Los instrumentos de cuerda frotada producen sonido a través de la vibración de cuerdas tensadas entre dos puntos del instrumento al ser frotadas con un arco. Algunos de los más destacados son el violín, inventado por Antonio Stradivari en el siglo XVII en Cremona, Italia, y la viola pomposa inventada por Johann Sebastian Bach en 1720. Estos instrumentos están hechos de madera con cuerdas que históricamente han sido de crines de caballo pero hoy son de materiales como nailon.