El documento habla sobre la importancia de un internet sano, especialmente para niños y adolescentes. Compara internet con la televisión, señalando que internet tiene menos regulación pero más usuarios productores de contenido. Recomienda que los adultos guíen a los menores y los acompañen en el uso de internet, sugiriendo sitios educativos y de entretenimiento apropiados para cada edad. También advierte sobre contenidos inapropiados como pornografía infantil y recomienda normas de uso concertadas en lugar de prohibiciones.