El impuesto sobre la renta grava las ganancias obtenidas por personas e instituciones en Guatemala. Se aplica a ingresos por venta de bienes, servicios, dividendos, intereses, alquileres, salarios, honorarios profesionales y otras fuentes. Los contribuyentes deben declarar sus ingresos brutos anuales y pueden deducir gastos y costos elegibles para calcular su renta imponible, sobre la cual se aplica una tarifa del 25%.