El trastorno desintegrativo infantil se caracteriza por una marcada regresión en múltiples áreas de desarrollo como la comunicación, las relaciones sociales y el juego, después de al menos 2 años de desarrollo normal. Suele asociarse con retraso mental grave y puede presentar síntomas neurológicos no específicos. Es muy raro y menos frecuente que el trastorno autista, aunque es más común en varones. Sólo puede diagnosticarse si los síntomas se presentan antes de los 10 años y tras un período prev