Los indicadores financieros miden la capacidad de endeudamiento, estabilidad, utilidad y rendimiento de una empresa. Se clasifican en indicadores de liquidez, apalancamiento, rentabilidad y política de dividendos. Su importancia radica en ayudar a identificar los puntos fuertes y débiles de una organización para tomar medidas que corrijan desviaciones no detectadas en la planeación.