Un neurobiólogo descubrió que los humanos pueden oler la proporción de grasa en los alimentos, lo que podría haber ayudado a nuestros antepasados a detectar comidas ricas en calorías para sobrevivir. Dos científicos estadounidenses recibieron el Premio Nobel de Medicina en 2004 por revolucionar la investigación del olfato al descubrir los receptores olfativos y que el sistema olfativo puede reconocer y memorizar más de diez mil olores diferentes.