La música se puede definir como el arte de organizar sonidos y silencios de manera coherente utilizando principios como la melodía, armonía y ritmo. Sirve como una forma de comunicación tanto social como individual y permite conocer al individuo y despertar emociones en los oyentes. La musicoterapia puede ayudar a reducir el dolor, la ansiedad de pacientes con cáncer, mejorar la concentración, reducir el estrés y la depresión, e incentivar el desarrollo del lenguaje y razonamiento en niños.