Este documento presenta lineamientos y hojas de ruta para incorporar el cambio climático en los Planes Estratégicos de Macrocuencas (PEM) y los Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas (POMCA) en Colombia. Inicialmente, define conceptos clave como variabilidad climática, cambio climático, adaptación y mitigación. Luego, describe brevemente los instrumentos de gestión del recurso hídrico y riesgo en el país. Finalmente, propone una serie de parámetros a considerar para
INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMÁTICO EN PLANES ESTRATÉGICOS DE MACROCUENCAS Y PLANES DE ORDENACIÓN Y MANEJO DE CUENCAS HIDROGRÁFICAS
1. Documento 1
CONVENIO 398 DE 2015
JULIO DE 2015
CARTILLA
INCORPORACIÓN DE CAMBIO
CLIMÁTICO EN PLANES
ESTRATÉGICOS DE MACROCUENCA
Y PLANES DE ORDENACIÓN Y
MANEJO DE CUENCAS
HIDROGRÁFICAS
CONVENIO 398 DE 2015
DICIEMBRE DE 2015
2. 2
CONVENIO DE ASOCIACIÓN 398 DE 2015
CARTILLA
INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMÁTICO EN
PLANES ESTRATÉGICOS DE MACROCUENCAS Y
PLANES DE ORDENACIÓN Y MANEJO DE CUENCAS
HIDROGRÁFICAS”
MINISTERIO DE AMBIENTE Y DESARROLLO SOSTENIBLE-MADS
DIRECCIÓN DE CAMBIO CLIMÁTICO-DCC
ASOCIACIÓN DE CORPORACIONES AUTÓNOMAS REGIONALES Y DE DESARROLLO SOSTENIBLE
-ASOCARS
BOGOTÁ D.C., DICIEMBRE DE 2015
3. 3
Contenido
1. INTRODUCCIÓN.....................................................................................................................................6
2. MARCO CONCEPTUAL...........................................................................................................................8
2.1. VARIABILIDAD CLIMATICA.............................................................................................................9
2.1.1. CAMBIO CLIMATICO................................................................................................................10
2.1.2. ADAPTACION AL CAMBIO CLIMATICO ................................................................................12
2.1.3. MITIGACION DEL CAMBIO CLIMATICO ...............................................................................15
2.1.4. ESCENARIOS DE CAMBIO CLIMATICO .................................................................................16
2.2. GESTION DEL CAMBIO CLIMÁTICO .............................................................................................18
2.3. GESTIÓN INTEGRAL DEL RECURSO HÍDRICO...............................................................................20
2.3.1. Política Nacional para la Gestión Integral del Recurso Hídrico - PNGIRH..........................21
2.4. POLÍTICA PARA LA GESTIÓN DE RIESGOS DE DESASTRES ...........................................................26
2.5. INCIDENCIA DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN LA GESTIÓN INTEGRAL DEL RECURSO HÍDRICO Y EN
LA GESTIÓN DEL RIESGO DEL DESASTRES...............................................................................................27
3. LINEAMIENTOS PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMATICO EN PLANES ESTRATEGICOS DE
MACROCUENCAS Y PLANES DE ORDENACION Y MANEJO DE CUENCAS HIDROGRÁFICAS ........................32
3.1. La incorporación de cambio climático en los PEM y POMCA es una estrategia de adaptación y
mitigación basada en la planeación ambiental del territorio.................................................................33
3.2. Los PEM y POMCA deben armonizarse entre sí y con otros instrumentos de planificación
territorial y sectorial, con el ánimo de aprovechar la información de cambio climático en los diferentes
instrumentos e incorporar proyectos que sean coherentes y articulados.............................................34
3.3. La planeación territorial debe trascender la temporalidad de los PEM y los POMCA
entendiendo que a futuro los efectos del cambio climático serán cada vez más severos.....................34
3.4. El cambio climático debe incorporarse en cada fase de la planificación ambiental del recurso
hídrico, manteniendo coherencia entre los estudios, los análisis y los resultados finales. ...................35
3.5. En los procesos participativos de los PEM y POMCA, el conocimiento es la primera medida de
adaptación y mitigación de cambio climático.........................................................................................35
3.6. El reconocimiento de medidas de adaptación y mitigación regionales y locales es el punto de
partida para identificar acciones apropiadas que se pueden implementar en el ordenamiento
ambiental del territorio. .........................................................................................................................36
3.7. La incorporación de cambio climático en los PEM y POMCA debe apoyar el proceso de
definición de medidas que incrementen la resiliencia, promuevan la adaptación de los ecosistemas,
los sectores y las comunidades y potencialicen las oportunidades de la gestión integral del cambio
climático..................................................................................................................................................36
4. 4
3.8. Deben tomarse decisiones en un mundo cambiante para disminuir los riesgos asociados al
cambio climático, teniendo en cuenta los eventos amenazantes exacerbados dado un solapamiento
entre la variabilidad y cambio climático.................................................................................................37
3.9. La investigación y la gestión de información en el territorio debe evaluar los efectos,
evidencias y oportunidades del cambio climático y los resultados de la implementación de las medidas
de adaptación y mitigación.....................................................................................................................38
3.10. Prepararse ante el cambio climático y sus efectos en las cuencas puede generar beneficios
en el presente y en el futuro. Estas acciones deben cuantificarse y reportarse sus beneficios a los
actores en las cuencas. ...........................................................................................................................38
3.11. En la incorporación de cambio climático en PEM y POMCA se utilizará la información
disponible de las Comunicaciones Nacionales y los informes bienales sobre Cambio Climático. .........39
3.12. La incorporación de cambio climático en PEM y POMCA y la implementación de las medidas
de adaptación y mitigación definidas en los programas, puede promover la diversificación de fuentes
y mecanismos de financiación. ...............................................................................................................39
4. HOJA DE RUTA PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMATICO EN PLANES ESTRATEGICOS DE
MACROCUENCAS. .......................................................................................................................................40
4.1. DEFINICION Y FASES DE LOS PEM ...............................................................................................40
4.1.1. Abordaje metodológico para la Formulación Planes Estratégicos Macrocuencas.............41
4.2. HOJA DE RUTA PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMÁTICO EN PLANES ESTRATÉGICOS
DE MACROCUENCAS...............................................................................................................................46
4.2.1. Linea Base ...........................................................................................................................47
4.2.2. Diagnóstico..........................................................................................................................50
4.2.3. Análisis estratégico .............................................................................................................54
4.2.4. Acuerdos y acciones estratégicas .......................................................................................55
5. HOJA DE RUTA PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMATICO EN PLANES ESTRATEGICOS DE
MACROCUENCAS. .......................................................................................................................................57
5.1. DEFINICION Y FASES POMCA ......................................................................................................57
5.1.1. Abordaje metodológico para la Formulación de Planes de Ordenación y Manejo de
Cuencas Hidrográficas-POMCA...........................................................................................................58
5.2. HOJA DE RUTA PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO CLIMÁTICO EN PLANES DE
ORDENACIÓN Y MANEJO DE CUENCAS HIDROGRÁFICAS.......................................................................63
5.2.1. Temporalidad......................................................................................................................63
5.2.2. Incorporación de cambio climático por fases en el POMCA...............................................64
Bibliografía..................................................................................................................................................88
5. 5
AGRADECIMIENTOS
Agradecemos a todos los expertos y público en general que participaron del proceso de construcción de
los lineamientos y hoja de ruta para la incorporación de cambio climático en PEM y POMCA, a través de
sus positivos y enriquecedores comentarios y sugerencias.
6. 6
1. INTRODUCCIÓN
En el marco del convenio 398 de 2015 realizado entre la Dirección de Cambio Climático del Ministerio
de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Asociación de Corporaciones Autónomas Regionales y de
Desarrollo Sostenible – ASOCARS, cuyo objeto es “Aunar esfuerzos técnicos, administrativos y
financieros, para generar lineamientos técnicos y hoja de ruta para incorporar cambio climático en los
Planes Estratégicos en las Áreas Hidrográficas o Macrocuencas PEM y en los Planes de Ordenación y
Manejo de Cuencas Hidrográficas POMCA”, se desarrolla esta primera propuesta metodológica a partir
de una revisión bibliográfica de experiencias nacionales e internacionales y el concepto de expertos en
la temática.
La propuesta incluye los parámetros mínimos necesarios que deben considerarse para analizar el
componente de cambio climático en los instrumentos. Por lo tanto, de acuerdo con la información y el
conocimiento existente en cada región del país, pueden incluirse análisis adicionales a los enunciados.
La propuesta de incorporación de cambio climático en Planes Estratégicos de Macrocuenca PEM y
Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas POMCA se presenta en cuatro documentos
que son complementarios, definidos a continuación:
1. Lineamientos: son pautas o tendencias que orientan las actuaciones y decisiones de los actores
en los procesos de elaboración y ejecución de los PEM y POMCA. En este documento también se
presenta un marco conceptual básico donde se definen los conceptos requeridos para el
desarrollo de este documento.
2. Hoja de Ruta de Planes Estratégicos de Macrocuenca PEM: Secuencia de etapas genéricas para
la inclusión de Cambio Climático en PEM, en armonía con las etapas contempladas en las fases
del instrumento. Para cada etapa se deben indicar objetivos, resultados esperados, pasos e
insumos.
3. Hoja de Ruta Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas POMCA: Secuencia de
etapas genéricas para la inclusión de Cambio Climático en los POMCA en armonía con las
contempladas en las fases de cada instrumento. Para cada etapa se deben indicar objetivos,
resultados esperados, pasos e insumos.
4. Catálogo: Posibles medidas de adaptación y mitigación generales que pueden ser aplicables a los
PEM y POMCA.
En este documento se presenta la cartilla para el público en general, donde se condensan los tres
primeros documentos de lineamientos y hojas de ruta para incorporar cambio climático en PEM y
POMCA. La presente propuesta fortalece la sinergia que existen entre los instrumentos, debido a que
7. 7
establece que los lineamientos definidos en los Planes Estratégicos de Macrocuencas definirán posibles
acciones en los POMCA, donde se desarrollarán dichos lineamientos y se reflejarán en el territorio a
través de los programas y proyectos que se definen en el POMCA. Estos programas y proyectos, así
como la zonificación ambiental definida en el POMCA serán la guía de actuación a nivel municipal.
8. 8
2. MARCO CONCEPTUAL
En este capítulo se presentan los conceptos que sustentan los lineamientos y hojas de ruta para la
incorporación de cambio climático en PEM y POMCA. En la primera parte se presentan los conceptos de
variabilidad climática y cambio climático con el ánimo de aclarar sus diferencias. Adicionalmente se
resaltan los posibles efectos que pueden producir en el territorio de forma conjunta, con el ánimo de
incluir en los instrumentos de planificación ambiental los riesgos asociados a los eventos climáticos
extremos incluyendo el cambio climático así como las posibles variaciones en el largo plazo que puedan
generarse de acuerdo con los cambios en los comportamientos de las variables hidroclimatológicas.
Posteriormente se analizan los conceptos de adaptación y mitigación al cambio climático y cómo los
instrumentos de planificación ambiental del territorio incluyen por definición estrategias para la
adaptación del territorio, a través de la zonificación ambiental donde se identifican áreas de
conservación y preservación de ecosistemas estratégicos así como líneas estratégicas y proyectos para
su conservación, protección y restauración. También hacen parte de la adaptación las medidas definidas
para la prevención de riesgos de desastres, principalmente las relacionadas con las variables
hidroclimatológicas (inundaciones, avenidas torrenciales e incendios forestales).
En el capítulo de adaptación se documenta una breve lista de las aproximaciones que se han
desarrollado para realizar la adaptación al cambio climático tales como adaptación basada en
ecosistemas, comunidades, tecnologías, entre otras, que pueden ser aplicadas en una cuenca de forma
integral como un conjunto de soluciones complementarias y no excluyentes. Los posibles efectos del
cambio climático en términos de riesgos y oportunidades, se han determinado a través de escenarios de
variación de la temperatura y precipitación, que permiten empezar a actuar y definir medidas de
adaptación al cambio climático.
En el capítulo de mitigación se desarrolla este concepto y dado que la ordenación “es la planeación del
uso coordinado del suelo, de las aguas, de la flora y de la fauna” y que "Los planes y programas sobre
protección ambiental y manejo de los recursos naturales renovables deberán estar integrados con los
planes y programas generales de desarrollo económico y social, de modo que se dé a los problemas
correspondientes un enfoque común y se busquen soluciones conjuntas, sujetas a un régimen de
prioridades en la aplicación de políticas de manejo ecológico y de utilización de dos o más recursos en
competencia, o a la competencia entre diversos usos de un mismo recurso” (Decreto 2811 de 1974), es
conveniente y recomendable a través de este instrumento acordar con los sectores medidas de
mitigación al cambio climático, que propendan por el desarrollo sostenible de la cuenca.
Posteriormente se aborda la gestión del cambio climático, gestión integral del recurso hídrico y gestión
del riesgo de desastres en Colombia, así como su posible articulación a través de un análisis de la
9. 9
incidencia del cambio climático en la gestión integral del agua y en la gestión del riesgo, que justifica la
incorporación de cambio climático en PEM y POMCA y determina los posibles lineamientos para abordar
esta incorporación.
El marco conceptual concluye resaltando la oportunidad que significa incorporar cambio climático en
PEM y POMCA, dado que son los instrumentos de planificación ambiental que permiten definir los
lineamientos del desarrollo de la cuenca y la zonificación ambiental, el componente programático y la
gestión del riesgos con un enfoque integral, trans-disciplinar y participativo. La incorporación de cambio
climático permitirá analizar las evidencias actuales de cambio climático en la cuenca y proyectar los
escenarios tendenciales incorporando las proyecciones en las variables hidro - meteorológicas que a su
vez afectarán las diversas variables de los componentes del ambiente (fisicobiótico, socioeconómico y
cultural, político administrativo, funcional y gestión del riesgo). De esta forma podrán tomarse
decisiones de posibles medidas de adaptación y mitigación al cambio climático a desarrollarse en la
cuenca.
2.1. VARIABILIDAD CLIMATICA
La variabilidad climática se define como las fluctuaciones del clima durante periodos tales como meses,
años o decenios, de manera que es natural registrar valores por encima o por debajo de la normal
climatológica o valor normal —promedio de treinta años— (Pabón, 2011).
Dependiendo de la escala temporal de la variabilidad climática se clasifica en (ASOCARS - IDEAM, 2014):
1. Escala intra-estacional (veranillos, intensificación de las lluvias),
2. Escala estacional (estaciones lluviosas, secas),
3. Escala Interanual (teleconexiones y ciclos de más de un año),
4. Escala interdecadal (fluctuaciones climáticas),
La escala intraestacional es la escala relacionada con las oscilaciones dentro de las estaciones y
determina condiciones de tiempo durante decenas de día o uno o dos meses y se destaca por una señal
de tipo ondulatoria tropical, denominada Oscilación Madden- Julian (MJO). La señal afecta la actividad
convectiva y la lluvia en el pacífico tropical oriental y en América tropical.
La escala estacional determina el ciclo anual y se considera la fluctuación del clima a nivel mensual,
correspondiente a la alternancia de temporadas secas y lluviosas. La migración de la Zona de
Confluencia Intertropical – ZCIT, es considerada como una de las más importantes fluctuaciones
climáticas en la escala estacional. En latitudes ecuatoriales las variaciones estacionales están asociadas
con el doble paso del sol por el ecuador a lo largo del año, debido al movimiento de traslación de la
tierra alrededor del sol y la inclinación del eje terrestre que produce las estaciones.
A la escala interanual corresponden las variaciones que se presentan año a año y está posiblemente
relacionada con alteraciones en el balance global de radicación. Los fenómenos que en Colombia
10. 10
generan variabilidad climática a escala interanual son por ejemplo el fenómeno ENSO determinado por
sus dos fases: El Niño (fase cálida) y La Niña (fase fría). Este fenómeno genera importantes efectos
debido a que determina los eventos hidrológicos extremos en términos de sequías e inundaciones y en
la oferta hídrica del país (IDEAM, 2015).
La escala interdecadal se refiere a las fluctuaciones del clima a nivel de décadas. La amplitud de estas
oscilaciones es menor que la amplitud interanual, pero están influyendo notablemente en las
actividades de las sociedades y son de gran importancia para entender tendencias de las variables
climáticas.
Desde diversas latitudes se están adelantando estudios para poder identificar la incidencia real del
cambio climático en la variabilidad climática, teniendo como hipótesis que el cambio climático afecta la
frecuencia e intensidad de los eventos extremos debidos a la variabilidad climática. En el último informe
presentado por la NOAA (NOAA´s National Centers for Environmental Information, 2015), se
presentaron análisis de eventos extremos desde el año 2011 al año 2014 en el mundo buscando una
correlación entre sus variaciones y el cambio climático, siendo el 75% de estos eventos relacionados con
calor y precipitación. Para eventos de calor, la gran mayoría encuentran una señal de cambio climático,
donde el 95% encontraron una influencia humana. Para los eventos de precipitación los resultados son
más mezclados, encontrando un 40% atribuible a influencia humana.
2.1.1. CAMBIO CLIMATICO
El cambio climático es una importante variación estadística en el estado medio del clima o en su
variabilidad, que persiste durante un período prolongado (normalmente décadas o incluso más). El
cambio climático se puede deber a procesos naturales internos o a cambios del forzamiento externo
(modulaciones del ciclo solar o erupciones volcánicas), o bien a cambios persistentes antropogénicos en
la composición de la atmósfera o en el uso de las tierras. Se debe tener en cuenta que la Convención
Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), en su Artículo 1, define ‘cambio
climático’ como: ‘un cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que
altera la composición de la atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima
observada durante períodos de tiempo comparables’. La CMCC distingue entre ‘cambio climático’
atribuido a actividades humanas que alteran la composición atmosférica y ‘variabilidad climática’
atribuida a causas naturales.
El Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático- IPCC define al cambio climático como
“cualquier variación de las condiciones climáticas medias y/o variabilidad de sus propiedades, que se
puede identificar y se mantiene durante un período de tiempo prolongado, generalmente décadas o
más”. La causa principal del cambio climático son las actividades antropogénicas tales como actividades
agropecuarias por el uso de abonos nitrogenados, el cambio del uso del suelo (deforestación,
degradación) y la quema de combustibles fósiles (transporte, energía e industria). De acuerdo con la
CMNUCC, el cambio climático debe enfrentarse desde lo ambiental, social y económico promoviendo el
trabajo coordinado entre los países. “Se declara que el objetivo supremo de la Convención es estabilizar
las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera a un nivel que impida que el clima se
11. 11
perjudique” (Naciones Unidas, 1992) . Ese nivel debería lograrse en un plazo suficiente para permitir que
los ecosistemas se adapten naturalmente al cambio climático, asegurar que la producción de alimentos
no se vea amenazada y permitir que el desarrollo económico prosiga de manera sostenible (DCC-MADS,
2014).
En la medida que avanza la ciencia y las tecnologías, se conocen con mayor certeza las evidencias,
causas y efectos del cambio climático a nivel global a corto, mediano y largo plazo. El IPCC, emitió el más
reciente informe AR5 2013-2014 (IPCC, 2013-2014), recopilando la visión de la situación actual y la
proyectada, inducidas tanto por factores naturales como por los cambios que han generado las
actividades humanas en el planeta, anunciando que se puede alcanzar dos grados más de temperatura
para el año 2100, o valores superiores, si no se emprenden acciones contundentes en la reducción de
emisiones de gases de efecto invernadero de forma inmediata. En la Figura 1 se presentan evidencias
del Cambio Climático en Colombia, de acuerdo con información contenida en la Segunda Comunicación
Nacional sobre Cambio Climático (IDEAM, 2010).
Figura 1. Evidencias del Cambio Climático para Colombia. Elaboración propia a partir de información de la Segunda
Comunicación Nacional sobre cambio climático (IDEAM, 2010)
De acuerdo con el informe del IPCC para gestión de los riesgos de fenómenos meteorológicos extremos
y desastres para mejorar la adaptación al cambio climático, los fenómenos extremos tendrán un
impacto alto en los sistemas de gestión de recursos hídricos y por lo tanto los análisis para su planeación
deben incluir un análisis que involucre escenarios tendenciales incluyendo cambio climático.
“Los fenómenos extremos tendrán un mayor impacto en los sectores más estrechamente vinculados
al clima, como el agua, la agricultura y la seguridad alimentaria, la silvicultura, la salud y el turismo.
Por ejemplo, si bien en la actualidad no es posible prever de forma fiable cambios específicos a
escala de cuenca, hay un nivel de confianza alto en que los cambios en el clima podrían afectar
gravemente a los sistemas de gestión de los recursos hídricos. No obstante, en muchos casos el
Evidencias de cambio climático para Colombia
Tendencia al
aumento de las
precipitaciones de
alta intensidad.
Ascenso del nivel
del mar
Caribe (Cartagena)
aprox. 3,5 mm/año.
Pacífico
(Buenaventura)
aprox. 2,2 mm/año.
Deglaciación
Pérdidas de 3 a
5% de cobertura
glaciar/año y
retroceso del frente
glaciar de 20 a 25
m/ año
En las zonas de
páramo alto se han
presentado fuertes
incrementos en la
temperatura máxima
(día), cercanos a
1ºC por década.
12. 12
cambio climático es solo uno de los motores de futuros cambios, y no necesariamente el más
importante a escala local. También se espera que los fenómenos extremos relacionados con el clima
tengan impactos importantes en las infraestructuras, aunque los análisis detallados de los
potenciales daños y su proyección se limitan a unos pocos países, tipos de infraestructuras y
sectores”. (IPCC, 2012)
Respecto a las pérdidas provocadas por inundaciones el informe prevé que las inundaciones
aumentarán en muchos lugares debido a la ausencia de medidas de protección adicionales. La magnitud
del cambio estimado es altamente variable según el lugar, los escenarios de cambio utilizados y los
métodos utilizados para estimar el caudal en los ríos y la ocurrencia de crecidas. (IPCC, 2012).
Los conceptos mostrados pueden ser profundizados en los siguientes videos:
Conceptos cambio climático. Canal cambio climático MADS
https://www.youtube.com/channel/UCgsEWMGCPS6VDQAH8YvAVSg
Impactos del cambio climático. Adaptación al cambio climático; es tiempo de tomar decisiones. GIZ
https://www.youtube.com/watch?v=Y7fI8farmNg.
IHE. Escenarios Globales de Cambio Climático. Gerald Corzo
https://www.youtube.com/watch?v=onXfEB404_s
UNAL, Variabilidad y Cambio Climático en las Cuencas Hidrográficas de la Región CAR. José Daniel
Pabón: https://www.youtube.com/watch?v=IrMrfTBG3Es
IDEAM. ¿Quieres saber qué es el Fenómeno El Niño y cómo afecta a Colombia?
https://www.facebook.com/ideam.instituto/videos/468686479982467/?pnref=story
Mecanismos de Mitigación Voluntaria de emisión de gases efecto invernadero
http://www.mvccolombia.co/index.php/122-presentaciones-s-i-empresas-y-cambio-climatico.
Planes Territoriales de Adaptación al Cambio Climático, Oportunidades, Barreras y Recomendaciones.
Carolina Urrutia Vásquez. https://www.youtube.com/watch?v=t_xz5nXyUXk
2.1.2. ADAPTACION AL CAMBIO CLIMATICO
El IPCC en su más reciente informe AR5 (IPCC, 2013-2014) define la adaptación al cambio climático como
el proceso de ajuste al clima actual o esperado y a sus efectos. En los sistemas humanos, la adaptación
busca moderar o evitar los daños o aprovechar las oportunidades, mientras que en los sistemas
naturales, la intervención humana puede facilitar el ajuste al clima esperado y sus efectos. Existen
diferentes tipos de adaptación. La adaptación puede ser anticipada o reactiva, privada o pública,
autónoma o planificada. La adaptación autónoma se refiere a la adaptación que no constituye una
respuesta consciente a los estímulos climáticos, sino que es desencadenada por cambios en los sistemas
naturales o humanos. Por otro lado, se conoce como adaptación anticipada a la adaptación que tiene
13. 13
lugar antes de que se observen los efectos del cambio climático. La adaptación planificada es la
adaptación que resulta de una decisión expresa, basada en el reconocimiento de que las condiciones
climáticas han cambiado o están próximas a cambiar y de que es necesario adoptar medidas para
retornar, mantener o alcanzar un estado deseado (IPCC, 2014).
La estrategia de adaptación al Cambio climático en Colombia se ha definido a través de Plan Nacional de
Adaptación al Cambio Climático y las Guías de Adaptación que se han generado desde la Dirección de
Cambio Climático del MADS, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y el IDEAM, bajo la coordinación
del Departamento Nacional de Planeación - DNP. Esta estrategia busca una adaptación planificada a
través del conocimiento regional de los posibles impactos del cambio climático, la vulnerabilidad del
territorio y las amenazas.
En el año 2014 la Dirección de Cambio Climático realizó una consultoría para la incorporación de la
estrategia de adaptación del cambio climático en los instrumentos de gestión y planificación ambiental y
territorial (DCC-MADS, 2014), donde se definen unos lineamientos para realizar esta incorporación y se
responde al cómo lograrlo. Específicamente se presenta una propuesta de incorporación de la estrategia
de adaptación en los POMCA, basada en la incorporación de cambio climático en el análisis de riesgos,
definido en el Anexo B Gestión del Riesgo de la Guía para su formulación (DCC-MADS, 2014).
Las estrategias de adaptación buscan responder por un lado a los impactos prolongados generados por
los cambios en la media de las variables hidro-climatológicas (temperatura, precipitación, nivel del mar)
y a los eventos extremos debidos tanto a variabilidad como cambio climático. En este sentido las
estrategias y medidas de adaptación buscan por un lado la prevención de riesgos y por otro la
adaptación de los ecosistemas y las comunidades. Por lo tanto en este punto no se busca discutir cual es
la razón de la ocurrencia de los cambios de las variables sino iniciar las acciones.
Los POMCA en la actualidad incluyen medidas de adaptación, pues en ellos se identifican áreas para
conservación y protección tales como las áreas de especial importancia ecológica como las Áreas
Nacionales Protegidas del SINAP, ecosistemas y zonas que la legislación ambiental ha priorizado para su
protección como páramos, nacimientos de agua, humedales, zonas de recarga de acuíferos, zonas
costeras, manglares, estuarios, meandros, ciénagas y rondas hídricas. Estos ecosistemas cumplen
diversas funciones que permiten la adaptación al cambio climático. En el POMCA también se analiza el
riesgo y en este análisis se definen áreas de amenaza alta, media y baja que deben ser tratadas con
medidas de prevención y/o “mitigación de riesgos1
”. Estas medidas buscan la adaptación a las
condiciones y variaciones del clima que son el motor de los desastres naturales. Un clima cambiante
puede llevar a modificaciones en la frecuencia, intensidad, extensión y duración de los eventos
metereológicos y climáticos extremos y puede generar extremos sin precedentes (IPCC, 2012). Por lo
tanto siguiendo el principio de prevención, pueden analizarse los resultados de los modelos globales de
cambio climático y escenarios climáticos regionales para prever estas alteraciones y definir estrategias
de adaptación al cambio climático.
1
Mitigación del riesgo: Medidas de intervención prescriptiva o correctiva dirigidas a reducir o disminuir los daños y pérdidas que se puedan
presentar a través de reglamentos de seguridad y proyectos de inversión pública o privada cuyo objetivo es reducir las condiciones de amenaza,
cuando sea posible, y la vulnerabilidad existente. (República de Colombia, 2012)
14. 14
Enfoques para la adaptación al cambio climático
La adaptación se ha desarrollado siguiendo aproximaciones que responden a la vulnerabilidad de los
diversos componentes del ambiente. Sin embargo, la definición de medidas de adaptación debe
realizarse de forma integral respondiendo a las condiciones locales y tomando en cuenta la
sostenibilidad de los ecosistemas y los derechos de los pobladores. En este aparte se citan algunas
fuentes de información que pueden ser consultadas para profundizar en los diversos enfoques
existentes así como bases de datos de información de medidas de adaptación implementadas y sus
resultados. En el Catálogo de Medidas de Adaptación y Mitigación al cambio climático se encuentran
desarrolladas las medidas que son aplicables a PEM y POMCA
Adaptación basada en ecosistemas:
“La adaptación basada en los ecosistemas es el uso de la biodiversidad y los servicios de los ecosistemas
como parte de una estrategia general de adaptación para ayudar a las personas a adaptarse a los
impactos adversos del cambio climático.” https://www.giz.de/expertise/downloads/giz2013-es-
adaptacion-basada-en-los-ecosistemas.pdf
La Política Nacional de Gestión Integral de la Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos Fuente especificada
no válida., presenta como uno de sus ejes la Biodiversidad, Gestión del Riesgo y Suministro de servicios
ecosistémicos, propone que este enfoque de adaptación y mitigación debe usarse para enfrentar las
amenazas relacionadas con el cambio ambiental (pérdida y transformación de la biodiversidad y sus
servicios ecosistémicos + variabilidad y cambio climático).
Adaptación basada en comunidades:
“La Adaptación basada en Comunidades (AbC) es una estrategia de adaptación en que las
comunidades son las protagonistas definitorias en los procesos para disminuir su vulnerabilidad y
aumentar su capacidad adaptativa frente a los impactos reales o esperados de la variabilidad o del
cambio climático, sin desconocer las necesidades de su entorno socio‐ecosistémico, o ver la
comunidad desconectado de él. La AbC se fundamenta en las prioridades, necesidades,
conocimientos y capacidades de la comunidad y su relación con su contexto local, regional y
nacional. La AbC se ajusta a las características específicas de las comunidades y debe ser
complementada con conocimiento de fuentes externas. Se debe hacer énfasis especial en las
comunidades más pobres y vulnerables y asegurar la inclusión de los enfoques diferenciales. La AbC
requiere un acercamiento integral que empodere a las comunidades, bajo la visión integral de una
vida y un desarrollo digno y sostenible.” (MADS, 2013)
Adaptación basada en tecnologías:
Uso de tecnologías para reducir, estimar y prevenir los riesgos del cambio climático.
Adaptación en la agricultura y el recurso hídrico:
Busca generar herramientas para la adaptación de las actividades agrícolas al cambio climático.
15. 15
Adaptación en salud:
Enfoque que se basa en el análisis de la vulnerabildad de las regiones en salud ambiental por cambio
climático.
Figura 2. Estrategias de adaptación complementarias.
2.1.3. MITIGACION DEL CAMBIO CLIMATICO
La mitigación es la intervención antropogénica para reducir las fuentes o mejorar los sumideros de gases
efecto invernadero. Las medidas de mitigación pueden contribuir a reducir emisiones de gases de efecto
invernadero (GEI) o aumentar el almacenamiento terrestre del carbono. Colombia participa
marginalmente en las emisiones de GEI con alrededor de 0,37% de las emisiones globales. Sin embargo
ha desarrollado e implementado diferentes políticas que promueven el desarrollo sostenible y el
crecimiento económico asociado con bajas emisiones de GEI, reflejando así una evolución en materia de
mitigación a nivel nacional (IDEAM, 2010).
REDD+ Reducción de emisiones por Deforestación y Degradación:
16. 16
Los bosques y selvas son sumideros de carbono porque tienen gran capacidad de almacenar CO2. Por lo
tanto la conservación de bosques y selvas es una medida de mitigación, que se fomenta a través del
proyecto REDD+, una iniciativa internacional en construcción de la Convención Marco de las Naciones
Unidas para el Cambio Climático CMNUCC.
https://www.minambiente.gov.co/index.php/component/content/article/noticias/17-tema-intermedio
http://finanzascarbono.org/comunidad/pg/groups/3530/redd-reduccion-de-emisiones-por-
deforestacion-y-degradacion.
http://bioredd.org/proyectos/
Inventario de gases de efecto invernadero
Los inventarios nacionales de gases efecto invernadero permiten calcular las emisiones en cinco
categorías (1) Energía, (2) Procesos Industriales, (3) Agricultura, (4) Uso de la Tierra, Cambio en el Uso
de la Tierra y Silvicultura y (5) Residuos. El Inventario Nacional de Emisiones de Gases de Efecto
Invernadero para los años 2000 y 2004 contenido en la Segunda Comunicación de Cambio Climático,
presento los resultados sobre los seis GEI incluidos en el Anexo A del Protocolo de kyoto, que fueron:
dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), hidrofluorocarbonos (HFC's),
perfluorocarbonos (PFC's) y hexafluoruro de azufre (SF6). En el segundo informe, donde se presentó la
actualización del primer inventario y se incluyeron emisiones de los gases fluorados (HFC's y PFC's) en la
categoría de emisión de Procesos Industriales (MADS, 2015).
Existen algunas herramientas para la estimación de los GEI y sus efectos para diversos sectores como
son la calculadora de carbono 2050, que proyecta diversos escenarios de reducción de emisiones de GEI
teniendo en cuenta los diferentes sectores de la economía. Permite calcular la energía que consumen
algunos sectores y como se puede reducir, los sectores en que se deben concentrar los esfuerzos de
reducción, cuales sectores no representan grandes cambios en términos de reducciones y que
reducciones se puede alcanzar (http://www.calculadoracolombia2050.com/).
Otra herramienta para evaluar puntualmente el sector agricultura y bosques se denomina Ex-Ante
desarrollada por la FAO (http://www.fao.org/tc/exact/en/). En esta herramienta se puede evaluar tanto
las emisiones como los sumideros de CO2 por unidad de área expresados en toneladas equivalentes de
CO2. Esta herramienta permite estimar y priorizar proyectos con altos beneficios en términos
económicos y de mitigación del cambio climático.
2.1.4. ESCENARIOS DE CAMBIO CLIMATICO
Los escenarios de cambio climático generados por el IDEAM (IDEAM, PNUD, MADS, DNP, CANCILLERIA,
2015), son proyecciones de posibles variaciones de precipitación y temperatura (media, máxima y
mínima) de acuerdo con caminos representativos de concentración de emisiones o RCP por sus siglas en
inglés, que son escenarios de forzamiento radiactivo RCP2.6, RCP 4.5, RCP 6.0 y RCP 8.5, de los modelos
climático globales disponibles en la base de datos del proyecto Couple Model Intercomparison Project
17. 17
Version 5 – CMIP5, así como un ensamble multimodelo y multiescenario que permite promediar las
respuestas de los diferentes RCP para tomar decisiones nacionales y regionales de forma sencilla sin
perder el rigor científico.
Los escenarios de cambio climático se obtuvieron siguiendo los lineamientos propuestos por el Panel
Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) y de acuerdo con las mediciones meteorológicas
históricas y las metodologías meteorológicas más avanzadas a nivel mundial.
Los escenarios de cambio climático más recientes fueron presentados en abril de 2015, se realizó la
recopilación, validación y control de calidad y consistencia de los datos de las estaciones a nivel nacional
que cuentan con la información suficiente y con las condiciones apropiadas para hacer el análisis de
clima presente en la ventana temporal 1976-2005. Para cada una de estas estaciones se generan
escenarios de cambio climático, corriendo 16 modelos de circulación general para cada RCP, usando los
datos del proyecto mundial CMIP5, de conformidad al más reciente informe del IPCC (AR5). Con esta
información se utiliza el método de Ensamble del Promedio de Fiabilidad Conjunta RAE (por sus siglas en
inglés) y se realizan interpolaciones para espacializar la información en cada uno de los 32
departamentos a nivel nacional. Después de dos años de trabajo y un gran esfuerzo humano y
computacional se obtuvieron los escenarios de cambio climático espacializados a escala de
representación 1:100.000 (IDEAM, PNUD, MADS, DNP, CANCILLERIA, 2015).
Los resultados obtenidos a nivel departamental y nacional permiten ver aumentos en la temperatura
media para Colombia en los 4 RCP de 1.0˚C en el periodo 2011-2040, en el periodo 2041-2070 de 1.0 a
1.5 ˚C en el RCP 2.6 y de 2.0 a 2.5 ˚C en el RCP 8.5 y para el periodo 2071-2100 cerca del 1.5 ˚C para el
RCP 2.6 Y DE 3.5 A 4.0 ˚C para el RCP 8.5 ˚C. Respecto a los resultados de la precipitación las regiones
Caribe y Amazonía tendrías disminución de la precipitación entre el 10 y 40% en el periodo 2011-2100.
En el centro y norte de la región andina habrá incrementos del orden de 10 a 30%. En la Orinoquía y
resto del país los cambios encontrados no son significativos ya que el cambio es del orden de 10%
(IDEAM, PNUD, MADS, DNP, CANCILLERIA, 2015).
En anteriores comunicaciones nacionales de cambio climático se han sugerido metodologías para
elaborar escenarios de cambio climático regional o local (Oviedo Torres, 2010). Sin embargo, dado que
el IDEAM ha producido en esta Tercera Comunicación Nacional escenarios a nivel regional y
departamental que pueden ser aplicables a las cuencas objeto de ordenación ambiental, se recomienda
utilizar dichos escenarios en los análisis de cambio climático. Si las Corporaciones desean utilizar mayor
información que la utilizada por el IDEAM, dado el conocimiento e información existente regional, se
recomienda utilizar modelos globales evaluados para cada variable a modelar para que satisfagan las
condiciones del clima presente, siguiendo la metodología propuesta por el IDEAM, incorporando los
nuevos escenarios de RCP de la AR5 (Oviedo Torres, 2010; IDEAM, PNUD, MADS, DNP, CANCILLERIA,
2015).
18. 18
2.2. GESTION DEL CAMBIO CLIMÁTICO
La vinculación de Colombia a las instancias internacionales sobre el cambio climático, ha sido ratificada
mediante Leyes, que constituyen parte del marco legal sobre cambio climático existente. La Ley 164 de
1994 es el instrumento normativo para ratificar la CMNUCC y donde se definen los compromisos del país
entre los que se encuentran “Cooperar en los preparativos para la adaptación a los impactos del cambio
climático; desarrollar y elaborar planes apropiados e integrados para la ordenación de las zonas
costeras, los recursos hídricos y la agricultura, y para la protección y rehabilitación de las zonas,
afectadas por la sequía y la desertificación, así como por las inundaciones (República de Colombia,
1994). En este instrumento el país se compromete también a emitir Comunicaciones Nacionales que son
informes periódicos sobre los avances de Colombia en la implementación de la CMNUCC, en donde se
reportan las acciones del país en cuanto a temas de mitigación, adaptación, financiamiento,
investigación, educación y sensibilización de diversos públicos respecto al cambio climático.
A través de las Comunicaciones Nacionales2
ha sido posible consolidar la base de información y
conocimiento de las condiciones particulares, las evidencias y los avances en la implementación de
medidas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (mitigación), las acciones que
contribuyen a la disminución de las condiciones de vulnerabilidad y riesgo y aquellas que buscan
incrementar las capacidades de prevención, preparación y respuesta a las nuevas condiciones en un
clima cambiante (adaptación). Adicionalmente, la temática poco a poco ha sido incorporada en los
Planes de Desarrollo, desde el nivel nacional al local. Algunos sectores tales como el agropecuario o el
energético, han iniciado acciones que se encaminan a prepararse de manera planificada ante los
potenciales impactos del cambio climático.
En el Capítulo 3 de vulnerabilidad de la Segunda Comunicación Nacional (IDEAM, 2010), se describen las
evidencias del cambio climático en el mundo y en Colombia, los escenarios de cambio climático (para la
segunda comunicación), la variabilidad climática y eventos hidrometereológicos extremos, las
metodologías para el análisis de la vulnerabilidad ambiental, los impactos potenciales del cambio
climático en Colombia.
En el Capítulo 5 Adaptación, de la Segunda Comunicación Nacional (IDEAM, 2012), se presentan los
siguientes lineamientos para la adaptación:
Fortalecer la gestión de la investigación y la transferencia del conocimiento.
Fortalecer la gestión del riesgo.
Mejorar el uso del territorio como estrategia para disminuir la vulnerabilidad.
Reducción de los impactos ambientales, económicos y sociales.
Mejorar la capacidad de adaptación de las comunidades más vulnerables.
Diseñar e implementar un arreglo institucional adecuado para la adaptación.
Valorar y proteger la base productiva a partir de los bienes y servicios de la biodiversidad.
2
El IDEAM, viene desarrollando modelos dinámicos y estadísticos reconocidos a nivel global, para la generación del
clima a lo largo del siglo XXI, los que permiten calcular posibles cambios de las variables meteorológicas con
respecto al clima actual.
19. 19
Fortalecer la gestión de cooperación y recursos para la adaptación.
En el documento se resalta que para lograr el fortalecimiento en la gestión del riesgo y el mejoramiento
del uso del territorio es necesaria la incorporación de la adaptación al cambio climático en los
instrumentos de ordenamiento territorial a distintas escalas (IDEAM, 2010; pag 331)
En el Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014, se priorizaron cuatro estrategias para abordar de forma
integral la problemática del cambio climático, de las cuales tres a la fecha siguen en proceso de
construcción: i. Plan Nacional de Adaptación-PNACC; ii. Estrategia Colombiana de Desarrollo Bajo en
Carbono-ECDBC y iii. Estrategia Nacional de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación-
ENREDD. La primera estrategia, el PNACC, busca reducir la vulnerabilidad del país e incrementar su
capacidad de respuesta frente a las amenazas e impactos del cambio climático e incidir en los procesos
de planificación ambiental, territorial y sectorial de tal manera que, se tomen decisiones de manera
informada, teniendo en cuenta los determinantes y proyecciones climáticas (MADS, 2013).
El CONPES 3700 de 2011 (DNP, 2011), define la estrategia institucional para la articulación de políticas y
acciones en materia de cambio climático en Colombia. La articulación se realizará en el marco del
SISCLIMA, conformado por una Comisión Intersectorial del Cambio Climático (COMICC) y Mesas de
Trabajo que integran los Comités Permanentes. Las Mesas trabajo del Comité Sectorial son las
encargadas de formular los Planes Sectoriales de Adaptación. Las Mesas de Trabajo del Comité
Territorial apoyan a los territorios en la elaboración de los Planes Territoriales de Adaptación a través de
los Nodos Regionales de Cambio Climático (NRCC) (MADS, 2013).
El Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018 define entre sus estrategias transversales y regionales el
Crecimiento Verde, donde uno de sus objetivos es “lograr un crecimiento resiliente y reducir la
vulnerabilidad frente a los riesgos de desastres y al cambio climático”. Las estrategias para alcanzar este
objetivo son.
Fortalecer los procesos de la gestión del riesgo: Conocimiento, reducción y manejo.
Fortalecer la planificación del desarrollo con criterios de adaptación al cambio climático.
Reducir el riesgo existente, la generación de nuevos riesgos y el impacto de los desastres en los sectores.
(República de Colombia, 2015)
A través de las experiencias en la implementación de proyectos y acciones frente al cambio climático, se
ha coincidido en la importancia del recurso hídrico y su alta vulnerabilidad ante las variaciones del clima
(USEPA-California Department of Water Resources, 2011; IPCC, 2013; IPCC, 2014). Es necesario utilizar la
información científica para estrechar la relación existente entre las dinámicas climáticas y sus relaciones
con el ciclo del agua, el cambio de los usos del suelo y las actividades socio-económicas.
En la Figura 3 se presentan algunos lineamientos y experiencias nacionales e internacionales en la
inclusión de la variable de cambio climático en instrumentos de gestión.
20. 20
Figura 3. Experiencias de lineamientos para la incorporación de cambio climático en instrumentos de gestión.
2.3. GESTIÓN INTEGRAL DEL RECURSO HÍDRICO
El manejo integral del agua es el proceso para formular e implementar estrategias de manejo y
planificación basadas en una visión común de los actores que están relacionados por el uso del agua,
con el ánimo de asegurar el desarrollo sostenible de los recursos hídricos y su utilización tomando en
consideración las interdependencias espaciales y temporales con los procesos naturales y los usos
ecológicos y antropogénicos (Georgakakos, 2007). Este concepto implica tres principios orientadores
(Global Water Partnership, 2013):
Eficiencia económica en el uso del agua, donde se sugiere que el agua debe ser usada con la máxima
eficiente posible, dada su escasez incremental y la necesidad de optimizar los recursos económicos.
Equidad social donde todo habitante de la cuenca tiene derecho a tener acceso al agua con cantidad y
calidad suficientes para suplir sus necesidades y
Sostenibilidad ambiental y ecológica, donde se busca garantizar que el recurso puede ser usado
actualmente sin comprometer las funciones que presta como ecosistema y se garantice el uso del mismo
por las generaciones futuras.
21. 21
2.3.1. Política Nacional para la Gestión Integral del Recurso Hídrico - PNGIRH
La PNGIRH establece los objetivos, estrategias, metas, indicadores y líneas de acción estratégica para el
manejo del recurso hídrico en el país, en un horizonte de 12 años (ver figura 4). Tiene como objetivo
orientar la planificación, administración, seguimiento y monitoreo del recurso hídrico a nivel nacional
bajo un criterio de gestión integral del mismo; a partir del concepto de que “el agua es un bien natural
de uso público administrado por el Estado” a través de las Corporaciones Autónomas Regionales, las de
Desarrollo Sostenible y las Autoridades Ambientales Urbanas. Se reconoce además el carácter
estratégico del agua para todos los sectores sociales, económicos y culturales del país. Por lo tanto, la
política resulta ser transversal para otras esferas de la acción pública y para los diversos usuarios en
todas las regiones del país.
La Política establece directrices unificadas para el manejo agua en el país, que además de apuntar a
resolver la actual problemática del recurso hídrico, permitan hacer uso eficiente del recurso y
preservarlo como una riqueza natural para el bienestar de las generaciones futuras de colombianos. La
gestión del recurso se deriva del ciclo hidrológico que vincula una cadena de interrelaciones entre
diferentes componentes naturales y antrópicos. Además reconoce la diversidad de las regiones del país
y en este sentido propone incluir estas diferencias en todos los instrumentos que la acompañan.
22. 22
POLITICA PARA LA GIRH PLAN HIDRICO
Conocimiento
Planeación
Conservación
Medición
consumos
GIRHen
sectores
Uso eficiente y
ahorro
Ordenamiento
recurso
Reducción
Contaminación
Monitoreo y
seguimiento
11 Líneas de
Acción
Estratégica
3. CALIDAD
2.
DEMANDA
1. OFERTA
8 Líneas de
Acción
Estratégicas en
temas:
6.
GOBERNABI
LIDAD.
Divulgación de
riegos
Incorporar en
planeación
Reducción y
adaptación
Mejoramiento
gestión
Formación,
investigación
Revisión
normativa
Sostenibilidad
financiera
Participación
Cultura del agua
Manejo de
conflictos
5. FORTALE.
INSTITUC.
4. RIESGOS 8 Líneas de
Acción
Estratégicas
16 Líneas de
Acción
Estratégica
10 Líneas de
Acción
Estratégica
10 Líneas de
Acción
Estratégica
LINEAS
ESTRATEGICAS
ESTRATEGIASOBJETIVOS PROGRAMAS
FASEI.2010-2014
FASEII.2015-2018
FASEIII.2019-2022
Figura 4. Objetivos, Estrategias y líneas estratégicas, de la PNGIRH. Fuente: MADS,2010
La Política Nacional para la Gestión Integral del Recurso Hídrico estructuró un modelo espacial para una
ordenación coherente de las cuencas hidrográficas (Figura 5), estableciendo las siguientes escalas:
1. Cuencas objeto de planificación estratégica: Corresponde a las cinco (5) grandes macrocuencas o
áreas hidrográficas del país (Magdalena-Cauca, Caribe, Orinoco, Amazonas y Pacífico), las cuales
serán objeto de análisis de planificación estratégica que defina lineamientos gruesos de gestión,
de acuerdo con las potencialidades, vocación y particularidades ambientales y sociales de cada
una de ellas.
2. Cuencas objeto de instrumentación y monitoreo a nivel nacional: Corresponden a las cuarenta y
dos (42) zonas hidrográficas, definidas en el mapa de zonificación ambiental del IDEAM, las
cuales serán el espacio para monitorear el estado del recurso hídrico y el impacto que sobre éste
tienen las acciones desarrolladas en el marco de la política nacional para la gestión integral del
recurso hídrico…”
23. 23
3. Cuenca objeto de ordenación y manejo: Corresponden a la cuenca de nivel igual o subsiguiente al
de las denominadas subzonas hidrográficas, definidas en el mapa de zonificación hidrográfica
del IDEAM, en las cuales se formularán e implementarán los planes de manejo y ordenación de
cuencas, pero de manera priorizada…” (MADS, 2010).
Figura 5. Estructura de planificación de la PNGIRH y Decreto 1076 de 2015 (MADS, 2010; MADS, 2015)
Por otra parte el Decreto 1076 de 2015 del MADS, establece instancias de participación para cada uno
de los instrumentos de participación, tal como se observan en la Figura 6.
Figura 6. Escalas de los instrumentos de planificación e instancias de participación. (MADS, 2015)
24. 24
Planes Estratégicos de Macrocuencas
De acuerdo con el Título 3 Capítulo 1, Sección 2 del Decreto Único Reglamentario del Sector Ambiente y
Desarrollo Sostenible 1076 de 2015 (MADS, 2015), el Plan Estratégico de la Macrocuenca es un:
”Instrumento de planificación ambiental de largo plazo que con visión nacional, constituye el marco para
la formulación, ajuste y/o ejecución de los diferentes instrumentos de política, planificación, planeación,
gestión, y de seguimiento existentes en cada una de ellas. Parágrafo. Los planes estratégicos de las
Áreas Hidrográficas o Macrocuencas, se formularán a escala 1:500.000 o un nivel más detallado cuando
la información disponible lo permita”.
Dado el horizonte de tiempo en el que se formulan los PEM (al año 2050 para los PEM que actualmente
están en formulación) y su escala espacial de trabajo, los efectos del cambio climático pueden analizarse
tanto en el diagnóstico, estableciendo las variaciones existentes en la actualidad de acuerdo con los
registros históricos en variables como la precipitación, la temperatura y el cambio en la altura del nivel
del mar, como en la prospectiva al analizar bajo escenarios de cambio climático la posible incidencia de
los cambios en estas variables sobre los diversos componentes del ambiente (biofísico, socioeconómico
y cultural, político administrativo, funcional y gestión del riesgo).
Dados los alcances del PEM (MADS, 2015), este instrumento se constituye en marco para “la
formulación de los nuevos Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas al interior de la macrocuenca, así
como para el ajuste de los que ya han sido formulados, la formulación de políticas públicas sectoriales
de carácter regional y/o local, la formulación de los nuevos planes de acción cuatrienal de las
autoridades ambientales regionales, en concordancia con las obligaciones estipuladas en el Decreto
1200 de 2004 y demás normas reglamentarias, establecer criterios y lineamientos de manejo
hidrológico de los principales ríos de la macrocuenca por parte de las autoridades ambientales, en
términos de cantidad y calidad, al igual que los usos del agua a nivel de subárea…”, entre otros. En este
sentido los instrumentos de planificación se articulan y promueven la articulación de las estrategias de
adaptación y mitigación al cambio climático de forma integral, definidas en los PEM.
Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas
De acuerdo con el Título 3 Capítulo 1, Sección 5 del Decreto Único Reglamentario del Sector Ambiente y
Desarrollo Sostenible 1076 de 2015 (MADS, 2015), el Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca
Hidrográfico POMCA es el “Instrumento a través del cual se realiza la planeación del uso coordinado del
suelo, de las aguas, de la flora y la fauna y el manejo de la cuenca entendido como la ejecución de obras
y tratamientos, en la perspectiva de mantener el equilibrio entre el aprovechamiento social y económico
recursos y la conservación la estructura físico-biótica de la cuenca y particularmente del recurso hídrico”
En el artículo 2.2.3.1.5.2. “De las Dírectrices. La ordenación de cuencas se hará teniendo en cuenta: 1. El
carácter especial de conservación de las Áreas de Especial Importancia Ecológica, 2. Los ecosistemas y
zonas que la legislación ambiental ha priorizado en su protección, tales como páramos, subpáramos,
nacimientos de agua, humedales, rondas hídricas, zonas de recarga de acuíferos, zonas costeras,
manglares, estuarios, meandros, ciénagas u otros hábitats similares de recursos hidrobiológicos, los
criaderos y hábitats de peces, crustáceos u otros hábitats similares de recursos hidrobiológicos”... “5. La
oferta, la demanda actual y futura de los recursos naturales renovables, incluidas las acciones de
conservación y recuperación del medio natural para propender por su desarrollo sostenible y la definición
25. 25
de medidas de ahorro y uso eficiente de agua, 6. El riesgo que pueda afectar las condiciones
fisicobióticas y socioeconómicas en la cuenca, incluyendo condiciones de variabilidad climática y eventos
hidrometeorológicos extremos.”
La escala de elaboración de los POMCA se define en el mismo Decreto como 1:100.000 para las cuencas
que hacen parte de las zonas hidrográficas o macrocuencas Orinoco, Amazonas y Pacífico o un nivel más
detallado cuando la información disponible lo permita. Para las cuencas que se encuentran en las zonas
hidrográficas Magdalena Cauca y Caribe, el POMCA se debe elaborar en escala 1:25.000.
Los resultados obtenidos en la ordenación ambiental del territorio a través de la zonificación ambiental
donde se identifican áreas para conservación y protección, el componente programático y la gestión del
riesgo deben ser adoptados por los Planes de Ordenamiento Territorial de los municipios en la cuenca,
como determinantes ambientales.
De acuerdo con la Guía para formulación los POMCA, “son el resultado de la aplicación metodológica de
ciclos y fases. Las seis fases (aprestamiento, diagnóstico, prospectiva y zonificación, formulación,
ejecución y seguimiento y evaluación) conforman un ciclo, cada ciclo marca un horizonte de tiempo para
el cual el POMCA responde y su culminación marca un nuevo comienzo que dé cuenta de otras
circunstancias sin perder de vista el conocimiento, la información y los logros obtenidos”. Las fases del
plan que conforman cada ciclo se convierten en un punto de referencia para el ciclo siguiente y así
sucesivamente. Cada ciclo de la espiral debe ser satisfecho por una versión del POMCA con sus
resultados concretos, es decir cada ciclo es un plan que satisface un propósito particular, relacionado
con la problemática del momento. Dado que el cambio climático tiene manifestaciones actuales y
generará impactos en un futuro que trasciende un ciclo del POMCA, es posible pensar definir medidas
de adaptación actualmente que inicien el camino para lograr en un futuro un territorio resiliente.
Los POMCA son instrumentos que sirven para la adaptación del territorio al cambio climático, pues a
través de ellos se definen las potencialidades y limitantes del territorio que condicionan su uso para
permitir el desarrollo sustentable de las regiones, buscando el equilibrio entre el uso de los recursos por
las actividades sociales, económicas y culturales y la conservación de la estructura así como la función
físico biótica de las cuenca, incluyendo el análisis del clima tanto presente como en condiciones futuras.
El MADS ha elaborado la Guía Técnica para la formulación de POMCA (MADS, 2013), donde se
establecen los criterios técnicos, procedimientos y metodologías en cada fase del POMCA así como los
lineamientos para abordar los temas de participación y gestión del riesgo. Posteriormente, los
lineamientos relacionados con la gestión del riesgo se han complementado con el protocolo para la
gestión del riesgo (MADS, MINHACIENDA, Fondo de Adaptación, 2014). Los alcances técnicos de los
términos de referencia de los convenios suscritos entre las Corporaciones y el Fondo de Adaptación para
la elaboración o ajuste de los POMCA a nivel nacional clarifican el alcance de los análisis que deben
realizarse en cada componente del POMCA.
26. 26
2.4. POLÍTICA PARA LA GESTIÓN DE RIESGOS DE DESASTRES
La Ley 1523 de 2012 adoptó la Política Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres y estableció el
Sistema Nacional de gestión de Riesgos de Desastres. En ésta Ley se busca articular conceptos entre
gestión del recurso hídrico, gestión del cambio climático y gestión del riesgo de desastres a través de
conceptos como el de adaptación al cambio climático por eventos hidrometereológicos “que
corresponde a la gestión del riesgo de desastres en la medida en que está encaminada a la reducción de
la vulnerabilidad o al mejoramiento de la respuesta a los cambios observados o esperados del clima y su
variabilidad” (República de Colombia, 2012). En esta misma se define que las corporaciones autónomas
regionales deben propender por la articulación de las acciones de adaptación al cambio climático y la
gestión del riesgo de desastres en su territorio en virtud de que ambos procesos contribuyen
explícitamente a mejorar la gestión ambiental territorial sostenible.
El riesgo asociado al recurso hídrico constituye un componente fundamental de la Política Nacional para
la Gestión Integral del Recurso Hídrico, razón por la cual se incorporó un componente transversal de
gestión de riesgos dentro del proceso de ordenación y manejo de las cuencas hidrográficas. Para
desarrollar este componente en POMCA se incluye el anexo 2 de la Guía Técnica para la Formulación de
los Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas (MADS, 2013).
El objetivo de la gestión de riesgos en POMCA es incluir la evaluación de amenazas y vulnerabilidad y
definición de escenarios de riesgo que permitan una gestión segura del territorio, estableciendo los
condicionamientos para el uso y ocupación del territorio y evitar la configuración de nuevos riesgos. La
gestión del riesgo involucra el conocimiento del riesgo (susceptibilidad, amenaza y vulnerabilidad),
análisis de alternativas de reducción de riesgos y la definición de estrategias y programas tendientes a
intervenir y reducir las condiciones de riesgo existentes (MADS, 2013). De acuerdo con el anexo B de la
Guía, el alcance de la gestión del riesgo en el POMCA incluye contemplar los análisis de los fenómenos
amenazantes y su relación con los efectos de la variabilidad climática por eventos extremos. En el Anexo
B de la Guía (MADS, 2013) se define el siguiente contenido del componente de gestión de riesgo en la
fase de formulación:
Los objetivos del POMCA y la articulación con otros instrumentos de planificación.
La articulación entre el ordenamiento ambiental y el ordenamiento territorial.
La gestión del riesgo del desastre y la gestión del cambio climático.
La zonificación de amenazas.
Las competencias de las entidades en el tema de riesgo.
Por lo tanto la gestión del cambio climático es un contenido que debe desarrollarse como parte del Plan
y en este documento se propone una metodología para realizar este análisis, que complementa lo
contemplado en la Guía y en el protocolo para la gestión del riesgo, así como en los términos de
referencia nombrados previamente.
27. 27
2.5. INCIDENCIA DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN LA GESTIÓN INTEGRAL DEL
RECURSO HÍDRICO Y EN LA GESTIÓN DEL RIESGO DEL DESASTRES.
En este capítulo se desarrolla la relación entre el cambio climático, la gestión del riesgo de desastres y la
gestión del recurso hídrico, desde la posible incidencia del cambio climático en los eventos hidrológicos
extremos que producen riesgo de desastres hasta las posibles aproximaciones existentes para la
adaptación que posibilitan la prevención de desastres. Al finalizar el capítulo se resalta desde la política
gestión integral del recurso hídrico como se incorporar la gestión del riesgo de desastres y los aportes
adicionales que la gestión del cambio climático ofrecen a esta aproximación.
De acuerdo con el IPCC, “Un clima cambiante produce cambios en la frecuencia, la intensidad, la
extensión espacial, la duración y las circunstancias temporales de los fenómenos meteorológicos y
climáticos extremos, y puede dar lugar a fenómenos meteorológicos y climáticos extremos sin
precedentes. Los cambios en los fenómenos climáticos extremos pueden estar relacionados con cambios
en la media, la varianza, o la forma de distribución de la probabilidad, o en todas ellas (véase la figura 7).
Algunos fenómenos climáticos extremos (por ejemplo, las sequías) pueden ser el resultado de una
acumulación de fenómenos meteorológicos o climáticos que no son extremos, si se consideran por
separado. Muchos fenómenos meteorológicos y climáticos extremos son el resultado de la variabilidad
natural del clima. La variabilidad natural seguirá siendo un factor determinante de los fenómenos
climáticos extremos en el futuro, además de los efectos de los cambios antropógenos del clima ( (IPCC,
2012)”.
28. 28
Figura 7. Efecto de los cambios en la distribución de temperaturas en los extremos. Diferentes cambios en las
distribuciones de temperaturas entre el clima presente y futuro y sus efectos sobre los valores extremos
de las distribuciones: a) efectos de un simple desplazamiento de toda la distribución hacia un clima más
cálido; b) efectos de un aumento de la variabilidad de la temperatura sin cambio en la media, y c) efectos
de cambio en la forma de la distribución, en este ejemplo un desplazamiento en la asimetría hacia la
parte más cálida de la distribución. Tomado de: (IPCC, 2012).
El cambio climático afecta las variables hidroclimatológicas y meteorológicas, exacerbando las amenazas
relacionadas con el exceso de agua (inundaciones, avenidas torrenciales, movimientos en masa, ciclones
y tormentas tropicales) o déficit de agua (sequía, desertificación, incendios forestales) (DCC-MADS,
2014)
Los eventos extremos hidrológicos pueden ocurrir en Colombia por la variabilidad climática intranual
que en la mayor parte del territorio varía en ciclos de trimestres en el año y la variabilidad climática
interanual producida por fenómenos ENSO (Niño y Niña). Estos fenómenos de exceso o déficit de agua
29. 29
pueden superponerse por ejemplo en año Niña en el trimestre septiembre-octubre- noviembre SON,
generando extremos de exceso de agua (IPCC, 2012; ASOCARS - IDEAM, 2014).
La naturaleza y gravedad de los impactos debidos a los fenómenos climáticos extremos no dependen
solo de los propios fenómenos sino también de la exposición y la vulnerabilidad. La gestión del riesgo de
desastres y la adaptación al cambio climático se centran en la reducción de la exposición y la
vulnerabilidad así como el aumento de la resiliencia de los posibles impactos adversos de los fenómenos
climáticos extremos, a pesar de que los riesgos no pueden eliminarse completamente. En este sentido la
variabilidad natural y el cambio climático antropógenico se deben analizar de forma conjunta para
determinar los posibles fenómenos meteorológicos y climáticos que determinan el riesgo de desastres.
Ver figura 8.
Figura 8. Relación entre cambio climático, gestión de riesgo de desastres y gestión de los recursos hídricos, respecto
a los eventos meteorológicos y climáticos extremos. Tomado de (IPCC, 2012)
La adaptación al cambio climático y la gestión de riesgos de desastre ofrecen una serie de enfoques
complementarios para gestionar los riesgos derivados de los fenómenos climáticos extremos y los
desastres (Figura 9). Estos enfoques pueden aplicarse de forma combinada y obtener beneficios tanto
en el escenario climático actual como en diversos escenarios futuros donde se involucran las tendencias
proyectadas de exposición y vulnerabilidad. Estas medidas se denominan “medidas de no
arrepentimiento” y pueden ser sistemas de alerta temprana, la planificación del uso de la tierra, la
gestión y la restauración de los ecosistemas, entre otras. La vulnerabilidad alta puede ser el resultado de
procesos de desarrollo inapropiados como la urbanización rápida y no planificada en zonas peligrosas,
30. 30
las fallas de gobernanza y la escasez de medios de subsistencia de los pobres (IPCC, 2012). La reducción
de la vulnerabilidad y la exposición disminuye los riesgos de desastres.
Figura 9. Enfoques de adaptación y gestión del riesgo de desastres en un clima cambiante. Los enfoques mostrados
en la gráfica son complementarios y pueden aumentar la resiliencia frente a otros riesgos que surgen con el tiempo.
Estos enfoques se pueden solapar y se pueden aplicar de forma simultánea. Tomado de: (IPCC, 2012)
La gestión eficaz de riesgos suele constar de un conjunto de acciones donde por un lado se propende
por la reducción de riesgos y por otro lado se da respuesta a los fenómenos meteorológicos y los
desastres. Las estrategias más exitosas combinan soluciones de infraestructura con el desarrollo de
capacidades individuales e institucionales y la respuesta basada en ecosistemas
Adicionalmente a los eventos hidrológicos extremos, los cambios en la media de las variables hidro-
meteorológicas (temperatura, precipitación, velocidad del viento, radiación solar y en consecuencia
escorrentía, caudal, evapotranspiración) pueden variar las condiciones medias de hábitats que pueden
impactar cultivos afectando la seguridad alimentaria y la economía, la biodiversidad, generar problemas
en salud al movilizar o propiciar la reproducción de bacterias e insectos que transmiten enfermedades,
entre otros impactos. Los cambios medios en la precipitación pueden propiciar variaciones en el balance
hidrológico que ocasionan, por ejemplo, escasez de la oferta de agua y vulnerabilidad por
desabastecimiento. La calidad del agua también puede verse afectada al cambiar las condiciones del
régimen hidrológico y al variar la temperatura media del agua, propiciando cambios en las tasas de
decaimiento de algunos de los determinantes de la calidad del agua. La altura del nivel del mar también
31. 31
puede ha variado y puede seguir incrementándose, generando problemas en el territorio ocupado cerca
del mar y en los ríos que desembocan en la mar pues su nivel subirá aguas arriba.
Una de las estrategias de adaptación al cambio climático que debe propiciarse es la planificación
ambiental del territorio que propende por definir áreas para permitir proveer los servicios ecosistémicos
que requiere una cuenca hidrográfica y sus habitantes, disminuir la vulnerabilidad ante riesgos
asociados al recurso hídrico y la disminución de la oferta de los bienes y servicios ambientales. En este
punto se encuentran la gestión del cambio climático, la gestión integral del recurso hídrico y la gestión
del riesgo.
En la actualidad los instrumentos de planificación ambiental del territorio se formulan teniendo en
cuenta la variabilidad climática que permite analizar las condiciones más críticas respecto al exceso o al
déficit de agua, de acuerdo con las variaciones históricas de la precipitación tanto inter como intra
anualmente. Los instrumentos existentes para la formulación de POMCA que son la Guía Técnica para la
formulación de los Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas (MADS, 2013), el protocolo
para la gestión del riesgo en POMCA (MADS, MINHACIENDA, Fondo de Adaptación, 2014) y el anexo de
los Alcances Técnicos para la elaboración o ajuste de los POMCA como parte de los términos de
referencia de los convenios para la elaboración o ajuste de POMCA, son documentos que definen en
detalle los análisis e información que debe considerarse para la elaboración de POMCA. Los
lineamientos y hojas de ruta para la incorporación de cambio climático en PEM y POMCA son
complementarios a estos instrumentos, buscando enriquecer las metodologías al clarificar como analizar
el cambio climático en cada fase de los instrumentos.
Además estos instrumentos de planificación ambiental incorporan análisis sectoriales con el ánimo de
articular el crecimiento económico con la dinámica ambiental (entendida como la complejidad de la
relación sociedad-naturaleza) que garantice el manejo integral y sostenible del agua en la cuenca. En
este sentido, la incorporación de cambio climático en los instrumentos de planificación ambiental, es
una oportunidad para incluir medidas de adaptación y mitigación al cambio climático que permitan por
un lado buscar la adaptación de los ecosistemas, los sistemas socioculturales y económicos a las posibles
nuevas condiciones en la cuenca y por otro lado que las actividades desarrolladas en la cuenca generen
medidas que disminuyan, eviten o capturen emisiones de gases efecto invernadero.
La incorporación del cambio climático en los instrumentos de planificación es una oportunidad de incidir
de manera positiva en la construcción de resiliencia, de la capacidad de adaptación de la comunidad y
en la toma de decisiones informadas para conservar y transformar el territorio con una visión de futuro.
32. 32
3. LINEAMIENTOS PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO
CLIMATICO EN PLANES ESTRATEGICOS DE MACROCUENCAS Y
PLANES DE ORDENACION Y MANEJO DE CUENCAS
HIDROGRÁFICAS
Los lineamientos para la incorporación de cambio climático en Planes Estratégicos de Macrocuencas
PEM y Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficos POMCA son pautas o tendencias que
orientan las actuaciones y decisiones de los actores en los procesos de elaboración y ejecución de estos
instrumentos.
De acuerdo con la revisión crítica realizada y presentada en resumen en el marco teórico, se proponen
los siguientes 12 lineamientos generales para incorporar cambio climático en PEM y POMCA. Estos
lineamientos son el punto de partida para realizar una revisión sobre las metodologías existentes para la
elaboración de estos instrumentos y proponer en detalle en las hojas de ruta de PEM y POMCA las
metodologías para incorporar cambio climático, insumos y productos. Ver figura 10
Figura 10. Lineamientos para incorporar cambio climático en PEM y POMCA.
33. 33
3.1. La incorporación de cambio climático en los PEM y POMCA es una estrategia
de adaptación y mitigación basada en la planeación ambiental del territorio.
De acuerdo con los lineamientos de la Política de Cambio Climático, definidos por el DNP, el Ministerio
de Medio Ambiente y el Consejo Nacional Ambiental y la Segunda Comunicación Nacional, una de las
estrategias de la política es “Mejorar la capacidad de adaptación a los impactos del cambio climático”,
donde se identifica en una línea de acción “Mejorar la capacidad de adaptación de los recursos hídricos
a los posibles impactos del cambio climático”. (MMA, DNP, 2002; IDEAM, 2010)
A través de los instrumentos de planeación ambiental del territorio como son los PEM y POMCA pueden
articularse la gestión del cambio climático, la gestión integral del recurso hídrico y la gestión del riesgo
de desastres. La planeación ambiental del territorio es considerada como una “medida adoptada de no
arrepentimiento”, que permite obtener beneficios en el escenario climático actual y diversos escenarios
futuros de cambio climático, debido a que es un punto de partida para tratar las tendencias proyectadas
de exposición, vulnerabilidad y fenómenos climáticos extremos (IPCC, 2012).
La incorporación de cambio climático en PEM y POMCA debe generar una oportunidad de articulación
de las actividades económicas, de conservación de los ecosistemas y socioculturales en la búsqueda del
desarrollo sostenible de la cuenca hidrográfica, al definir lineamientos y proyectos para evitar, disminuir
y/o capturar gases de efecto invernadero generados por las actividades realizadas en la cuenca.
La ordenación y manejo de cuencas se entiende como “el proceso de planificación, permanente,
sistemático, previsivo e integral adelantado por el conjunto de actores que interactúan en y con el
territorio de una cuenca, conducente al uso y manejo de los recursos naturales de ésta, de manera que se
mantenga o restablezca un adecuado equilibrio entre el aprovechamiento social y económico de tales
recursos y la conservación de la estructura y la función biofísica de la cuenca” (MADS, 2013) En este
sentido su elaboración por definición es una medida de adaptación al cambio climático que permite
identificar áreas estratégicas de conservación, preservación o recuperación y definir proyectos para
cumplir este objetivo. La incorporación de cambio climático en los instrumentos PEM y POMCA,
pretende analizar las evidencias del cambio climático en el clima presente y analizar escenarios
prospectivos teniendo en cuenta la incidencia del cambio climático en los diferentes componentes y
variables.
34. 34
3.2. Los PEM y POMCA deben armonizarse entre sí y con otros instrumentos de
planificación territorial y sectorial, con el ánimo de aprovechar la
información de cambio climático en los diferentes instrumentos e incorporar
proyectos que sean coherentes y articulados.
Los instrumentos de planificación territorial y sectorial deben articularse para integrar la información
que se gestiona en cada instrumento y para definir acciones y proyectos en armonía entre ellos mismos
relacionados con cambio climático.
La escala de trabajo de los PEM y POMCA permite realizar análisis de los efectos, evidencias y
oportunidades del cambio climático que a otras escalas pueden ser difíciles de identificar. Por lo tanto,
la información que se genere en estos instrumentos puede ser el punto de partida de los análisis de
instrumentos de planificación que se realizan a menor escala, como los POT. En particular la información
relacionada con el diagnóstico de los POMCA y su fase programática puede ser de gran utilidad a nivel
municipal para definir, de acuerdo con los efectos del cambio climático, posibles medidas de adaptación
y mitigación que deberán ajustarse a la escala y realidad local para la toma de decisiones. Los POMCA
son normas de superior jerarquía y por lo tanto las indicaciones y medidas que se definan deberán
acogerse en los instrumentos de planificación municipal.
Las medidas de adaptación y mitigación que se definan deben armonizarse con los diferentes
instrumentos de planificación, siguiendo lo contenido en la Guía técnica para la Formulación de los
Planes de ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas (MADS, 2013; pag 16), principalmente en las
indicaciones relacionadas con gestión de riesgo de desastres. En la escala local los municipios vienen
adelantando medidas de mitigación o prevención de riesgos de desastres, de adaptación al cambio
climático, conservación de ecosistemas estratégicos, disminución de vulnerabilidad por
desabastecimiento, entre otras, que deben ser consideradas en el POMCA, con una mirada desde el
cambio climático. Así mismo los POMCA aprobados pueden contener proyectos relacionados con
cambio climático que deben considerarse en los PEM, manteniendo la articulación en doble sentido que
se requiere en la planeación estratégica tal como se encuentra definidos en las guías metodológicas de
los instrumentos.
3.3. La planeación territorial debe trascender la temporalidad de los PEM y los
POMCA entendiendo que a futuro los efectos del cambio climático serán
cada vez más severos.
Los impactos del cambio climático pueden verse de forma inmediata o en el largo plazo. Sin embargo,
las acciones que se tomen en el corto plazo pueden asegurar una mejor adaptación al cambio. Por esta
razón, aunque el horizonte de un ciclo del POMCA es 10 años y de los PEM al año 2050 ( de acuerdo con
los PEM que se están desarrollando en la actualidad), debe pensarse que las medidas que se definan hoy
aportarán en un futuro a la sostenibilidad ambiental y sectorial de la cuenca. Con esta visión deben
definirse las medidas de adaptación y mitigación, de acuerdo con las mediciones y tendencias de
35. 35
emisiones de gases de efecto invernadero (inventarios de GEI) y los escenarios de cambio climático que
se encuentren vigentes.
La información y resultados que se obtengan en cada ciclo del proceso de Planeación estratégica
deberán ser usados en el siguiente ciclo, tal como se encuentra definido en la Guía para formulación de
POMCA. Aunque el POMCA pretende resolver problemáticas existentes con ciclos de 10 años, los
análisis tendenciales relacionados con cambio climático pueden realizarse usando los escenarios
vigentes que actualmente responden a las ventanas temporales 2011-2040, 2041-2070 y 2071-2011 de
tal forma que se prevean y definan estrategias de adaptación y mitigación del cambio climático que si
bien se desarrollan en la temporalidad actual de PEM y POMCA, serán un insumo que continuará en el
siguiente ciclo del PEM o POMCA produciendo impactos en el largo plazo.
3.4. El cambio climático debe incorporarse en cada fase de la planificación
ambiental del recurso hídrico, manteniendo coherencia entre los estudios,
los análisis y los resultados finales.
La estructura conceptual existente para la elaboración y seguimiento de los PEM y los POMCA se basa
en la ejecución de fases consecutivas y dependientes entre sí, es decir, cuentan con un orden basado en
la planeación estratégica, para la generación de resultados finales. Estos resultados deben guardar
coherencia con los estudios y análisis que sustentan su definición.
El cambio climático se incluirá en todas las fases de los POMCA y PEM, verificando que exista coherencia
que posibilite la definición de programas y proyectos en el caso de los POMCA y de líneas estratégicas y
actividades en el caso de los PEM. Los productos de cada fase son insumos que se usarán en la siguiente
fase de la planeación estratégica tejiendo la coherencia en todo el ciclo del proyecto. En las hojas de
ruta de cada instrumento se definirá la incorporación de cambio climático en cada fase del POMCA y su
coherencia.
El cambio climático también permite generar coherencia en el análisis por ciclos (10 años) donde para
cada ciclo se define un objetivo específico y una problemática por resolver. El cambio climático
trasciende el tiempo de cada ciclo, siendo necesario iniciar acciones de inmediato para lograr la
adaptación a las nuevas condiciones climáticas en un futuro.
3.5. En los procesos participativos de los PEM y POMCA, el conocimiento es la
primera medida de adaptación y mitigación de cambio climático
Los PEM y los POMCA cuentan con instancias de participación en la que se encuentran actores
representativos y agentes de cambio locales. Por tanto la participación es la oportunidad de articular la
Estrategia nacional de educación, sensibilización y formación de públicos frente al cambio climático,
para generar conocimiento como primera medida de adaptación y mitigación. De esta manera lo que se
busca es cualificar la participación en todas las fases de la planeación del recurso hídrico. La generación
de conocimiento y apropiación del mismo respecto a la adaptación y mitigación, facilitará la definición
36. 36
de proyectos y lineamientos de forma integral buscando acciones consensuadas y apropiadas con los
actores de la cuenca.
Por lo tanto en los PEM y POMCA deben generarse mecanismos de transferencia del conocimiento a las
comunidades y actores que habitan en una cuenca. Esta transferencia del conocimiento se realizará en
el marco de los procesos participativos existentes en los instrumentos.
3.6. El reconocimiento de medidas de adaptación y mitigación regionales y
locales es el punto de partida para identificar acciones apropiadas que se
pueden implementar en el ordenamiento ambiental del territorio.
En el territorio existen medidas de adaptación y mitigación que se están ejecutando como respuesta a
condiciones ambientales cambiantes que deben reconocerse y potencializarse. Las CAR y actores en la
cuenca deben: i) propiciar la adaptación desde lo local, tomando las soluciones y medidas
implementadas esparciendo el conocimiento, teniendo en cuenta los ejes tradicionales de apropiación
del conocimiento y los legados culturales que pueden propiciar la generación de nuevas tecnologías
basadas en conocimientos ancestrales; ii) fomentar acciones para reducir, evitar y capturar emisiones
que involucren a todos los actores de la Cuenca, convirtiendo el territorio en un laboratorio vivo que
permita “aprender haciendo”, a partir de las prácticas que realizan en la actualidad en caso de ser
potencialmente aplicables.
Por lo tanto en el PEM y POMCA se debe identificar en la fase de diagnóstico cuales actividades se
realizan en la actualidad que propicien la adaptación y mitigación al cambio climático como por ejemplo
las actividades económicas estacionales que responden a las variaciones del clima, los actividades y
proyectos de disminución de emisiones de CO2, entre otras.
Además deben identificarse medidas de adaptación y mitigación que otras entidades del SINA que estén
planificadas o se estén realizando para articular estas actuaciones y optimizar esfuerzos.
3.7. La incorporación de cambio climático en los PEM y POMCA debe apoyar el
proceso de definición de medidas que incrementen la resiliencia,
promuevan la adaptación de los ecosistemas, los sectores y las comunidades
y potencialicen las oportunidades de la gestión integral del cambio climático
La incorporación de cambio climático en los PEM y POMCA se realizará en cada fase de cada
instrumento, con el ánimo de incluir acciones que favorecen la resiliencia territorial y la capacidad de
adaptación y los potenciales de mitigación de los sistemas económico-productivos, ecológicos, el
sistema de áreas protegidas y sus ecosistemas, político-institucionales y socio-culturales y sus inter-
relaciones.
La incorporación de medidas integrales (adaptación+mitigación-cadena de valor) es una oportunidad
para generar beneficios derivados de la gestión integral y planificada ante el cambio climático.
37. 37
3.8. Deben tomarse decisiones en un mundo cambiante para disminuir los
riesgos asociados al cambio climático, teniendo en cuenta los eventos
amenazantes exacerbados dado un solapamiento entre la variabilidad y
cambio climático.
Los riesgos asociados con la variabilidad y cambio climático provienen del solapamiento entre la
vulnerabilidad (falta de preparación), exposición (de personas, ecosistemas o bienes en situación de
riesgo) y las amenazas (que desencadenan fenómenos o tendencias climáticas). Cada uno de esos tres
componentes puede ser objeto de medidas que reduzcan los riesgos. En los análisis hidrológicos, del
clima y amenazas por riesgo deberán incorporarse análisis de cambio climático, buscando analizar la
condición más crítica posible para determinar las posibles medidas de adaptación requeridas para los
eventos amenazantes extremos. Las medidas que se definan en los tres componentes deben ser
incorporadas en los PEM y POMCA, en las líneas estratégicas y en los proyectos, haciendo uso de la
información y conocimiento generado para la toma de decisiones. Cabe resaltar que este enfoque se
viene adelantando en la actualidad en los análisis de riesgo de los PEM y POMCA. El análisis adicional
que se propone está relacionado con incluir en los escenarios de riesgos, los eventos amenazantes
exacerbados por la superposición de variabilidad climática con cambio climático. Las medidas de
adaptación que pueden proponerse se presentan en el Catálogo de medidas de adaptación y mitigación
que hace parte de esta entrega y propician la adaptación a la variabilidad y cambio climático de forma
integral.
Se recomienda principalmente buscar reducir la vulnerabilidad y exposición utilizando los enfoques para
la adaptación presentados en el marco teórico de forma integral y no excluyente. Además debe
analizarse la información de vulnerabilidad que el IDEAM haya producido en el marco de las
comunicaciones nacionales que permita identificar a escala regional los posibles impactos del cambio
climático (IDEAM, 2010)
Aunque en la actualidad los informes internacionales no aseguran que los eventos extremos se vean
exacerbados con el cambio climático (NOAA´s National Centers for Environmental Information, 2015),
tampoco aseguran que los cambios en la frecuencia e intensidad no tengan una relación directa con este
fenómeno; de los eventos extremos registrados y estudiados por esta organización entre 2011 y 2015, el
40% confirmaron que el evento tuvo influencia de factores antropogénicos. Por lo tanto y siguiendo el
principio de precaución, se recomienda incorporar el cambio climático en los análisis de riesgos.
Los eventos amenazantes también podrían disminuirse de acuerdo con las proyecciones existentes de
temperatura y precipitación en los escenarios de cambio climático, de tal forma que las nuevas
condiciones pueden generar condiciones más favorables. Esta oportunidad puede aprovecharse en la
toma de decisiones para permitir una mejor adaptación y mitigación del cambio climático.
38. 38
3.9. La investigación y la gestión de información en el territorio debe evaluar los
efectos, evidencias y oportunidades del cambio climático y los resultados de
la implementación de las medidas de adaptación y mitigación.
El proceso de conocimiento de los efectos, evidencias y oportunidades de la gestión del cambio
climático en el territorio, debe partir de procesos de investigación y gestión de información y promover
nuevas líneas de estudio. La medición y seguimiento a los proyectos y líneas estratégicas relacionadas
con cambio climático definidas en los POMCA y PEM debe ser prioritaria. Lo anterior con el objetivo de
promover la investigación de las evidencias, impactos, oportunidades y potenciales acciones y sus
resultados para enfrentar el cambio climático. Este es un proceso cíclico y permanente que debe tener
una retroalimentación constante.
En las cuencas donde se considere se requiere mayor información sobre las evidencias de cambio
climático correspondientes a impactos, mediciones de algunas variables como altura del nivel del mar,
deglaciación, caudal, temperatura o precipitación, entre otras, debe iniciarse esta recolección de
información para la toma de decisiones futuras, de acuerdo con los requerimientos particulares de cada
cuenca. Los sistemas de información donde se organiza, administra, procesa y evalúa la información
existente en las cuencas son una excelente opción para la toma de decisiones robustas y la socialización
de los resultados obtenidos y por lo tanto se sugiere a las Corporaciones analizar la pertinencia de
implementar un sistema soporte de decisiones de acuerdo con sus necesidades y condiciones locales.
Cabe resaltar que esta necesidad de mayor información no es impedimento para iniciar el proceso de
adaptación de las cuencas al cambio climático y mitigación. Con la información disponible de las
comunicaciones nacionales es posible tomar decisiones.
3.10. Prepararse ante el cambio climático y sus efectos en las cuencas puede
generar beneficios en el presente y en el futuro. Estas acciones deben
cuantificarse y reportarse sus beneficios a los actores en las cuencas.
Las medidas que se definan en los instrumentos de planeación (PEM y POMCA) para prepararse ante el
cambio climático deben ser cuantificadas y surgir de la participación informada de los actores en las
cuencas con el ánimo de estimular la inversión en las medidas de adaptación y/o mitigación. Los
beneficios que generen en términos de disminución de inversiones ante eventos de desastres, mejores
condiciones de vida para población vulnerable, áreas de ecosistemas estratégicos conservados,
disminución de CO2 emitido, entre otros, deben medirse y reportarse a los actores en la cuenca. Cada
Plan deberá generar los mecanismos para dar a conocer esta información entre los actores.
39. 39
3.11. En la incorporación de cambio climático en PEM y POMCA se utilizará la
información disponible de las Comunicaciones Nacionales y los informes
bienales sobre Cambio Climático.
Los procesos de formulación de los PEM y POMCA deben utilizar la información disponible de escenarios
de cambio climático y vulnerabilidad climática realizadas por el IDEAM en el marco de las
comunicaciones nacionales e informes bienales sobre Cambio Climático, así como las mediciones y
tendencias de las emisiones de gases de efecto invernadero. Los ejercicios de monitoreo y reporte de los
compromisos nacionales ante la Convención Marco de las Naciones Unidas son la oportunidad de
generar, monitorear y documentar las circunstancias de país, los avances en las acciones y compromisos
y otras actividades en una dinámica de construcción colectiva. Se debe participar activamente, generar y
suministrar la información de soporte para adelantar los análisis respectivos.
Adicional a esta información mínima por considerar, puede incorporarse la información que las
Corporaciones Autónomas Regionales, las Universidades o institutos de investigación y toda aquella
información gestionada y producida a nivel local, regional y nacional que se considere pertinente y
aporte a la incorporación de cambio climático en la formulación y seguimiento de los PEM y POMCA
3.12. La incorporación de cambio climático en PEM y POMCA y la implementación
de las medidas de adaptación y mitigación definidas en los programas,
puede promover la diversificación de fuentes y mecanismos de financiación.
La implementación de los proyectos y acciones definidas para las cuencas relacionadas con medidas de
adaptación y mitigación al cambio climático, puede provenir de diversas fuentes y mecanismos de
financiación. Por lo tanto, se sugiere estudiar las diversas alternativas de financiación posibles para
lograr gestionar la más conveniente de acuerdo con la medida por implementar y potencializar las
oportunidades no sólo para el acceso a recursos, sino la generación de capacidades en la gestión de
proyectos, intercambio de experiencias, transferencias de tecnologías y cooperación técnico-científicas.
En el Catálogo de medidas de adaptación y mitigación se presenta un capítulo con fuentes de
financiación para proyectos en el marco de PEM y POMCA.
40. 40
4. HOJA DE RUTA PARA LA INCORPORACIÓN DE CAMBIO
CLIMATICO EN PLANES ESTRATEGICOS DE MACROCUENCAS.
En el presente capítulo se presenta la propuesta metodológica para incorporar cambio climático en
Planes Estratégicos de Macrocuencas, donde en la primera parte se resume la definición y fases de los
PEM de acuerdo con el Decreto 1076 de 2015 y el desarrollo que se ha logrado en este instrumento. En
la segunda parte se presenta la propuesta de incorporación de cambio climático para cada una de las
fases y su correspondiente
4.1. DEFINICION Y FASES DE LOS PEM
De acuerdo con el Título 3 Capítulo 1, Sección 2 del Decreto Único Reglamentario del Sector Ambiente y
Desarrollo Sostenible 1076 de 2015 (MADS, 2015), el Plan Estratégico de la Macrocuenca es un:
”Instrumento de planificación ambiental de largo plazo que con visión nacional, constituye el marco para
la formulación, ajuste y/o ejecución de los diferentes instrumentos de política, planificación, planeación,
gestión, y de seguimiento existentes en cada una de ellas. Parágrafo. Los planes estratégicos de las
Áreas Hidrográficas o Macrocuencas, se formularán a escala 1:500.000 o un nivel más detallado cuando
la información disponible lo permita”.
Dado el horizonte de tiempo en el que se formulan los PEM (al año 2050 para los PEM que actualmente
están en formulación) y su escala espacial de trabajo, los efectos del cambio climático pueden analizarse
tanto en el diagnóstico, estableciendo las variaciones existentes en la actualidad de acuerdo con los
registros históricos en variables como la precipitación, la temperatura y el cambio en la altura del nivel
del mar, como en la prospectiva al analizar bajo escenarios de cambio climático la posible incidencia de
los cambios en estas variables sobre los diversos componentes del ambiente (biofísico, socioeconómico
y cultural, político administrativo, funcional y gestión del riesgo).
De acuerdo con los alcances del PEM (MADS, 2015), este instrumento se constituye en marco para “la
formulación de los nuevos Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas al interior de la macrocuenca, así
como para el ajuste de los que ya han sido formulados, la formulación de políticas públicas sectoriales
de carácter regional y/o local, la formulación de los nuevos planes de acción cuatrienal de las
autoridades ambientales regionales, en concordancia con las obligaciones estipuladas en el Decreto
1200 de 2004 y demás normas reglamentarias, establecer criterios y lineamientos de manejo
hidrológico de los principales ríos de la macrocuenca por parte de las autoridades ambientales, en
términos de cantidad y calidad, al igual que los usos del agua a nivel de subárea…”, entre otros. En este
sentido los instrumentos de planificación se articulan y promueven la articulación de las estrategias de
adaptación y mitigación al cambio climático de forma integral, definidas en los PEM. Por lo tanto la
articulación con otros instrumentos de planificación ambiental y territorial se ha analizado y definido en
el Decreto 1076 de 2015 y no es objeto de este documento.
41. 41
De acuerdo con el citado Decreto, la competencia y formulación de los Planes Estratégicos, está a cargo
del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de manera participativa, con base en la información
e insumos técnicos suministrados por las autoridades ambientales competentes, las entidades
científicas adscritas y vinculadas de que trata el Título V de la Ley 99 de 1993 y la Corporación Autónoma
Regional del Río Grande de la Magdalena (CORMAGDALENA) en lo correspondiente a su jurisdicción
(…)”. Las cinco (5) macrocuencas del país son (ver Figura 11):
Figura 11. Áreas hidrográficas del país
4.1.1. Abordaje metodológico para la Formulación Planes Estratégicos Macrocuencas
El abordaje metodológico se realiza siguiendo los pasos utilizados en la elaboración del PEM de las
macrocuencas Magdalena Cauca y Caribe, debido a que en este trabajo se incorporó cambio climático y
en esta metodología se resaltan las actividades realizadas y se complementan con la propuesta
formulada Cabe resaltar que este documento no es una guía para la elaboración de PEM, sino un
complemento a las metodologías que ya se ha aplicado y que pueden ser usadas por los otras regiones.
Dada la biodiversidad de Colombia y sus áreas hidrográficas, esta aproximación metodológica sugiere
unos mínimos a tener en cuenta que deben ser ajustados y complementados de acuerdo con las
características propias de cada región, sus pobladores, grupos étnicos y colonos, sus ecosistemas y
sistemas socioeconómicos y culturales.
Los planes estratégicos de cada una de las Áreas Hidrográficas o Macrocuencas, deben contar con
cuatro fases: 1.Línea base; 2. Diagnóstico, 3. Análisis estratégico y 4. Acuerdos y acciones estratégicas. A
continuación se describe cada una de ellas; en primer lugar, la definición contenida en el Decreto 1076
de 2015 y en segundo lugar la estructura utilizada en los Planes Estratégicos de las Macrocuencas
Magdalena-Cauca y Caribe (MADS, 2015; MADS, 2015)(Ver figura 12):