El documento describe las tres principales estructuras de los sistemas operativos: la estructura monolítica, la estructura jerárquica y la máquina virtual. La estructura monolítica consiste en un solo programa con rutinas entrelazadas, mientras que la estructura jerárquica divide el sistema operativo en pequeñas partes organizadas en niveles. La máquina virtual presenta interfaces idénticas a la máquina real para cada proceso y separa la multiprogramación de la máquina extendida.