a un cambio relevante, como el uso del lenguaje natural, es
decir, el lenguaje no normalizado para reemplazar al lenguaje controlado, sometido a
normas y estructuras fijas, esto marca un giro estructural en la generación de
conocimiento, haciendo posible una diversidad más real de contenidos y una
participación concreta en el plano de la construcción de saberes paralelos a la fuentes
científicas oficiales, acrecentando la aparición de un discurso más crítico. Podría decirse
que aparece en este nuevo escenario, un saber espontáneo y libre no hegemónico.
Como ya hemos dicho, se integran estos nuevos conocimientos desde diversas
fuentes, rompiendo con lo que algunos llaman el modelo lineal de innovación, es decir,
“… unido a otras transformaciones, comienza a limitar seriamente la concepción
existente, según la cual el conocimiento circulaba unidireccionalmente desde la oferta
de universidades, agencias y laboratorios de investigación hacia la demanda del resto de
los sectores” (Pérez Rodríguez y Castañeda Pérez, 2009). Hoy en día los contenidos
elaborados tanto en redes sociales como empresas, por ejemplo, pueden servir para la
creación de nuevos procesos productivos, industriales o artesanales, especialmente estos
últimos, pueden formar un carril paralelo a las ofertas del mercado globalizado.
Estamos en presencia de la creación de “un lenguaje digital universal, el cual
integra globalmente la producción y distribución de palabras, sonidos e imágenes de
disímiles culturas e identidades” (Perdomo Aguilera, 2007), un comportamiento en red
como señalábamos en un principio, ligado a un pensamiento tecnológico que promueve
el contacto humano dentro de un contexto, nos hace preguntarnos, por quien está
regulada la red y con qué fines, sin embargo, esta virtualidad no libre como se desea
etiquetar, pero con corrientes autónomas y emancipadas interactuando dentro de ella,
convive con la concepción comercial que también comienza a expandirse.
La participación de los usuarios en la generación de contenido será cada vez más
amplia, por tanto, el profesional de la información deberá diseñar estrategias cada vez
más amplias para administrar y diseminar esta información, si desea sobrevivir. Por otra
parte sería ingenuo pensar que el profesional de la información formará parte de todos
los ámbitos en donde se genere y gestione información, ya que la misma autonomía de
los integrantes de una organización en la creación de conocimientos y herramientas que
les permitan administrar su información, hará que en muchas áreas se diluya este rol
protagónico, además debemos agregar que paralelamente el profesional de la
información deberá competir con otros profesionales de disciplinas distintas que
desarrollen competencias al interior de sus organizaciones, producto de que el manejo
de las tecnologías ya no es solo propiedad de especialistas, por la propia dinámica de la
6. diseminación conocimiento. Si los mismos bibliotecarios, por ejemplo, hoy en día
pueden desarrollar sistemas y herramientas para gestionar conocimientos, también otros
profesionales pueden hacerlo dentro de sus organizaciones.
Un tema importante es la formación de profesionales, en el sentido de la apertura
que están teniendo estas carreras con la llegada a sus aulas de estudiantes que ya vienen
con otras formaciones, lo que enriquece el quehacer y la visión de estos profesionales,
sin embargo, es nuestro país, aún se continúa poniendo hincapié en la formación
exclusiva de profesionales dentro de la carrera de bibliotecología, lo que no garantiza la
calidad de los mismos, porque se debe tener en cuenta, que un profesional de la
información tendría que poseer una visión amplia del contexto cultural y social, por lo
que mientras mayores sean los recursos materiales e intelectuales que maneje, mayor
sería su posicionamiento en las organizaciones en que se desempeñe.
¿Cuál es la proyección del profesional de la información en este contexto? Por
un lado debe innovarse en la formación del profesional, ampliando sus habilidades y
conocimientos y por otro, no solo debe señalársele como único camino de expansión de
su campo su ocupación en entidades privadas, sino una mayor y mejor presencia en
organismos públicos y educacionales, una de las falencias del profesional de la
información, al menos en nuestro país, es su débil participación en la confección de
políticas a nivel nacional, debe incluirse su presencia en la construcción de una
verdadera sociedad del conocimiento y para ello debe participar tanto en medios
oficiales como su colaboración, con igual fuerza, en sectores alternativos, ya sean
sociales, políticos o educacionales, cabe mencionar en este sentido, que las
organizaciones sociales también necesitan apoyo de especialistas para fortalecer su
participación social a través de formación de centros de documentación o bibliotecas
populares, por ejemplo.
En cuanto al contexto cooperativo que han abierto las redes sociales, el
profesional de la información debe explotar las posibilidades de retroalimentación que
las redes permiten, en cuanto a la valorización de sus instituciones y también en un
aspecto poco desarrollado, como es el de analizar la información que generan los
usuarios con sus juicios, comentarios, expectativas y gustos, toda esta información que
se produce a diario debe ser analizada por algún profesional dentro de una institución,
inclusive como una tarea exclusiva.
Debemos contribuir al espíritu crítico, en la manera en cómo miramos los
cambios que se están produciendo en el terreno comunicacional y como esto afecta
directamente la información que poseen los ciudadanos influyendo en su formación
educacional y cultural, ya que no solo tiene a su disposición contenidos diversos, sino
que también estos están dirigidos con una ideología definida, por lo tanto debe
manejarse un criterio amplio tanto en el análisis de la información como en la
recomendación de fuentes alternativas que tengan diferentes enfoques, no solo
académico o con validación científica, ya que estas si bien responden a un modelo de
investigación validado por pares, también responden, muchas veces a una visión
convencional de concebir la realidad, de esta forma, la especulación y el análisis libre
también son válidos y si bien tal vez no creen un saber concluyente, si otorgan datos,
dudas y nuevos enfoques sobre un tema.
7. Bibliografía
González Pérez, Y., Rosell León, Y., Piedra Salomón, Y., Leal Labrada, O., &
Marín Milanés, F. (2006). Los valores del profesional de la información ante el reto de
la introducción de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
(Spanish). Acimed, 14(5), 1.
Núñez-Paula, I. A. (2007). Gestión humanaa o de personas en la construcción de
las sociedades del conocimientob,c. (Spanish). Acimed, 16(3), 1.
Redes sociales: Hegemonía y contrahegemonía entre los EE.UU. y
Latinoamérica Alejandro L. Perdomo Aguilera, ALAI, América Latina en Movimiento
(2012).
Rodríguez, Y., & Pérez, M. (2009). Redes de conocimiento. (Spanish). Ciencias
De La Información, 40(1), 3-20.