El documento describe que los conflictos son inevitables y no deben ser considerados negativamente. Explica que existen tres estilos para afrontar conflictos: pasivo, agresivo y asertivo. Además, detalla cinco destrezas para resolver conflictos de manera positiva: escucha activa, asertividad, control de emociones, negociación y ganar-ganar. Por último, enumera cuatro métodos para la resolución de conflictos: negociación, mediación, conciliación y arbitraje.
2. Es una situación natural en nuestra
vida.
Los conflictos son inevitables.
No deben ser considerados como algo
negativo.
Si los afrontamos de manera positiva:
oportunidad de cambio y aprendizaje.
3. PASIVO: evitar hacer lo que piensas,
sientes…
AGRESIVO: decir y hacer lo que
piensas, sientes, quieres…sin
respetar al otro.
ASERTIVO: decir y hacer lo que
piensas, sientes….sin perjudicar el
derecho de los otros.
En este módulo sobre Habilidades Sociales vamos a hablar de la resolución de conflictos. Para ello vamos a definir en primer lugar qué es un conflicto. Es una situación natural en nuestra vida que es inevitable. Cuando estemos ante un conflicto no debemos de verlo como algo negativo si no que, sabiendo gestionarlo y afrontarlo de forma positiva, tendremos ante nosotros una oportunidad de cambio y aprendizaje. Vamos a ver a continuación de qué forma podemos hacerle frente.
A la hora de afrontar los conflictos podemos hacerlo de 3 formas: pasiva, agresiva o asertiva.
Si al intentar resolverlo evitamos hacer o decir lo que sentimos y anteponemos el bienestar de los demás al nuestro, estaríamos actuando de forma pasiva. Un ejemplo sería que si nos traen un plato de comida y vemos un pelo en su interior, lo quitaríamos y seguiríamos comiendo.
Si nos mostramos violentos, prepotentes y dejamos al interlocutor en ridículo, estaremos resolviéndolo de forma agresiva. Esta persona ante la situación anterior llamaría a la persona que le ha servido el plato, le gritaría, intentaría dejarla en evidencia y pediría de malos modos el libro de reclamaciones.
Si lo afrontamos de forma asertiva diríamos lo que pensamos y sentimos de forma tal que no perjudicáramos al otro. En la situación planteada esta persona llamaría a la persona que le ha servido el plato, le expondría el caso y solicitaría un plato nuevo, después continuaría comiendo.
Si en nuestro día a día fuéramos asertivos tendríamos una visión del mundo mucho más abierta. La asertividad es algo que podemos ir aprendiendo y adquiriendo con práctica.
Teniendo en cuenta que un conflicto es todo aquello que provoca un desencuentro entre personas, la resolución de conflictos son el conjunto de técnicas y habilidades que se ponen en práctica para buscar la mejor solución a ese problema. Como hemos dicho al inicio del módulo, los conflictos se encuentran presentes en nuestra vida cotidiana y es aconsejable resolverlos pronto y de la mejor forma posible, es decir, con destrezas adecuadas.
A la hora de resolver un conflicto podemos utilizar estas 5 destrezas que os presento en la diapositiva para la resolución pacífica y no violenta de los conflictos.
Perspectiva de ganar y ganar: es un cambio de actitud. Se trata de cambiar del ataque adversarial y defensivo por la cooperación y colaboración para solucionar el problema.
Escucha activa: escuchar y prestar atención a la otra persona, generando empatía, haciendo sentir a la otra persona comprendida.
Asertividad: expresarnos, como hemos comentado anteriormente, sin levantar las defensas de la otra persona pero diciendo lo que sentimos y pensamos.
Emociones: debemos de expresar las emociones de miedo, frustración, dolor… de forma correcta, con el fin de obtener un cambio.
Negociación: esta sería la última destreza en la que debemos de considerar nuestras necesidades y la del resto, desde una perspectiva en la que todos ganamos. Es decir, respetando y valorando las diferencias, con el fin de resolver el conflicto de la mejor forma posible.
Ya conocemos las destrezas a tener en cuenta a la hora de resolver un conflicto. Ahora vamos a ver los tipos de resolución de conflictos que hay.
Por un lado tenemos la negociación. En este tipo no existe una 3ª persona. El conflicto es resuelto por las partes implicadas.
En la mediación ya aparece una 3ª persona entre las dos partes que se encuentran en conflicto. Esta persona solo induce, no propone soluciones. El conflicto es resuelto por las partes implicadas.
Cuando se hace uso de la conciliación, volvemos a necesitar de una 3ª persona que en este caso sí que propone soluciones, siendo las partes implicadas las que resuelven el conflicto (voluntariamente).
En cuanto al último tipo de resolución de conflictos, que sería el arbirtraje, es necesaria una 3ª persona que emite “laudos arbitrales” y ambas partes los acatan.
Con esta información damos por finalizado el módulo de habilidades sociales referente a la resolución de conflictos.