Los zuecos se originaron en las regiones húmedas de Europa como calzado agrícola hecho de una sola pieza de madera. Aunque su diseño ha variado, tradicionalmente dejan el talón al descubierto pero ahora suelen tener cubiertas de tela o plástico con un ligero tacón. Los zuecos son cómodos y se usan ampliamente en ambientes laborales y médicos donde se pasa mucho tiempo de pie, así como en la vida diaria donde han sufrido múltiples adaptaciones para ser prendas casi diarias.