Este documento propone varias ideas para fomentar la medicina familiar en la educación médica pregrado. Sugieren que cada asignatura incluya una rotación en atención primaria de salud con énfasis en promoción y prevención. También recomiendan tener más médicos de familia como profesores, y que los estudiantes tengan experiencias en el nivel primario y comunitario de atención, no solo en hospitales. El objetivo final es que los médicos recién graduados adopten un enfoque integral y preventivo considerando el context

1. Fomento de la Medicina Familiar en pregrado
Dr. Marcelo Müller R.
Con los constantes cambios y mejoras que se han ido implementando en el área de la salud, el
nuevo enfoque de enseñanza en Medicina debería estar dirigido a adquirir conocimientos y
destrezas que permitan al médico desenvolverse sin problemas con pacientes cada vez más
empoderados de su salud, siendo capaces de entregarles las herramientas necesarias para evitar
la enfermedad. Si recordamos que las actividades universitarias clínicas o prácticas abarcan la
mayor parte del aprendizaje y que durante los primeros años, debemos rotar por algunos Centro
de Salud Familiar (CESFAM) realizando exámenes de Medicina Preventiva del Adulto (EMPA) y
luego por algún tiempo en rotaciones como Medicina Interna o Salud Mental, el tiempo destinado
a utilizar este modelo de salud promocional-preventivo es todavía insuficiente, dando prioridad a
actividades preferentemente hospitalarias.
En este contexto, las ideas que surgen para fomentar la Medicina Familiar en pregrado son:
Lo ideal es que en cada asignatura existiera una rotación de Atención Primaria de Salud (APS),
con mayor participación en actividades de promoción y prevención de salud.
Los alumnos interesados deberían tener las facilidades para poder asistir a cursos, congresos o
charlas y poder así incentivar también la investigación.
Tener un mayor número de Médicos de Familia como docentes en cada Facultad de Medicina,
con el fin de acompañar a los alumnos tanto en las pasantías hospitalarias como en los Centros de
Salud, para que estos sean capaces de visualizar por ejemplo cuáles son las Buenas Prácticas de
Salud que se pudiesen implementar en otros centros, que puedan aprender y practicar con algún
grupo de trabajo las educaciones participativas de adultos, además de plasmar y contextualizar la
población a cargo y sus enfermedades a través de un biomapa o un mapa epidemiológico, entre
otros recursos disponibles.
Dentro de los cambios que debemos implementar en la APS, resulta indispensable que el
alumno no sólo se quede con la atención en el box, sino que pueda interaccionar con otros
profesionales de la salud, pueda salir a terreno a realizar visitas domiciliarias, hacer postas rurales,
participar en las reuniones de equipo y pueda organizar distintas actividades de promoción para
tener un mayor contacto con las familias y su entorno.
Dentro de las pasantías hospitalarias es necesario que los futuros profesionales puedan conocer
lo que se realiza en los policlínicos de atención ambulatoria, donde se reciben a los pacientes con
interconsultas derivados desde el nivel primario de atención. Además de poder conocer el trabajo
que se hace con pacientes en el programa de Cuidados Paliativos o alivio del dolor crónico y vivir la
experiencia en terreno de lo que se hace en las hospitalizaciones domiciliarias que tienen
instaurados algunos hospitales.

2. Que los temas como gestión de salud, calidad, determinantes sociales o epidemiología; no se
vean como entes aislados o ajenos a la realidad, sino que se incorporen más a lo clínico, con
ejemplos más concretos y aplicables por los alumnos.
En definitiva, así como durante el desarrollo de la vida humana somos capaces de aprender ciertas
destrezas como caminar, andar en bicicleta o manejar y las hacemos luego en forma automática,
así también debería quedar plasmado en cada profesional que egresa, con estas y otras ideas
implementadas en pregrado, que independientemente del lugar donde veamos al paciente, debe
aflorar ese enfrentamiento más amplio, viendo siempre el contexto, su entorno familiar y social, y
desde esa perspectiva poder plantear las mejoras necesarias con enfoque preventivo y
multidisciplinario en salud.