Las glándulas sexuales, u ovarios en mujeres y testículos en hombres, comienzan a funcionar entre los 10 y 14 años debido a las hormonas de la hipófisis, y pertenecen al grupo de glándulas mixtas que producen hormonas como la progesterona en mujeres durante el ciclo menstrual y la relaxina durante el embarazo, aunque el papel exacto de esta última aún se desconoce.