El documento resume cuatro escuelas de pensamiento en administración: la escuela clásica, que considera a la administración como una ciencia basada en la estructura y la organización; la escuela de las relaciones humanas, que se enfoca en la gestión efectiva de los recursos humanos; la escuela neoclásica, que continúa el trabajo de los clásicos como Taylor; y la teoría de sistemas, que busca propiedades comunes entre sistemas en diferentes niveles de realidad.