El documento trata sobre el origen y la historia de la sífilis. Explica que la evidencia ósea sugiere que la sífilis estuvo presente en América del Norte hace 8,000 años, y que se propagó a otras partes del mundo como América del Sur y Europa después del contacto con los europeos. También discute los primeros tratamientos como el arsénico y la penicilina, y los avances en el diagnóstico con pruebas como la prueba de Wassermann.