3. El sistema educativo finlandés es un sistema igualitario: la escolaridad es
obligatoria de los 7 a los 16 años (los alumnos acuden a la escuela local). Es
gratuita a tiempo completo para los estudiantes y esta gratuidad incluye la
asistencia sanitaria y el comedor (con una comida diaria que debe cubrir alrededor
de un tercio de las necesidades nutricionales diarias del alumno) para las escuelas
primaria y secundaria. Durante toda la escuela elemental (peruskoulu) de 7 a 16
años, todos los libros y materiales escolares son gratuitos y dados por el mismo
centro. Los alumnos que viven lejos de la escuela - a más de 5km - pueden pedir el
reembolso del coste del transporte. Los alumnos que tienen dificultades de
aprendizaje pudiendo también beneficiarse, en el mismo centro, de la ayuda de un
profesor especialista (eritysopettaja), que puede ir a clase para guiarlo o bien
trabajar con él de manera separada.1
4. Tras abandonar la guardería, los estudiantes finlandeses con edades comprendidas
entre los 5-6 y los 15-16 cursan sus 9 años de estudios obligatorios (peruskoulu en
finés, grundskola en sueco).
Las clases son relativamente pequeñas, y rara vez tienen más de veinte estudiantes.2
En la escuela el ambiente es relajado e informal, y los edificios están limpios hasta el
punto que los alumnos de los primeros cursos caminan en calcetines dentro de las
clases dejando sus zapatos fuera de ellas. Las actividades fuera de las clases son
consideradas especialmente importantes, incluso en el frío invierno, y la cantidad de
deberes que se mandan para casa se reduce al mínimo para potenciar la asistencia a
actividades extraescolares.3 Finlandia es tras Islandia el segundo país con mayor
número de libros editados per cápita,4 y este interés por la lectura se intenta trasladar
a los niños desde una edad muy temprana. De hecho, todos los programas extranjeros
en la televisión son subtitulados y no doblados, de forma que los niños leen incluso
viendo la televisión.5
5. La escuela superior secundaria, no obligatoria, comienza a los 16 o 17 años, y dura
entre tres y cuatro años. Los estudiantes pueden elegir entre una formación
profesional y/o prepararse para futuros estudios en una escuela politécnica o
universidad, ya que para poder acceder a ellos deberán llevar a cabo un examen de
selectividad por cada una de las facultades a las que deseen ingresar.
6. Cabe destacar que para poder ser profesor de primaria o secundaria es necesario
tener un título superior de máster en magisterio. Además, la labor del profesor es
muy respetada y hay un alto nivel de competición entre los candidatos que desean
acceder a dichos estudios.
Los profesores del sistema público son elegidos directamente por la directiva del
centro educativo. Esto permite que cada centro pueda crear los equipos de trabajo
y buscar a los profesores que mejor encajen en su proyecto educativo real. Los
fondos que recibe cada centro son proporcionales al nivel de calidad que éstos
ofrecen..
7. En los últimos años tras cambios en los planes de estudios, los colegios han
adaptado el estilo de sus infraestructuras por algo más arquitectónico, con el fin
de que los estudiantes se sientan felices, apostando más por escuelas inteligentes
y áreas de confort.